La Presidenta eligió el camino del pensamiento único
Moyano y la CGT ocupan el lugar casi vacío de una oposición coherente
El discurso de Hugo Moyano es en gran medida una respuesta esperable al mensaje de la Presidenta al asumir.
Los peronistas acompañamos los últimos gobiernos, pero nunca se nos ocurrió pensar que superaban a los de nuestro fundador ni que ese tema estaba en discusión.
La debilidad y dispersión de la oposición invitaban a un gobierno de unidad nacional y diálogo con los opositores
o a continuar con el intento de imponer un pensamiento único.
La Presidenta eligió esta última opción y el peronismo, que hoy no tiene lugar en su propio partido, le salió a responder desde la estructura sindical.
No fuimos ortodoxos ni obedientes en silencio con el General, ni se nos ocurre serlo con el actual gobierno.
Moyano y la CGT ocupan el lugar casi vacío de una oposición coherente y digna, hoy la democracia nacional da un paso en el camino de respetar la opinión ajena mientras somos capaces de defender la propia.
Un simple paso para fortalecer la democracia. Nos favorece a todos, en especial al gobierno nacional.