La policía inglesa, en la mira por las armas de electrochoque
LONDRES.- La policía inglesa ha tenido que defenderse públicamente tras la difusión de una investigación de la BBC que reveló que la fuerza utilizó armas de electrochoque (llamadas Taser por su nombre comercial) contra más de 400 menores en 2013.
Los datos, provenientes del Ministerio del Interior, muestran también que la policía incrementó el uso de estas armas contra menores en un 40 por ciento con respecto a 2012.
La persona más joven contra quien se disparó una Taser tenía 14 años y la mayor, 82. Estas armas disparan electrodos que generan una descarga eléctrica de hasta 50.000 voltios, que inmovilizan al individuo y son potencialmente capaces de provocar serios problemas de salud, o incluso la muerte. Sin embargo, el gobierno afirma que las Taser no son letales y que son una mejor alternativa a las armas de fuego. Sostiene que la policía las utiliza sólo contra criminales violentos, aunque admite que ha habido un uso descuidado en los últimos años.
Por su parte, las organizaciones de derechos humanos dicen que en realidad las Taser son más peligrosas de lo que las autoridades afirman.
La clave, aseguran, es promover un estricto control sobre su uso y un mayor entrenamiento para los policías, con garantías de que se utilizarán sólo como último recurso.