La manera en que hablamos del cáncer es como lo pensamos
“Pobre, debe ser terrible”. “El cáncer es estrés y traumas no resueltos”. “Te quiero pelada, siempre sos linda”. “Mis amigos no me tratan como antes, y algunos desaparecieron”. “Mi empresa no puede depender de tu salud”. “Perdió la batalla contra el cáncer”.
Estas son algunas de las frases que formaron parte de la campaña “La enfermedad y las palabras” de 2018 desde el Servicio de Psicooncología del Instituto Alexander Fleming (IAF). De manera anónima y voluntaria, los pacientes compartieron frases, comentarios y opiniones que escucharon desde el ámbito familiar, médico, social, laboral y de los medios de comunicación.
El propósito era analizar el impacto emocional de la comunicación en la experiencia de enfermar de cáncer.
“La enfermedad la vive el paciente, pero su sentido lo construimos entre todos, es social” (Bernardo Paniagua, La construcción mediática de la sanidad). En la actualidad, en nuestro país, las enfermedades cardiovasculares siguen siendo la principal causa de muerte; sin embargo, para el imaginario colectivo, aún hoy decir “cáncer” es sinónimo de muerte.
Las representaciones sociales son un concepto muy usado en las ciencias sociales para describir una forma particular del conocimiento, cuya función es la elaboración de los comportamientos y la comunicación entre las personas. Por medio de ellas, interpretamos, tratamos de comprender, nos explicarnos y nos apropiarnos de los acontecimientos de la realidad cotidiana. Las representaciones sociales en torno al cáncer no son simples opiniones sobre la enfermedad. Crean imágenes, construyen mitos y creencias, reproducen estigmas, determinan actitudes que se verán reflejadas en comportamientos, tanto en el ámbito de la prevención, en las atribuciones causales frente al diagnóstico y en la adherencia o no a los tratamientos.
Reflexionar sobre estas representaciones en torno al cáncer, permite entender cuáles son los significados que tienen para quien lo padece y comprender las posturas ante la enfermedad.
Ser diagnosticado de cáncer es una de las situaciones más estresantes en la vida de una persona. Produce una ruptura y enfrenta al paciente con la certidumbre del diagnóstico y con la incertidumbre de su evolución. Impacta al paciente, a su familia, a su entorno social. Si bien la forma de afrontarlo variará según los significados que cada uno de los individuos atribuyan a la enfermedad y al estar enfermo, el temor a la soledad y la necesidad de acompañamiento familiar, la importancia de la comunicación con el equipo médico y un tratamiento riguroso desde los medios de comunicación, que prescinda de metáforas bélicas y heroicas, surgen como las necesidades comunes de los pacientes.
Las frases citadas son sólo algunas de las publicadas en nuestro libro El cáncer y las palabras. Porque la manera en que hablamos del cáncer es como pensamos el cáncer.
Psicooncóloga del Instituto Alexander Fleming
Con la colaboración de las licenciadas Sonia Checchia y Nancy Ferro, psicooncólogas del Instituto Alexander Fleming