La hora americana, con acento latino
Pacific Standard Time LA/LA, proyecto impulsado en California por la Fundación Getty, dedica más de 70 muestras al arte de nuestra región
"La mejor patria es el taller", dice la frase pintada sobre la tela que cuelga de una soga, en una sala donde la cumbia invita a bailar. En las paredes, escritas con lápiz, hay otras frases como ésta: "Sorry. No sé hablar ni escribir muy bien en inglés". La escena no llamaría tanto la atención si no fuera por el contexto: fue montada en el Lacma, uno de los museos más importantes de California, por una artista argentina que trabaja con niños y adolescentes en Villa Fiorito.
Fernanda Laguna tiene el mismo apellido que Juanito, el personaje creado por Antonio Berni que está presente en otra muestra del mismo museo. Juanito va a la ciudad se titula la obra creada en 1963 con restos de madera y chatarra. Hay algo de aquella odisea del niño de la villa que llegó a ganar un premio en la Bienal de Venecia en esta aventura de Fernanda, que viajó desde la ciudad natal de Maradona hasta la cuna de Hollywood.
Aquí conmueve a visitantes de todo el mundo con sus proyectos humildes pero poderosos, como el mítico espacio Belleza y Felicidad o el taller destinado a ayudar a víctimas de la violencia de género. Se exhiben en el marco del proyecto Pacific Standard Time LA/LA, impulsado por la Fundación Getty, que abarca más de 70 muestras con obras de un millar de artistas. Sólo en el Lacma, cuya fachada fue intervenida por los rosarinos Dolores Zinny y Juan Maidagan, exponen también Guillermo Kuitca y el dúo Mondongo.
Este grupo, integrado por Juliana Laffitte y Manuel Mendanha, participa además de otra megamuestra relacionada con los personajes de Disney. Junto a sus imponentes instalaciones realizadas en plastilina se reunieron obras de Liliana Porter, Daniel Santoro, Marcos López y Florencio Molina Campos, entre otros artistas argentinos.
"Esto no tiene precedente", dijo a LA NACION la semana pasada Andrea Giunta, cocuradora con Cecilia Fajardo-Hill de la muestra Mujeres radicales: arte latinoamericano 1960-1985 en el museo Hammer, otra de las imperdibles de un programa que abarca todo el sur de California. "Es la oportunidad de ver un mapa que nunca se va a volver a ver, con decenas de exhibiciones que abordan el tema de las fronteras, la deslocalización y los derechos civiles", agregó bajo el implacable sol de Los Ángeles al entrar al lanzamiento de PST LA/LA en el museo Getty.
"Hoy es un día que cambiará la historia del arte", coincidió minutos más tarde la coleccionista venezolana Patricia Phelps de Cisneros, ante un auditorio lleno que incluía a veinticinco periodistas de nueve países. "Estamos trabajando en la creación de un Instituto de Investigación para el Arte Latinoamericano en el MoMA, inspirado en el trabajo que hicimos para esta muestra", agregó Cisneros en diálogo con LA NACION. Se refería a la didáctica exposición de arte concreto que reúne en el Getty obras de su colección, realizadas por artistas brasileños y argentinos como Juan Melé, Alfredo Hlito y Raúl Lozza.
El mismo espíritu pedagógico impulsó la muestra dedicada a la fotografía argentina, también alojada en el Getty, que abarca 160 años de historia y llegará a Fundación Proa en marzo próximo. Ese mismo mes se inaugurará en el Malba otra centrada en la obra de David Lamelas que ahora se exhibe en la Universidad Estatal de California.
Lo primero que sorprende al llegar al campus de Long Beach son los duchampianos "señalamientos", rectángulos blancos que rodean tres objetos en el parque, tal como Lamelas hizo hace medio siglo en el londinense Hyde Park. Este pionero del arte conceptual encarna como pocos la figura del artista nómade, ya que desde hace décadas trabaja en Buenos Aires, Los Ángeles, Nueva York, Bélgica, Berlín y París.
Otro gran ejemplo es Marta Minujín, la reina latina del arte pop, que días atrás se encontraba desarmando su Partenón de libros prohibidos en la Documenta de Kassel mientras se inauguraba en Los Ángeles Mujeres radicales. El registro de su performanceLeyendo las noticias se cuenta entre las 260 obras de más de un centenar de artistas. Liliana Porter, Marcia Schvartz y Delia Cancela sí dijeron presente, junto con decenas de colegas de la región.
"Muchas de ustedes no se conocen", dijo emocionada Giunta al presentar esta muestra que demandó siete años de investigación, y que viajará el año próximo al museo Brooklyn y a la Pinacoteca de San Pablo. "Todas son radicales en muchos sentidos –agregó–. Entre ellos, el uso del lenguaje, la experimentación y las condiciones políticas extremas en las que trabajaron."
"¿Y qué? ¡Negra! Sí. ¡Negra! Soy." La voz de la fallecida artista peruana Victoria Santa Cruz se impone desde su video Me gritaron negra en una de las salas del Hammer. Tiene la misma energía de resistencia con la que se expresa Emigdio Vasquez, el "padrino" del movimiento Chicano. La figura del "Che" Guevara asoma en un mural de este último que enorgullece a los vecinos de la ciudad de Orange. Realizado en 1979, recoge la tradición del muralismo mexicano y comparte el espíritu de la célebre Manifestación pintada por Berni en 1934.
En español o en inglés, la fuerza del mensaje se mantiene también intacta en las frases seleccionadas por León Ferrari para su libro Palabras ajenas, publicado en 1967 y traducido ahora para su presentación en el marco de PST LA/LA. Es el eje de una muestra y una performance de ocho horas en el centro Redcat que involucró a ochenta lectores, y que se exhibirá el año próximo en el Pérez Art Museum Miami.
Adolf Hitler, Lyndon B. Johnson, el papa Pablo VI y Goebbels se cuentan entre los personajes públicos citados por el artista, fallecido en 2013, que creó estos "collages literarios" con información publicada en distintos medios y dejó indicaciones para su puesta en escena. Representada en Londres en 1968, y en Buenos Aires cinco años después, esta obra recuerda una vez más por qué Ferrari ganó el León de Oro en la Bienal de Venecia. "Ojo por ojo, diente por diente", repiten los actores ahora, en tierras de Estados Unidos que alguna vez fueron mexicanas. "¿Tendremos otro Vietnam?", se preguntan, en este momento tan delicado para la política mundial.