La chavización creciente jaquea a la propiedad privada
La saga de la toma del campo de Santa Elena de la familia Etchevehere es propia de la imaginación de un Carlos Fuentes o un García Marquez.
Una hermana, quien se siente acreedora, busca el auxilio del abogado Juan Grabois. Más que su argumental jurídico, el atractivo del colega es que combina su verba con una fuerza de choque. Así, irrumpen con prepotencia en el campo y, con el hecho consumado y el cambio de escenario, provocan nuevos litigios en pos de consolidar la posición y hacer toma de ganancias.
Como el servicio es más "completo" que lo que normalmente ofrece un abogado, se anunció -sin pudor- que el equipo "liberador" cobrará la friolera del 40%, arropado bajo la romántica figura de granja ecológica cultivada por compañeros. Como bonus track, Grabois enrola a las fuerzas nacionales y así, creativamente, presenta el tema como una cuestión de género y embarra el expediente introduciendo a Victoria Donda con el Inadi y al Ministerio de Justicia de la Nación.
Además de la verdad y del derecho de propiedad, también se hace trizas el federalismo, porque se trataba de una disputa local, que la Constitución reserva a la jurisdicción provincial.
He actuado en mi vida profesional en muchos conflictos societarios. Es la primera vez que el Estado central considera que debe actuar en estos conflictos entre particulares. El motivo es político. Se trata de escarmentar al expresidente de la Sociedad Rural y del exministro de Macri. No se sigue ninguna regla, ningún criterio, ningún protocolo, que no sea el de la venganza.
El lanzar fuerzas irregulares detrás del patrimonio de sus opositores políticos nos retroatrae a prácticas nefastas que caracterizaron nuestras guerras civiles. Es el chavismo que resucita nuestras peores tradiciones autoritarias.
Es responsabilidad del presidente de la Nación poner freno a estos desvaríos. Además, si, como reclama la mayoría del país, el Presidente finalmente se inclinase por el apego por la ley y el orden, descubrirá como el respeto a la propiedad privada, a la seguridad jurídica y a la independencia judicial contribuirán decisivamente a generar la confianza que él y los 45 millones de argentinos necesitamos para reconstruir a la Argentina luego de la crisis de la pandemia y la cuarentena.
Abogado UBA, Director de Será Justicia