La Argentina recibió un premio al despropósito
Un gigantesco abismo vuelve a separar al microcosmos que rodea a la Presidenta del país real
Entre el premio que entregó la FAO a la Argentina por la lucha contra el hambre, el impresionante pabellón instalado en Expo Milán que reza "Argentina te alimenta" y los miles de chicos desnutridos que existen en el norte argentino hay un gigantesco mundo de abismales diferencias. Pero Cristina Kirchner no repara en todo esto: para la Presidenta el país vive de la década ganada y en un maravilloso lugar donde sólo hay un 5% de pobres.
El desopilante debate comparativo entre los índices de pobreza de Alemania y la Argentina opacó el tema más profundo que eludió la Presidenta en su paso por Roma. La FAO entregó un premio por su lucha contra el hambre a un país en que la desnutrición sigue siendo un mal endémico y llega a índices cercanos al 20% en cuanto a inseguridad alimentaria de niños desprotegidos se refiere.
"La Argentina, ha sido premiado por sus resultados en la lucha contra el hambre. No es que solamente hemos tenido un programa alimentario: hemos tenido un proyecto de país, un modelo de sociedad, más equitativa, más justa y más igualitaria, que es el mejor antídoto en la lucha contra el hambre y la pobreza", indicó una exultante Cristina Kirchner al salir de la sede de la FAO en Roma. No fue la única expresión polémica que lanzó la jefa del Estado. También aclaró como una verdad de perogrullo que en la Argentina "alimentos hay, lo que le falta es dinero a mucha gente para adquirir ese alimento".
La FAO entregó un premio por su lucha contra el hambre a un país en que la desnutrición sigue siendo un mal endémico y llega a índices cercanos al 20% en cuanto a inseguridad alimentaria de niños desprotegidos se refiere.
Lo paradójico en la entrega del premio es que ese organismo de Naciones Unidas está presidido por el ex ministro de Lula Da Silva, José Graziano da Silva quien no debería desconocer la dura realidad argentina. La radiografía de la desnutrición en el país resulta escalofriante tan sólo con mirar las fotos de niños desnutridos y varios datos llamativos.
La última encuesta nacional de nutrición y salud señala que la desnutrición aguda en la Argentina existe y que la Tasa de Mortalidad infantil (TMI) ha descendido entre 2003 y 2013. Pero siguen observándose casos severos en las zonas de extrema pobreza en el NOA y NEA.
El Ministerio de Salud de la Nación informó que en 2013 murieron 891 personas en la Argentina a causa de la desnutrición, cifra que se engrosa en los últimos años de vida. Según estos registros oficiales, menores de 14 años fallecidos por esta causa fueron 62.
El Observatorio de la Deuda Social de la UCA reveló que la inseguridad alimentaria alcanza en el país a un 20,2% de niños y adolescentes . Y según los datos del Centro de Políticas Económicas de Alimentación la inseguridad alimentaria crónica es del 8 por ciento.
El ocultamiento del hambre fue precisamente lo que ocurrió con el debate montado por el jefe de Gabinete
El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, dijo recientemente sobre el problema de desnutrición: "Son situaciones que nos muestran una realidad muy dura que se repite en varios lugares del país. Esto a veces toma estado público y otras queda en lo oculto de una zona, o parecieran muertes por alguna enfermedad, pero siempre vinculadas a la pobreza o a no tener la alimentación adecuada".
El ocultamiento de este flagelo fue precisamente lo que ocurrió con el debate montado por el jefe de Gabinete Aníbal Fernández al comprar los datos de pobreza de Alemania y de la Argentina. Se desvió el tema de fondo de la desnutrición infantil que aún persiste en el país.
Para añadir mayor confusión y en medio de una clara estrategia distractiva la Presidenta visitó ayer el pabellón argentino en la Expo Milán que está representado con dos grandes silos de cereales en un stand de 1907 metros cuadrados y el cartel de "Argentina te alimenta". El lema se lee en distintos idiomas y tiene cuatro ejes de apoyo: el país alimenta a su pueblo, al mundo, el conocimiento y el debate. En ese contexto de euforia desmedida de los funcionarios presentes, Cristina Kirchner dijo: "No somos solamente alimentos, sino también tecnología y ciencia".
Atrás quedó el premio al despropósito de la FAO, la polémica por los índices de pobreza y, sobretodo, el debate inconcluso por los niños desnutridos del norte argentino. Un gigantesco abismo vuelve a separar al microcosmos que rodea a la Presidenta del país real.
lanacionar