Holdouts: el discurso presidencial bajo la lupa
Es increíble que nos hable de su gestión con la deuda externa como si fuera una comentarista
Cristina Kirchner dijo anteayer por cadena nacional:
1) El fallo de Thomas Griesa establece una tasa usuraria -reescribiendo un contrato de deuda por hacer una interpretación de la cláusula pari passu que no registra antecedentes- de 1600% a los US$ 48.7M que los denominados fondos buitre pagaron por la deuda en default que compraron en 2008.
2) Sostuvo que si se hubiera pagado el juicio de Griesa en su momento (hace aproximadamente un año), por US$ 1.300M, hoy la Argentina tendría que pagar al contado o emitir deuda por US$ 20.000M.
3) Señaló que si se hubiera emitido deuda por US$ 20.000M le estaríamos pagando al 7% que no aceptaron los canjes, casi la mitad de lo que se le pagó al 93% que aceptó los canjes entre bonos y efectivo.
4) Indicó que a partir del fallo de Griesa, podría aparecer otro juez de los Estados Unidos que ordenara a la Argentina pagar al 93% que aceptó los canjes con quita, las mismas condiciones que el 7% que no aceptó los canjes, litigó y ganó juicios para cobrar el 100% de la acreencia sin ninguna quita.
La realidad es:
1) Según documentos del propio gobierno, el valor nominal de los títulos de deuda argentina en manos de los fondos que litigaron en el juzgado de Griesa fue de US$ 428M que, con las tasas y punitorios aplicados por Griesa desde 2001 (año del default) hasta 2012 (primer fallo de Griesa) suman US$ 1.500M. Esto representa un ajuste hacia arriba de su reclamo nominal original de 250% (y no de 1600% como dice Cristina) fruto de aplicar una tasa promedio acumulativa anual del 12% durante los 11 años que van desde el default en 2001 hasta 2012, cuando comenzaron a caer los fallos contra la Argentina. A su vez, la tasa del 12% está casi en la mitad del rango de entre 9% y 15% que son las tasas aplicadas por Griesa en sus fallos, tasas similares a las del megacanje de Cavallo de 2001.
La ganancia de 1600% no es ninguna tasa aplicada por Griesa en sus fallos sino que es la ganancia que hicieron los fondos litigantes comprando la deuda en default a precios de default en el mercado secundario...si la información fuera cierta. Este es un dato que tira el Gobierno sin mostrar documentación alguna a partir de que dice que NML compró los títulos en default en 2008 pagando US$ 48.7M en el mercado, cuando la justicia de Nueva York le reconoce a su demanda un valor de US$ 832M (832/48.7=1.608%).
¿Se le puede creer eso a quien acaba de decir ante el auditorio de la FAO que la pobreza en Argentina es del 5% cuando esa persona es la misma que dejó de medir la pobreza hace casi 2 años? Y si así fuera...¿cuál es el punto? Después de todo, son títulos de deuda emitidos por el Gobierno para financiar los déficits fiscales votados por casi toda la clase política cuando vota los presupuestos que no paran de aumentar el gasto público. Más aún, Cristina hoy ha vuelto a endeudar al país a tasas usurarias de país en concurso que son el doble de los países de la región y por si fuera poco, hablando al mismo tiempo de desendeudamiento. Y mejor ni mencionar las ganancias que los Kirchner hicieron comprando terrenos fiscales a dos pesos con cincuenta a la vera del paraíso del glaciar Perito Moreno...solo para no ir muy atrás en el tiempo.
Sobre la interpretación de la cláusula pari passu (en criollo, la prohibición de crear 2 categorías de bonos para la misma deuda: los bonos que pagó porque aceptaron los canjes y los que no pagó porque rechazaron los canjes –Ley Cerrojo-) que no tiene conexión alguna con los punitorios a pesar de que Cristina mezcló todo en su cadena, ¿qué remedio le quedaba a Griesa que no fuera bloquear los pagos de la deuda externa emitida por los canjes para hacer valer la letra del contrato (de los bonos emitidos en los 90) con un país que se había insolventado en el exterior para no ser embargado y que se negó por un década a negociar con los que no aceptaron los canjes a pesar de la insistencia de la justicia de Nueva York.
2) Los US$ 20.000M se hubieran tenido que pagar "igual" porque es el valor de los US$ 7000M que no entraron a los canjes 2005 y 2010 (el famoso 7%) ajustados por las tasas y punitorios aplicados por Griesa desde 2001 (año del default) hasta 2012 cuando se da el primer fallo de Griesa (7000 más 250% da 24.500 que, neto de los que no litigaron, dejaron de litigar o fallecieron, da los US$ 20.000M).
Es más, si hubiéramos pagado los US$ 1300M cuando quedó firme el fallo de Griesa en junio de 2014 cuando la Corte Suprema de los Estados Unidos rechazó tomar el caso argentino, en vez de entrar en desacato, no hubiéramos acumulado tasas y punitorios que elevaron los US$ 1300M a más de US$ 1600M hoy. Además de acatar el fallo de Griesa, hubiéramos parado el taxi en contra que infla el monto de la deuda con los "me too" porque luego de pagarle a Singer, la lógica hubiera sido negociar con ellos. Todo esto hubiera llevado a que la deuda con los holdouts fuera sustancialmente menor a los US$ 20.000M. Al revés de lo que dijo la Presidenta, pagar era mejor negocio que no pagar. Recursos sobraban: el gasto público creció US$ 80.000M desde que Griesa ordenó pagar US$ 1300M a los fondos y la Argentina se negó a hacerlo.
Es increíble que la jefa del Poder Ejecutivo, poder ejercido de manera omnímoda, casi totalitaria durante más de una década, nos hable de su gestión con la deuda externa como si fuera una comentarista. No conocíamos los dotes de Cristina como gran contorsionista.
Lo que sí está ocurriendo es que de los US$ 20.000M de holdouts, ya hay US$ 7000M compuestos por U$S 1300M del juicio original de Singer (que ya son aproximadamente US$ 1600M por los intereses acumulados y punitorios) más los US$ 5400M de los últimos días a los cuales Griesa les ha dado el mismo fallo de pari passu.
3) Es cierto pero eso es así por culpa del gobierno de los Kirchner por haber hecho canjes de deuda que dejaron la bomba de tiempo de US$ 7000M afuera sin aceptación y sin negociar por más de 10 años luego del default, motivo por el cual se ajustaron por altas tasas de interés y punitorios durante mucho tiempo (la Ley Cerrojo de febrero de 2005 violaba los términos y condiciones de los títulos emitidos en los 90) y por otro lado es importante tener en cuenta que los que aceptaron el discount en los canjes 2005 y 2010 tuvieron una quita sustancial del 66.3%, monto que bajó el monto nominal de la emisión.
Si los US$ 20.000M del reclamo de los holdouts son más del 50% de las reservas del BCRA como dijo Cristina ayer (cosa que es cierta), la responsabilidad es totalmente del kirchnerismo por el manejo que hizo con la deuda (como se describió antes) y porque desde el asalto al BCRA en 2010 por parte del Gobierno (cuando se lo reemplaza de manera totalmente irregular a Martín Redrado por Mercedes Marcó del Pont), el Banco Central le entregó al Tesoro un monto similar al stock de hoy de US$ 34.000M de reservas (parte de las cuales fueron recuperadas después mediante la colocación de deuda externa) para pagar gastos (deuda pública y otros...el dinero es fungible) que deberían haberse atendido con recaudación.
4) La cláusula RUFO (Rights Upon Future Offers) fue esgrimida por el Gobierno durante todo 2014 como el argumento para no acatar la sentencia de Griesa: no se podía correr el riesgo de que los que aceptaron la quita de los canjes de deuda, pidieran las mismas y favorables condiciones que los litigantes en el juzgado de Griesa. Este argumento era falso porque la cláusula RUFO se disparaba solo si la mejora para los que no aceptaron los canjes versus los que sí, era voluntaria. Hay pocas cosas menos voluntarias que pagar dinero por perder un juicio. Era casi inexistente la probabilidad de que ella se disparara. Pero eso no es todo. La RUFO regía hasta el 31 de diciembre de 2014, o sea hasta fines del año que acaba de pasar. Ya no está más. Así que la Argentina, al revés de lo que dice Cristina, está hoy en perfectas condiciones de pagar el 100% a los litigantes de manera "voluntaria" (en realidad hay un sentencia firme de la justicia de Nueva York que lo dispone) sin que ello la obligue a pagar lo mismo a los bonistas que aceptaron los canjes con quita de 2005 y 2010.