Frustrado golpe de Estado en Washington
Para ser más preciso... Frustrado Golpe de Estado... Aunque parezca una alocada ficción pergeñada por un imaginativo director de Hollywood, el episodio ocurrido el pasado 6 de enero es uno de los eventos mas trágicos en la mas consolidada y antigua república democrática del mundo.
A los hechos : 1) el Presidente Trump calificó a las elecciones presidenciales del pasado noviembre como un "escandaloso fraude", sin que haya el más mínimo elemento de la realidad que lo haga siquiera sospechoso (varias cortes estaduales y la propia Corte Suprema así lo acreditaron)
2) Trump arengó a sus partidarios, 3 días antes, en la puerta de la Casa Blanca, promoviendo una "marcha sobre Washington" (equiparable a la de Mussolini sobre Roma en 1922) para impedir la certificación parlamentaria del resultado electoral que consagró como presidente electo a Joe Biden.
3) Calificó a los protagonistas, en pleno desarrollo del asalto armado al Capitolio, de " honestos y patrióticos ciudadanos" que estaban intentando evitar que les "robaran ilegítimamente las elecciones que Trump había ganado"; durante el sedicioso ataque, murieron 4 personas y numerosos agentes del orden resultaron heridos.
4) El Presidente ordenó a su Vicepresidente y a los jefes de los bloques republicanos de ambas cámaras "bloquear" la certificación parlamentaria (esos dirigentes desobedecieron dicha orden pero una minoría de representantes y senadores la acataron y votaron en contra o se retiraron del recinto).
5) Tardía y cobardemente, frente a la evidencia del fracaso de la asonada, la repudió para evadir las consecuencias legales de su propia conducta como líder, promotor material y autor intelectual de la falacia del supuesto fraude nunca ocurrido y su intento de alterar violentamente la independencia de los poderes del Estado.
A esta apretada síntesis, hay que sumarle muchos otros actos que acreditan la intención de consumar un golpe de Estado, que el expresidente George W. Bush caracterizó como "propio de una republica bananera".
Un hecho de semejante gravedad no puede diluirse con el pretexto de que solo faltan pocos días para que este individuo abandone la Casa Blanca. El mundo está inmerso en un encarnizado debate entre el resurgir de las peores versiones del nacionalismo populista aislacionista y la necesidad de incrementar la cooperación global, especialmente en una coyuntura de pandemia y recesión económica.
Este debate nos compete directamente, y nuestra sociedad tiene que tomar muy en serio los riesgos institucionales que enfrentamos: todas las democracias son "estructuralmente frágiles", tal como lo afirmara acertadamente el Presidente Electo de los Estados Unidos, Joe Biden... y tienen que ser defendidas todos los días, sin claudicaciones ni concesiones que la vayan debilitando y tergiversando.
Valga el mal ejemplo para no repetirlo.
Exembajador argentino en Estados Unidos, la Unión Europea, Brasil y China