El no-horóscopo de 2025
Llegó el cambio de calendario y con eso se renuevan las esperanzas, los proyectos y se activan las ganas de que todo cambie; una mirada humorística a los astros
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LA NACIONJoaquín Garau
Un nuevo año invita a soñar, a proyectar en grande, a planificar viajes y a rogar que el dólar acompañe todo lo anterior. En estos primeros días del año, donde todo está por verse, los economistas no se arriesgan con proyecciones y los políticos están (siguen) de vacaciones, es momento de basarse en la vieja tradición milenaria de mirar al cielo y confiar en los astros. A continuación, el no-horóscopo, es decir, el horóscopo no chequeado por ningún astrólogo, ni respaldado por ninguna estrella ni constelación pero más cercano al día a día de los argentinos.
- Aries: prometiste que este año te ponés en forma y el primer día hábil llevás al trabajo las sobras del vitel toné, del arrollado primavera y de la entraña con salsa criolla. Sorpresa: te anotan en Cuestión de Peso.
- Tauro: te pusiste de meta en la mesa de fin de año acomodar tus finanzas personales. Sorpresa: leíste mal el cierre de la tarjeta de crédito y ahora le debés más a Visa que la Argentina al FMI. Trabajo: a la mañana sumás horas como delivery y a la tarde como UBER.
- Géminis: pensás que el amor será tu norte, tu objetivo y tu propósito para este 2025 y soñás con casarte con tu pareja. Es decir: llegó la hora de sentar cabeza. Sorpresa: te dejás el celular desbloqueado y te leen todo lo que tenías escondido. Clave del año: bajarse Tinder.
- Cáncer: arrancaste con todo el año nuevo en la playa, vestido de blanco y rodeado de buena energía. Salud: te insolás dentro de tu propio auto volviendo en el cambio de quincena por la Ruta 2.
- Leo: limpiaste la casa, prendiste un sahumerio y te pusiste a escuchar un podcast de meditaciones guiadas antes de dormir para renovarte energéticamente. Sorpresa: se reactivó la obra en construcción del edificio junto a tu casa y te levantás todos los días a las 7 a.m. a puro taladro y amoladora.
- Virgo: le decís que no a las relaciones tóxicas, a las personas que restan y a los fantasmas del pasado que son un lastre y decidís avanzar. Sorpresa: tu exnovia te empieza a seguir en Instagram. Salud: Clonazepam de 1 miligramo.
- Libra: dejás atrás un 2024 turbulento y te enfocás en lo importante: la familia, los amigos y estar bien con vos mismo, para demostrarte que la clave es la paz interior. Sorpresa: se te quema la heladera. Finanzas personales: quebrás y te declarás insolvente.
- Escorpio: tu cuerpo pide romper el molde y hacer eso que siempre quisiste, por eso te anotás en clases de bachata. Salud: se aplica la “lógica de Shakira”, las caderas no mienten y la tuya necesita un cambio urgente. A tener en cuenta: los pantalones blancos no son para todo el mundo.
- Sagitario: los vientos laborales soplan y descubrís que es un buen momento para pedir un aumento de sueldo después de años de ser productivo, responsable y buen empleado. Trabajo: te echan. Finanzas personales: monotributo.
- Capricornio: después de ahorrar por años decidís cambiar el auto y comprarte esa pick-up que siempre te gustó. Economía: aumentan las patentes, la nafta, las cocheras, los peajes, los seguros y los trapitos. Trabajo: hacés fletes.
- Acuario: soñás con que tu equipo levante cabeza, te mentalizás con un campeonato digno y esperás refuerzos para un año único. Salud: te quedás difónico insultando a la dirigencia por no pasar el repechaje de la Copa Libertadores.
- Piscis: decidís viajar, salir del área de confort, romper tus propias barreras y conocer ese mundo gigante lleno de maravillas. Sorpresa: los pilotos de Aerolíneas Argentinas están de paro y FlyBondi te cambia Ezeiza por el aeropuerto de Montevideo. Clave del año: nunca jamás volvés a salir de tu casa.
Por Joaquín Garau