El Congreso independentista de 1815
En Concepción del Uruguay, entonces Arroyo de la China, provincia de Entre Ríos, se produce el 29 de junio de 1815 la que debe ser considerada la primera convocatoria independentista de nuestra historia, un año y diez días antes de la del 9 de julio de 1816. Quienes lo hicieron fueron las provincias litorales, bajo el liderazgo de José Gervasio Artigas: Banda Oriental, Misiones, Entre Ríos, Corrientes, Santa Fe y una delegación de Córdoba que asistió a ambos congresos.
Debieron pasar seis años desde Mayo de 1810 para que Buenos Aires y las provincias que reconocían o soportaban la jefatura porteña abandonaran la ficción de “la máscara de Fernando VII” y aceptaran públicamente su propósito independentista, que hasta entonces había sido disimulado por conciencia de su debilidad ante la reacción española, también por la oposición de Gran Bretaña que ya había logrado su objetivo de comerciar con la colonia del Plata rota su sujeción al imperio hispánico. Además, porque Inglaterra era un imperio colonial y no le interesaba fomentar insurrecciones en las colonias, aunque fuesen ajenas.
En el caso de los “Pueblos Libres” no hizo falta una declaración independentista formal, pues el artiguismo daba la independencia como algo obvio, establecida a partir del mismo 25 de Mayo, de allí su nombre de “libres”. Decisión evidenciada años antes en las Instrucciones de Artigas a sus delegados en la Asamblea del año XIII.
Una prueba de la realización de este Congreso es que ninguna de las provincias nombradas concurrió a Tucumán pues el trámite independentista ya lo habían cumplido. También porque sostenían un ideario federalista que no era compartido por los delegados en la otra convocatoria, a la que concurría Buenos Aires, enemigo declarado de las provincias artiguistas.
Lamentablemente no han sido encontradas las Actas de dicho Congreso, debido a que tuvo la informalidad de la asistencia mayoritaria de sectores populares como gauchos e indígenas, con pocos abogados, o a que se perdieron en aquellos tiempos de correos interrumpidos por la guerra. Como también se perdieron las actas del Congreso de Tucumán, pero que pudieron ser reconstruidos a partir de una copia en poder del secretario Medrano.
De todas maneras, hay referencias claras sobre la realización de dicho Congreso de los Pueblos Libres y de su objetivo:
1) En la memorable oración inaugural José Gervasio Artigas expresó: “La soberanía particular de los pueblos será precisamente declarada y ostentada, como objeto único de nuestra revolución; la unidad federal de todos los pueblos e independencia no sólo de España sino de todo poder extranjero (...)”
2) Cuando Artigas tomó conocimiento de la Declaración de Tucumán le escribió al Director Supremo Pueyrredón el 24 de julio de 1816: “Ha más de un año que la Banda Oriental enarboló su estandarte tricolor y juró su independencia absoluta y respectiva. Lo hará V.E. presente al Soberano Congreso para su Superior conocimiento.”
3) El diputado por Santa Fe llevó instrucciones del gobernador Candioti, las que reproducían casi literalmente las instrucciones de los delegados orientales a la Asamblea del Año XIII: “Primeramente, pedir la declaración de la independencia absoluta de éstas colonias, que ellas están absueltas absolutas de toda obligación de fidelidad a la corona de España y Familia de los Borbones y que toda conexión política entre ellas y el estado de la España, es y debe ser totalmente disuelto”.
4) El Cabildo de Corrientes dejó sentado las conclusiones de sus debates al respecto: “Viéndose penetrado de la utilidad y necesidad de convenir, consultando la beneficencia del pueblo, su representado, con las benéficas y liberales ideas con que el señor General (Artigas) promueve la santa causa de los pueblos (…)Se resolvió declarar la independencia bajo el sistema federativo y al General Don José de Artigas por Protector”.
El reconocimiento de la declaración de las provincias federales en Concepción del Uruguay no va en desmedro del Congreso de Tucumán, ya que ambos son territorialmente complementarios. Éste convocó a las provincias occidentales, andinas (Cuyo, Noroeste, Alto Perú, con el agregado de Buenos Aires) en tanto el Congreso entrerriano convocó a las provincias orientales , litorales. Puede decirse que ambas asambleas, más allá de sus diferencias doctrinales, respondieron a una misma pulsión independentista que no podía demorarse por más tiempo.