Dime cuánto ahorras y te diré en quién te convertirás
No, no tengo el oráculo griego que adivina el futuro, pero sí tengo otra herramienta con la cual voy a predecir con bastante exactitud cómo será tu edad madura, o lo que es lo mismo, en quién te convertirás de aquí a 30 años.
Para hacer esta “futurología” voy a proyectar escenarios en base a tu presente, porque como ya lo dijo Peter Drucker, “la planificación a largo plazo no es pensar en decisiones futuras, sino en el futuro de las decisiones presentes”.
Luego de realizada la “magia” entenderás la importancia que tienen los esfuerzos presentes en tu vida financiera futura, por más pequeños que sean.
El objetivo de máxima de la columna de hoy es demostrar cuantitativamente la importancia de incorporar el hábito del ahorro en nuestra vida futura, y para ello es que “viajaremos en el tiempo” para determinar cuál será el monto final que tendrás en tus arcas ante distintos escenarios de ahorro presente, vivenciando la alquimia de las finanzas conocida como interés compuesto.
Pero antes de empezar, debemos consensuar algunos supuestos clave que hacen al cálculo que determinará el resultado final.
Ajustando la máquina del tiempo: supuestos a tener en cuenta
La economía argentina es históricamente una de las más volátiles de la región, gracias a las crisis financieras vividas en las últimas décadas, devaluaciones, restricciones cambiarias, etc…
Pero ahora que el actual gobierno busca denodadamente reestablecer la previsibilidad en el campo financiero local, tiene quizá más sentido realizar proyecciones como la que haremos a continuación, en donde debemos establecer ciertos parámetros de cálculo sin que los mismos distorsionen los resultados.
Dicho esto, realizar esta predicción en pesos argentinos no tiene demasiado sentido en un país en donde la inflación sigue comiendo mes a mes el poder adquisitivo, a un ritmo menor que en el año pasado, pero importante de todas formas.
Lo que vamos a hacer entonces es dolarizar los cálculos al tipo de cambio presente, asumiendo que, en el largo plazo, la suba del dólar con respecto al peso será más o menos igual que la inflación, supuesto que en el corto plazo puede no materializarse (de hecho, no lo está haciendo en lo que va del 2017) pero que en el largo plazo sí suele cumplirse con bastante precisión.
Por último, asumiremos una tasa de rendimiento por sobre los montos ahorrados del 7% anual en dólares para el largo plazo. Este supuesto no debería generar suspicacia si tenemos en cuenta algunas consideraciones:
- Actualmente se puede invertir en pesos a una tasa superior al 22% con un dólar “planchado”. Si, por ejemplo, el peso se devalúa 10% de acá a fin de año, el rendimiento neto sería de 12% en dólares.
- El rendimiento promedio anual de los activos de renta variable en la bolsa de EE.UU. medido por el S&P 500 es del 11,30% anual, con lo cual el 7% propuesto no suena ilógico en absoluto.
- La FED (Banco Central de EE.UU.) se encuentra actualmente en un ciclo de suba de tasas de interés, con lo cual se estima que en los próximos años los rendimientos para inversiones en dólares se incrementarán, haciendo que nuestro target de 7% anual en dólares se vuelva cada vez más factible y pueda incluso superarse.
Hechas estas aclaraciones, comencemos ahora sí nuestros cálculos en base a 3 escenarios posibles de ahorro y sus diagnósticos.
Ahorrás 0 pesos por mes
A mediados de mes te invade la culpa y decís “basta, cuando cobre separo unos mangos para ahorro pase lo que pase”, pero cuando llega el momento priorizás gastos y nuevas compras y volvés a postergar lo impostergable.
Si ahorrás 0 pesos por mes, es muy probable que dentro de 30 años te conviertas en una persona angustiada y temerosa de tu situación financiera, que dependa de la jubilación estatal y de la “ayuda” que familiares cercanos puedan otorgarte.
Nadie en su sano juicio quiere ese porvenir, y tengas la edad que tengas siempre se está a tiempo de comenzar a incorporar los hábitos de ahorro.
En esta nota titulada “7 hábitos que te impiden ahorrar” podrás detectar los obstáculos consientes e inconscientes que impiden tu crecimiento personal y cambiar tu realidad económica para bien.
Ahorrás 1.600 pesos por mes
Las tarifas suben todos los meses, las necesidades personales y familiares se multiplican y para colmo muchas empresas reducen su personal. El contexto no propicia el ahorro pero, déjame decirte, nunca lo hará: siempre habrá excusas para procrastinar lo que sabés que tenés que hacer.
Lo dicho sirve para resaltar la figura de aquel que sin ganar demasiado y haciendo todos los malabares posibles, consigue separar todos los meses 1.600 pesos (aproximadamente 100 dólares).
Si ahorrás 1.600 pesos por mes y los invertís al 7% anual en dólares, dentro de 30 años tendrás 121.997 dólares (casi 2 millones de pesos al tipo de cambio actual), con lo cuál te convertirás en una persona que si bien no tiene para “tirar manteca al techo”, al menos poseé sus propios recursos que complementa luego con la jubilación estatal sin necesitar ayuda de familiares cercanos.
En esta nota titulada “Ahorra o nunca” encontrarás algunos tips valiosos que te ayudaran a profundizar tu recorrido.
Ahorrás 9.000 pesos por mes.
El ahorro no es exclusivamente un tema de ingresos. Claramente, una persona que gana menos de 10.000 pesos mensuales tendrá serias dificultades, pero ello no quiere decir que una persona que gane 45.000 pesos tenga el camino allanado ni mucho menos.
9.000 pesos por mes pueden ser ahorrados por personas o parejas consideradas de clase media alta con buenos hábitos de ahorro.
Si ahorrás 9000 pesos por mes (unos 562 dólares) siguiendo los parámetros vistos, dentro de 30 años tendrás 685.623 dólares (casi 11 millones de pesos al tipo de cambio actual) y te convertirás en una persona sin problemas económicos, que podrá disfrutar su tercera edad a pleno e incluso quizá ayudar también a parientes cercanos con problemas financieros momentáneos. La jubilación en este escenario será un ingreso secundario.
Más valioso que darle consejos de ahorro a este perfil es recomendarle maneras de adelantar el retiro laboral, y esta nota titulada “Como retirarse antes con la regla del 4%” podrá ser beneficiosa en ese sentido.
Conclusión
En este link podrás realizar tu propio cálculo en función de lo que ahorrás o pensás ahorrar por mes. Donde dice “Ahorro periódico mensual” debés colocar el monto a ahorrar todos los meses (en dólares), en el campo “Número de períodos” debés colocar la cantidad de años en la cuál te estás proyectando (30 en los ejemplos que vimos hoy) y en “Tasa de interés anual” el 7% del que hablamos al principio de esta columna. Una vez cargados los datos verás el resultado más abajo, en donde el campo “Ahorro total” es el monto que acumularás al final del camino.
Según lo expuesto puede deducirse fácilmente que, contrariamente a lo que piensan muchos, no hace falta tener un “sueldo de gerente” para comenzar a planificar nuestras finanzas personales basándonos en el ahorro como hábito cotidiano: con pequeñas sumas mensuales pueden acumularse valores importantes al final del recorrido.
El enfoque de pagarse primero a uno mismo, esto es, retirar antes de cualquier gasto los 1.600, 9.000 o cualquier otro importe intermedio o superador, me parece una buena opción para adoptar en esta línea al momento de cobrar el sueldo todos los meses.
No pensar acerca de temas de dinero y, sobre todo, no accionar al respecto, es una comodidad excesivamente cara que en algún momento pasará factura.
Por el contrario, comenzar ahora mismo con esta gimnasia financiera, por más pequeño que sea el aporte que podamos hacer, puede derivar en una suma más que gratificante en el momento en el cuál más vamos a necesitarla.