Deudas y pesos bancarizados: tips en tiempos de coronavirus
La violenta irrupción del coronavirus en nuestras vidas está generando cambios abruptos que en nada se parecen a los causados por crisis económicas anteriores.
En términos financieros, la distinción entre ganadores y perdedores no pasa tanto por cuánto capital se había acumulado a la fecha, sino más bien por el acceso al mismo y por la manera como se generan los ingresos.
El mundo digital hace gala de su capacidad de adaptación a la coronacrisis, mientras que el analógico sufre más padecimientos de los que cualquiera podría haber imaginado hace tan solo unas semanas.
Los perdedores económicos de esta pandemia, entonces, son aquellos que realizan un trabajo presencial y no pueden trasladar sus tareas al mundo virtual, mientras que son ganadores quienes venían trabajando desde la casa o pudieron reperfilar sus labores hacia el teletrabajo.
Por supuesto, se trata de afirmaciones que no tienen en cuenta casos particulares como, por ejemplo, el de la madre soltera que hacía home office y dejaba a su hija pequeña al cuidado de la abuela. En tiempos de cuarentena, debe cuidarla ella y, por lo tanto, no tiene posibilidades de dedicarle al trabajo más de unas horas al día.
Lo cierto es que los trabajadores del mundo analógico ven caer peligrosamente sus ingresos o directamente los ven evaporarse por completo si son cuentapropistas, mientras que los digitales se encuentran con igual o mayor cantidad de trabajo e ingresos que antes y con un menor nivel de gastos debido a que no pueden comer afuera, ir al cine, organizar un asado, etc.
En la columna de hoy, analizaremos la situación de ambos sectores, sabiendo que no existen recetas mágicas ni universales que funcionen para todos por igual. En consecuencia, intentaremos segmentar lo mejor posible nuestros tips para mejorar su alcance y efectividad. Comenzaremos con los que peor la están pasando, focalizándonos en el uso de las tarjetas de crédito en contextos tan adversos como el actual.
Tips para manejar las tarjetas de crédito durante la cuarentena
El Banco Central extendió los vencimientos de los plásticos hasta el 13 de abril. Se trata de una buena noticia para quienes vieron disminuir sus ingresos y deben seguir realizando gastos para subsistir.
La medida no soluciona el problema, sino que lo patea para más adelante. Por lo tanto, se recomienda:
1) Reducir los gastos al mínimo: el hecho de que se difiera el vencimiento de los consumos no debe ser utilizado como una excusa para seguir gastando, sino más bien todo lo contrario.
Es un buen momento para revisar los resúmenes de cuenta anteriores y cancelar las suscripciones que no se usan, pasar los abonos fijos de telefonía a prepagos, etc. En esta columna, podrás encontrar algunos consejos para reducir y optimizar tus gastos.
2) Corroborar el límite crediticio: que se aplace el vencimiento no quiere decir que se amplíe el límite crediticio de tu tarjeta. No está claro si los consumos realizados luego de la fecha de cierre regular de la tarjeta impactan o no sobre el límite crediticio.
Supongamos que tu tarjeta vencía el 31 de marzo, pero ahora con la prórroga vence el 13 de abril. Los consumos que hagas en ese lapso seguirían impactando sobre tu línea crediticia de marzo y no se pasaría al siguiente vencimiento. Por lo tanto, si comprás en cuotas, tenés que saber que lo que impacta en tu línea de crédito no es el valor de la cuota sino el importe total del producto financiado.
Por ello, la financiación de gastos corrientes (por ejemplo, las compras en el supermercado) no aparece como una buena alternativa en estos momentos, salvo que no tengas opción.
Pasemos ahora a realizar algunas recomendaciones para aquellos que mantienen sus ingresos y redujeron sus gastos por la cuarentena.
Tips para que no se deprecien tus pesos bancarizados
Desde este mismo espacio, la semana pasada analizamos la situación atípica que genera esta cuarentena en relación con los bancos y el acceso restringido a los ahorros.
A este escenario (en constante revisión por parte del Gobierno) se le suma el cierre de la mayoría de los negocios, incluso para compras online, lo que está generando en algunos sectores de la población un exceso de pesos bancarizados. Es necesario invertirlos para no perder poder adquisitivo.
Veamos dos tips que te pueden ayudar:
1) Elegir opciones conservadoras y líquidas: estamos transitando momentos históricos y los mercados están muy convulsionados. Frente a este escenario, hasta que pare la tormenta, los fondos comunes de inversión (FCI) en pesos conocidos como "money market" representan una buena opción por tener costos muy bajos o nulos de suscripción y rescate y por ofrecer el acceso al dinero invertido en el día o en 24 horas. Todos los bancos comercializan FCI propios o de terceros, que pueden ser suscriptos vía homebanking de manera muy sencilla abriendo en forma online una cuenta comitente vinculada a la caja de ahorro. Los FCI "money market" son los menos riesgosos y volátiles. El valor de su cuotaparte suele subir levemente todos los días, dependiendo de las tasas de interés que rigen en el mercado de renta fija en pesos (Plazos Fijos, Obligaciones Negociables, Cuentas Remuneradas y más). Sus rendimientos hoy llegan hasta el 36% anual y, por lo general, se encuentran en línea con la inflación proyectada. Antes de suscribir a un fondo, es importante leer los folletos explicativos del banco para conocer en detalle en qué instrumentos invierte, cuál es su rentabilidad pasada (2019) y la proyectada (2020).
2) Tener en cuenta las opciones de monetización instantánea:en una columna publicada tiempo atrás, analizamos el fenómeno de las Fintech y la monetización instantánea que ofrecen. Mercado Pago, InvertirOnline y Wilobank, entre otras, ofrecen tasas que van del 10% al 24% anual por los saldos que tenemos en cuentas a la vista similares a las cajas de ahorro de los bancos, que no ofrecen interés por esos depósitos. En las Fintech ese dinero invertido se mantiene en las cuentas a la vista y puede ser utilizado en cualquier momento.
Si bien son opciones que se encuentran por debajo de la inflación, el acceso inmediato a los fondos y la opción de utilizarlos para consumos directamente con el celular hace que valga la pena considerarlas.
Conclusión
La situación es apremiante para algunos y tranquila para otros, financieramente hablando. En lo que todos coincidimos es que queremos regresar cuanto antes a nuestra vida anterior; recuperar toda o parte de la normalidad perdida. En el mientras tanto habrá que ir lidiando con las contingencias económicas de la mejor manera y esperar que el Estado brinde contención a quienes más lo necesitan.
Desde esta columna iremos monitoreando el día a día y aportando nuestro granito de arena para tratar de capear el temporal con la menor cantidad de daños directos y colaterales.