Reseñas: La cena de Electra, de Nelson Specchia
Nacido en Chaco y establecido en Córdoba, el politólogo, periodista y escritor Nelson Specchia es dueño de una escritura que se coloca de espaldas a los imperativos de las modas literarias y busca oponer el valor del anacronismo a lo actual como horizonte narrativo dominante. Los diez relatos que componen La cena de Electra transitan una variedad de épocas y lugares. Responden, en todos los casos, a los cánones del cuento clásico, con una estructura cuidadosamente diseñada que favorece la efectividad de los finales. Escritos en un español diáfano, prolijo, netamente literario, rescata una oralidad que no es la del lenguaje de todos los días sino la de aquellas expresiones certeras que la lengua provocó, alguna vez, al torcerse en la dicción campesina o en la voz amasada de los inmigrantes. Hallazgos de un pasado sin tiempo que relucen entre los anaqueles del archivo familiar: “dormir el vino”, por ejemplo, para designar la actividad que se realiza después de un almuerzo de domingo; o la medida abstracta que indica la cocinera del último cuento a su criada: “Echale lo que permita”.
“La rebelión de los insectos” relata, con una presencia siniestra de lo natural que recuerda a Horacio Quiroga y una terminología científica que homenajea la entomología clásica, la resistencia de los insectos nativos de la América precolombina frente a las oleadas de colonos europeos. En “La dulce mano de los ogros”, un detective recibe un encargo curioso en su oficina madrileña por parte de una asturiana que huye de su marido. “El dedo de Teresa” cuenta con un narrador insólito: el meñique de la Santa de Ávila, testigo de la historia de España desde los tiempos de la Inquisición hasta el franquismo.
En “La huida es un sueño verde”, que contiene reminiscencias de “La intrusa”, de Borges, Specchia se sumerge en el imaginario gauchesco, contando la historia de dos hermanos santiagueños dedicados al cuatreraje. “Joaquín, el necio” es la versión de una rumba del español Albert Pla trasladada a un bar de Palermo. Inmigrantes genoveses en el campo chaqueño, una pareja de argentinos en Florianópolis en plena crisis de 2001, un gitano iniciado en el ocultismo en las sierras de Córdoba durante la última dictadura argentina son otros de los personajes que pueblan estos cuentos. El último, que da título al libro y relata una sofisticada venganza familiar perpetrada a través del sibaritismo cosmopolita de la protagonista, le valió a su autor el premio Max Aub de cuento.
En un año abundante en celebraciones de la figura y la obra de Borges como fue 2016, estos relatos constituyen, a su modo, otra forma de homenaje al escritor al afirmar una de las variantes que puede adoptar su herencia literaria.
LA CENA DE ELECTRA
Por Nelson Specchia
Edhasa
141 páginas, $ 215