Reseña: Biblioteca bizarra, de Eduardo Halfon
Hablar de biblioteca suele implicar un recorrido de lecturas. No es el caso del reconocido escritor centroamericano Eduardo Halfon (Guatemala, 1971) que en Biblioteca bizarra propone una serie de crónicas inusuales, habla de lectores singulares, libros imaginarios, momentos íntimos como la paternidad y la traducción y, en esa diversidad, trama una colección que, como diría Walter Benjamin, linda con el caos del recuerdo.
Suele decirse que los detalles son clave para revelar la esencia de un personaje: en este caso, lo verdaderamente importante no es el contenido de los títulos que se mencionan sino la relación que estos establecen con quienes los leen. En los textos de Halfon un personaje se define por el modo en que interactúa con sus libros. El doctor Sancha, por ejemplo, no tiene biblioteca porque regala los ejemplares después de leerlos. Piensa que las bibliotecas solo son trofeos y le gusta leer metido en la bañera. No se preocupa porque se le mojen las páginas: son solo libros, afirma.
Biblioteca bizarra es la primera obra de Halfon que se edita en la Argentina, pero en el resto del mundo su proyecto literario lleva más de trece títulos publicados, entre textos inclasificables y novelas autobiográficas, que hablan en líneas generales de la memoria familiar –de raíces judías europeas– y también de la memoria colectiva. Los ocho textos reunidos en esta oportunidad no son la excepción: crónicas íntimas, biografías imaginarias, cuentos hipnóticos se enlazan hasta borrar las fronteras entre lo real y lo imaginario.
Hay crónicas de encuentros, como la visita que Halfon le hace al escritor francés Patrick Deville, y su biblioteca enteramente de libros blancos y, al mismo tiempo, cuentos fantásticos como "La biblioteca de cabecera". El relato muestra el encuentro del personaje Halfon con un amigo que le muestra su colección, que parece infinita, en el estilo de "La biblioteca de Babel". Tiene una serie de libros escritos a mano: son los libros inexistentes de autores de ficciones como Herbert Quain. Sí: más borgeano imposible.
A estas alturas, los temas y las citas eruditas podrían llevar a la confusión de pensar que se trata de una escritura intrincada. Sucede lo contrario. Quizás Halfon logre probar en Biblioteca bizarra aquello que piensa de la escritura, que no son solo palabras sino algo "mucho más cercano a la música, a respirar, a caminar por el agua"
BIBLIOTECA BIZARRA
Por Eduardo Halfon
Godot. 145 páginas. $ 600