Controvertido retrato de Giuliani
Escribe Alberto Armendáriz
Gracias al liderazgo que demostró durante las horas que siguieron al 11 de septiembre, el ex alcalde neoyorquino Rudoph Giuliani se convirtió en lo más parecido a un superhéroe, mítico e intocable... hasta ahora.
En una osada movida que despertó gran revuelo, el artista chino Zhou Tiehai presentó la semana pasada en el Museo Whitney un gran retrato de Giuliani posando al estilo "realismo socialista", muy a lo Mao, y apoyado en dos pilas de excremento de elefante. Se trata de una "venganza artística" de Tiehai, quien con el cuadro, titulado Libertas, dei te servent (Libertad, que los dioses te protejan), recuerda una de las mayores polémicas que rodeó la administración del ex alcalde, en 1999. Entonces, durante la muestra Sensation , en el Museo de Arte de Brooklyn, Giuliani amenazó con terminar el subsidio municipal al museo si no retiraba una pintura de Chris Ofili en la que se representaba a una Virgen negra cuyos senos estaban hechos con estiércol de elefante. Giuliani calificó la obra de "basura enferma" y puso a toda la comunidad artística en su contra. Y ahora les llegó el momento de la venganza.
"Super Rudy" no es el único del que se mofan los artistas extranjeros que exponen en la muestra The American Effect . En una instalación original y que es toda una metáfora de la crisis que atraviesa el país, Pilles Barbier, originario de Vanuatu , presentó una sala de un asilo de ancianos en la que se ven esculturas de los principales superhéroes de los cómics norteamericanos. Allí están, decrépitos, en sillas de ruedas, con bolsitas de suero y mirando televisión Superman, el Capitán América, Hulk y Gatúbela, entretenidos con un fondo musical de melodías populares de la década del cincuenta.