7 tips para reventar la tarjeta de crédito
Las tarjetas de crédito pueden ser utilizadas de manera eficiente o pueden transformarse en armas de destrucción masiva para sus portadores. La experiencia me indica que no hay muchos casos donde se dé el término medio.
Sabiendo de la reacción a la defensiva de quienes suelen utilizarlas sin escuchar consejos -más bien, rechazándolos con desdén-, es que decidí escribir esta columna. Los autocríticos captarán la ironía y verán cómo aprovecharla. Los contreras que lo saben todo y aún más, quizá en esta oportunidad también practiquen lo inverso de lo que se indica y cuiden al fin sus bolsillos. Siguiendo estos 7 tips, tendremos al Veraz como siguiente parada de nuestra hoja de ruta financiera. Vamos a sacarle brillo a las tarjetas, a gastar la banda magnética y a llenar la casa de productos que no necesitamos.
1) Pensá en las tarjetas como un aumento de tus ingresos disponibles
Si ganás 25.000 pesos y no te alcanza, ¿por qué habrías de privarte de comprar lo que querés cuando tenés las tarjeras de crédito a mano? Solicitá al menos tres tarjetas de distintos emisores que te brinden cada uno 15.000 pesos de límite crediticio y como por arte de magia tus ingresos se habrán casi triplicado. El crédito vino a tu vida para que aproveches el aquí y ahora, después verás cómo pagar.
2) Especulá con los distintos vencimientos de los plásticos
Si seguiste el tip anterior y tenés al menos tres tarjetas, te conviene realizar las compras pagando siempre con la que venza en la fecha más alejada. Tené en cuenta que el vencimiento suele darse entre 9 y 11 días después del cierre de la facturación informado en el resumen de cuenta.
3) No pagues el total: aprovechá la opción del Pago mínimo
El Pago Mínimo es el pago que debemos realizar sí o sí antes de la fecha del Vencimiento Actual que figura en el resumen de cuenta. De no hacerlo, el emisor nos bloqueará la tarjeta. El pago mínimo corresponde al 4 o 5% del total a abonar. Puede tratarse de gastos realizados en el último período o de deudas de períodos anteriores. ¿Para qué vas a pagar más que eso con la inflación que hay? Total, todo lo que compraste va a aumentar de precio, si lo comprás ahora y luego utilizás el Pago Mínimo, el costo se licuará gracias a la suba de precios. ¿Te asustan los intereses del 140% o más? Bueno… Son anuales… Mensualmente son del 12%. Tampoco es tanto con la inflación que hay…
4) Aceptá siempre cualquier financiación en cuotas
Llegás a la caja del supermercado con el carrito desbordado y cuando sacás la tarjeta, luego de preguntarte si sos consumidor final, esa voz mágica te pregunta: "¿Quiere hacerlo en 3, 6, 9 o 12 pagos?" La respuesta ya la conocés: un "sí" rotundo, ¡en 12 o 18, si es posible! Que la inflación se encargue del resto… Recordá que el lema de nuestra religión es disfrutar ahora. Más adelante verás cómo "levantar el muerto".
5) Si te cancelan una tarjeta, retirá dinero utilizando otra tarjeta y cancelá la deuda
Es verdad que existe la posibilidad de que el banco emisor te cancele el plástico cuando tu línea crediticia se resiente a raíz de la financiación constante de los gastos corrientes https://www.lanacion.com.ar/2217359-tarjetas-credito-lenta-agonia-tu-linea-crediticia, pero ya sabemos que todo tiene solución: podés extraer dinero de un cajero utilizando otra tarjeta de crédito (esa extracción te llegará en el próximo resumen, ¡pero para eso falta!) o solicitar un crédito a sola firma para conseguir los fondos necesarios para pagar lo mínimo indispensable de lo que te pida el banco para volver a habilitarte la tarjeta.
6) Llevá siempre todas tus tarjetas encima: nunca se sabe qué oportunidad puede surgir
¡No dejes ninguna tarjeta afuera de la billetera! Las mejores compras son las no planeadas. ¿Y si pasás por una vidriera y te querés dar un gusto? Ahora que hay crisis económica seguro los comercios no están vendiendo nada y tienen ofertas increíbles. ¿Cómo no las vas a aprovechar? Comprar barato siempre es ahorrar. Eso sí, no te olvides: comprá solamente en aquellos comercios que te ofrezcan cuotas.
7) Si el letrero dice "cuotas sin interés", andá sacando la tarjeta
Cuotas sin interés es cuotas sin interés. La letra chica es para los obsesivos o los escépticos que por no creer en nada se pierden las mejores oportunidades. No te dejes convencer por aquellos que llaman a caminar y comparar precios antes de comprar. Nos vas a encontrar el mismo producto con un descuento del 25 o 30% para pagos en efectivo. Si te vas sin comprar, después otro se lo llevó con su tarjeta y vos te quedás sin nada. Si las cuotas dicen ser sin interés, el costo seguro lo asumió el comerciante, que tiene que vender; o el banco, que necesita mostrar clientes activos.
Conclusión
¿Sentiste que alguno de estos tips era correcto? ¿Estuviste de acuerdo con al menos una de estas afirmaciones? Si es así, no quisiera estar en tus zapatos, menos ahora que el dólar parece haber despertado nuevamente y las tasas en pesos vuelven a subir para frenar una eventual estampida.
¿Te preguntás qué tiene que ver eso con el uso de tu tarjeta de crédito? Nada… Mejor dejémoslo ahí. ¡Vamos a reventar el plástico sin piedad! Mejor tomar el camino más corto. Bastante te esforzás para ganarla. No tiene sentido que también debas esforzarte en cuidarla. De última, el Veraz no puede ser tan terrible como dicen. Quizás puedas pagarles con tarjeta en cuotas para que un día te saquen de la "lista negra de morosos irrecuperables". Tal vez sí, tal vez no…¡pero para qué preocuparse ahora! Habiendo tantas cosas en cuotas para comprar: sería una picardía pensar en eso.