De los lectores: cartas & mails
Discurso falaz; Precisiones; Inverosímil; Comunión en San Luis; Incongruencia; Veredas;
Discurso falaz
"Sorry, con la comida hoy estamos igual que en Venezuela", dijo la señora expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. A modo ilustrativo, quisiera recordarle que en la gestión de su difunto consorte y en los dos períodos consecutivos de su gobierno se perdieron doce millones de cabezas de ganado, los tambos cerraban y enviaban sus vacas al Mercado de Liniers, y no estuvimos tan lejos de comer pan de mijo, como en los 50, por falta de trigo, todo ello so pretexto de abaratar la mesa de los argentinos. Por lo tanto, su discurso es falaz. Sorry.
Pedro C. Matteucci
matteuccipedro@gmail.com
Precisiones
Cristina Kirchner ha declarado: "Sorry, con la comida estamos igual que Venezuela". No domino las estadísticas alimentarias de la Argentina, pero puedo suministrarle alguna información sobre Venezuela. Según Cáritas, el 23% de los niños menores de cinco años sufren desnutrición; la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida revela que 90% de las familias no pueden comprar suficientes alimentos a diario y que, en promedio, el venezolano perdió 11 kilos de peso en solo un año. También revela que el 61,2% de los venezolanos se acuestan con hambre. En marzo de 2018, el director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos de la ONU, David Beasley, calificó de "catastrófica" la crisis alimentaria de Venezuela. Según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros, para adquirir la canasta alimentaria, una familia de cinco miembros necesita 63,8 salarios mínimos, de 40.000 bolívares. En zonas vulnerables del país, según Cáritas, el 53% busca alimentos en contenedores de basura. De acuerdo con la encuestadora Delphos, cinco de cada diez ciudadanos comen menos de tres veces al día y 10% comen solo una vez al día. En la raíz de esta desgracia alimentaria están las expropiaciones y el asedio de los regímenes de Chávez y Maduro a agricultores, ganaderos y procesadores privados y a las empresas suplidoras de semillas e insumos agrícolas. De manera concomitante, el favorecimiento de la importación de alimentos ha sido fuente obscena de corrupción, como la denunciada por el Departamento del Tesoro norteamericano, por la importación de bolsas de comida, que involucra a la propia familia presidencial.
Espero, señora Kirchner, que estas sucintas estadísticas le sean útiles para añadirle alguna precisión a su comparación sobre "la comida" entre nuestros dos países.
Ramón Peña
Pasaporte venezolano N° 130.259.460
Inverosímil
Se mueven entre la tilinguería del Cuchuflito, la Pindonga y "con la comida estamos igual que Venezuela", entre los exabruptos de Aníbal y cía. y el ejercicio violento de la patota "vamo a volver", en este caso agrediendo al periodista Otero en la apertura de una sede de Juntos por el Cambio: "¡Si te queremos pegar, te pegamos!". ¿Hasta cuándo hay que soportarlo? Es inverosímil que una agrupación política que anida tales conductas siga teniendo semejante intención de voto.
Alberto F. Díaz
DNI 10.492.915
Comunión en San Luis
Muchas veces escuché decir que San Luis era otro país. En las vacaciones de invierno fui a Merlo y comprobé que efectivamente lo es, aunque más no sea en materia religiosa. Grandes fueron mi sorpresa y mi confusión cuando, al ir a misa a la parroquia Nuestra Señora del Rosario, el sacerdote me negó la comunión al pretender recibirla en mis manos. Me pidió, algo nervioso, que abriera la boca para recibirla, "como se debe comulgar en San Luis". Por supuesto que lo hice, porque lo importante es lo importante. Y no iba a ponerme en la fila de la comunión a explicarle lo que seguro ya sabe: en agosto de 1996 (¡el siglo pasado!), la Conferencia Episcopal resolvió permitir que cada fiel, en uso de su libertad de conciencia, pueda elegir cómo comulgar en la Argentina. Es muy interesante releer los argumentos que el periodista Mariano de Vedia describía en LA NACION del 12/8/1996 sobre esta decisión. No vamos a repetirlos aquí. Pero son importantes para entender que detrás de lo que parecería un tecnicismo solo relevante para iniciados se esconden dos miradas muy distintas de la Iglesia y del lugar que los fieles laicos tienen en ella y en el mundo. Confío en que más temprano que tarde volverá la plena comunión eclesial a la Argentina y en que Achiras y Punilla dejarán de ser ciudades de frontera.
Daniel Martini
DNI 17.137.308
Incongruencia
Los guerrilleros muertos en el periodo de Isabel Perón han sido premiados (y sus familiares indemnizados) con un lugar en el Parque de la Memoria. Como contracara, los soldados y conscriptos muertos en enfrentamientos por defender los objetivos que debían custodiar no recibieron nada, ni siquiera una medalla por haber perdido la vida en cumplimiento del deber. Señores del Gobierno y la Justicia: ¿cómo le explico a mis nietos esta incongruencia? Están a tiempo de corregir tamaño error.
Ricardo Olaviaga
olaviaga8@hotmail.com
Veredas
Salvo algún negador compulsivo, desde la década del 70 y en estos cuatro últimos años, la Argentina no experimentaba un plan semejante de obras públicas. La ciudad de Buenos Aires, y en especial por la continuidad de su gobierno, fue y es la de mayor visibilidad: viaductos, ferroductos, sistemas de evacuación pluvial y cloacal, colegios, plazas y subtes, entre otras obras, son una muestra objetiva de esta realidad. El hecho de hacer conlleva naturalmente sus errores. Pero quiero detenerme en un aspecto de estas obras: las veredas. Para ellas se destinan baldosas de muy buena calidad y empresas que en la mayoría de los casos son competentes. Sin embargo, más del 80% de estos trabajos terminan rozando con la chapuza. Para que una vereda quede perfectamente nivelada, hay que comenzar por nivelar los cordones, que por efecto de los años están absolutamente fuera de nivel, hundidos, rotos, mal rebajados en las cocheras o levantados por la acción de las raíces de los árboles de la ciudad. De esta forma, lo que se empieza bien suele terminarse mal.
Vicente Lema
archilema@gmail.com
En la red
Duras críticas de venezolanos en la Argentina a la comparación de Cristina Kirchner
- "¡Preguntales a los venezolanos que emigraron a la Argentina! Consiguen trabajo ni bien llegan, comen muy bien y felices de estar aquí"- Silvia Llorens
- "¿Cómo? ¿No era que en Venezuela era todo maravilloso? ¿En qué quedamos?" - Adriana Inés Aloisi
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