De los lectores: cartas & mails
Cuadernos; Opinólogos; Injerencia; Privados de libertad; El Poder Judicial; ¿Subte o sanitario?; Lo que necesita el país
Cuadernos
Que vergüenza que España y su rey premien la investigación de los cuadernos de las coimas, por la seriedad y profundidad periodística con que fue hecha, y en nuestro país la destinataria de esas coimas, en vez de desaparecer de la escena empujada por las evidencias, pretenda volver a dirigir la Argentina. Y que a conciudadanos míos la demostración de la corrupción kirchnerista no altere sus juicios éticos y su intención de voto.
Delia Garat de Devoto
DNI 3.281.920
Opinólogos
Al país le sobran opinólogos de todo tipo (políticos, economistas, empresarios, conductores de radio y TV, sindicalistas y hasta el hombre de la calle y el cafetín) que tienen la varita mágica para convertir un país con 70 años de populismo decadente en un país estable, seguro e incorrupto, en tan solo tres años de gobierno. ¿Alguien pensó que se podía salir sin esfuerzo y sufrimiento? Sobran también los "contras", los cultores de la picardía criolla, los oportunistas atentos a sacar ventajas a expensas de los demás, y falta los que tuvimos a fines del siglo XIX, ¡patriotas!
Por favor, señores Massa, Pichetto, Lavagna, Solá, Urtubey, Tinelli, Rodríguez Saá, Espert, etcétera, radicales, socialistas y neoperonistas, por una vez dejen de lado sus intereses para tirar todos juntos hacia adelante, aún con errores, y dar estabilidad al sistema, no se trata de Macri ni de partidos políticos, sino del futuro de nuestra patria.
Jorge Alberto Clariá
DNI 4.273.663
Injerencia
Es curioso que haya argentinos que les moleste una hipotética intervención norteamericana en Venezuela, cuando esta no ha ocurrido aún y por el contrario parecen ignorar la injerencia rusa y cubana que ya existe en ese país. Tampoco mostraron su malestar en la década del 70, cuando cuadros terroristas entrenados en Cuba asolaban nuestro territorio nacional.
Jorge H. Palmieri
DNI 4.198.710
Privados de libertad
El Martes Santo, el obispo castrense, en la homilía de la ceremonia de la bendición de los óleos, lamentó que sin juicio previo tuviéramos tantos militares privados de libertad. Algunos llevan cinco o más años detenidos sin juicio? y cuántos con juicios de cuya objetividad abrigamos fundadas dudas. Hace pocos días cayó en mis manos un libro de tres tomos, Crónica de una guerra negada, editado el mes pasado. Partiendo de lo que la prensa publicó en su momento, describe los actos de violencia desde 1955 hasta los 90, perpetrados por las organizaciones FAU, EGP, FAR, ERP, Montoneros, etcétera, incuyendo el Cordobazo (29/5/69), el Rosariazo (17/9/69). Casi todos los meses hubo actos terroristas y, con el paso de los años, casi diarios. Me tocó vivirlos de cerca en Bella Vista, provincia de Buenos Aires, de 1961 a 1973. Luego un año en Córdoba, desde 1975 en Añatuya (Santiago del Estero), con la proximidad de Tucumán, donde se organizó la toma del poder por parte de la guerrilla y donde tantos vecinos de la zona montañosa fueron obligados a plegarse si querían no ser "ajusticiados". Era tal la inseguridad en aquellos años que la gente de Añatuya decía: "Y ¿qué esperan los milicos?" A la juventud y a la niñez de hoy se les ha vendido una historia mutilada. Y hablo de lo que he vivido (acabo de cumplir 87 años). Fueron miles de personas las víctimas de la subversión. A los militares que, presionados por el clamor del pueblo, tuvieron que enfrentarlos, se les atribuyeron 30.000 desaparecidos. Los estudios e investigaciones posteriores los reducen a un 5-10%. Tal vez fuera el error más lamentable: crear "desaparecidos". Muchos tal vez muertos, pero muchos refugiados en países extranjeros para salvar la vida. Una vez me encontré en las afueras de Roma con una guerrillera que dio nombres de los que formaban su célula y tuvo que tomar la decisión de exiliarse (con la ayuda de los militares) para salvar la suya. Indudablemente un caso entre muchos. Y recuerdo esta historia porque veo con dolor cómo muchos de aquellos que lucharon y arriesgaron su vida ante el reclamo del pueblo hoy están privados de la libertad. Y se habla de varios centenares en tales condiciones. Creo que es un capítulo de nuestra historia que debemos revisar para que efectivamente impere la justicia y haya verdadero fundamento para la paz, que tanto necesita nuestra Argentina.
Monseñor Antonio Juan Baseotto
C.Ss.R. Obispo Castrense de la Argentina (E.)
El Poder Judicial
La Argentina sigue en crisis, mientras los países hermanos progresan en forma ininterrumpida, Perú crece desde hace 15 años y Bolivia exhibe los índices más altos de la región. En Perú hay cuatro expresidentes presos por corrupción y lavado de activos, y el quinto se disparó un tiro en la sien para evitar ser detenido. En Brasil un expresidente está condenado y detenido como autor de estos graves delitos, hay en total 120 condenados y el gobierno recuperó más de 3000 millones de dólares mal habidos. ¿Qué sucede en la Argentina, uno de los países más corruptos del mundo? En Perú y Brasil el Poder Judicial no está subordinado al poder político, como ocurre en nuestro país. Si las causas por corrupción y lavado que tienen en vilo a la ciudadanía involucran a numerosos integrantes del poder político, ¿cómo es posible que los representantes de este sector tengan la mayoría en el Consejo de la Magistratura, que es el órgano encargado de administrar los recursos y ejecutar el presupuesto del Poder Judicial, emitir propuestas en ternas vinculantes para el nombramiento de jueces, ejercer facultades disciplinarias sobre estos y decidir la apertura de los procesos de remoción? Creo que aquí está la respuesta a los que se preguntan por qué la Justicia argentina avanza al ritmo de los tiempos electorales. El artículo 114 de la Constitución exige que haya equilibrio en los tres estamentos que integran el Consejo, pero los representantes de los órganos políticos se llevan el 53,84% del total de los consejeros, los jueces el 23,07% y los abogados el 15,38%. Ello explica que el tema de agenda en el Consejo no sea la preservación de la independencia de los jueces, como lo ordena el artículo 114, sino las diferencias políticas que siempre afloran con virulencia a la hora de proponer jueces, investigarlos, sancionarlos o removerlos de sus cargos.
Sin Justicia independiente del poder político no existe seguridad jurídica, previsibilidad en las conductas propias o ajenas, confianza en los mercados ni en los inversores, tampoco crecimiento económico ni obviamente Justicia social (porque no existe riqueza para repartir).
Luis René Herrero
Juez de la Sala II de la Cámara Federal de la Seguridad Social
lherrero@fibertel.com.ar
¿Subte o sanitario?
La empresa Metrovías, o quién sea responsable, debería limpiar y desinfectar las escaleras y pasillos de acceso a los subterráneos, tomados como sanitarios por los asistentes a las marchas del 30 y 1° de mayo.
Julio I. Quiroga
DNI 4.421.254
Lo que necesita el país
El lunes pasado, a eso de las 24 manejaba por avenida Córdoba. Cuando me detuve en el semáforo de Agüero tres jóvenes se acercaron por el lado del conductor, abrieron la puerta, me robaron el celular y salieron corriendo en dirección opuesta al tránsito. Vi la calle vacía, giré en U y los perseguí. Los jóvenes cruzaron y siguieron corriendo por Laprida. Paré el auto, bajé gritando que me habían robado y empecé a correrlos. Hasta acá un hecho de inseguridad, como tantos otros. Pero algo sucedió, como si la vida real fuera parte de una serie policial. De pronto paró un auto del que salió un policía uniformado dando la voz de alto. Heroico. Un solo hombre contra tres. Los jóvenes se dieron a la fuga en distintas direcciones. Inútilmente intenté correr a uno de ellos mientras que el oficial lograba detener a otro luego de perseguirlo por dos cuadras. También recuperó mi celular. Luego siguió el procedimiento usual. El arresto. La identificación. Patrulleros. Actas. Y la remisión del detenido de solo 16 años a un juzgado de menores. Sigue lo extraordinario. El policía que me ayudó, Matías Parrinello, estaba de franco. iba a buscar a su esposa e hijos pequeños para volver a su casa cuando se detuvo. Cuando le agradecí, me contestó sonriente: "Usted fue valiente que se animó a perseguirlos. Yo hice lo que tenía que hacer. Mi trabajo es cuidar a la gente. Sólo cumplí con mi deber". Estuvimos más de cinco horas en la comisaría. Yo lo hice por un teléfono. Él lo hizo por su vocación de servicio. Un compañero dijo: "El no para de trabajar". Tan simple y tan cierto.
En la Argentina necesitamos más seguridad, claro, pero también gente que no pare de trabajar... como Matías Parrinello.
Laura Riera
DNI 20.428.082
Termoeléctricas
Miles de vecinos de Pilar vivimos un calvario por la instalación de dos enormes centrales termoeléctricas muy cerca de nuestras casas. APR Energy y Araucaria Energy pueden generar 504 MW y son altamente contaminantes y peligrosas. Afectarán la salud de los vecinos, que ya padecemos la terrible contaminación sonora. El consumo de agua que estas centrales extraen para su operación agravará la crisis de falta de agua que ya experimenta el acuífero Puelche. Soportamos a diario, ruidos, vibraciones en nuestras casas, olor a gas, a combustible quemado y todo esto en una zona que tenía categoría residencial La Justicia en primera instancia dio la razón a los vecinos, y aunque los camaristas de San Martín Moran, Salas y Lugones revocaron el fallo, la CSJN tiene en sus manos la responsabilidad de fallar a favor de la salud y la vida. Las centrales fueron oportunamente clausuradas, pero continuaron operando con total impunidad, especialmente Araucaria. La Argentina firmó el tratado de París, que procura la reducción de gases de efecto invernadero, pero incoherentemente instala centrales térmicas. Los vecinos apoyamos el progreso, pero estamos en contra de que dos enormes centrales termoeléctricas funcionen en el patio de nuestras casas y próximas a los colegios, y queremos que los gobernantes atiendan nuestro reclamo y las trasladen lejos de zonas urbanas, a una zona industrial.
Patricia de Witte
pdewitte@emaservicios.com.ar
En la red
Maduro: "Vamos a cortarle la cabeza a quien sea necesario"
"Cuando la locura de un líder arrastra a un pueblo para padecer la crueldad y el sufrimiento" -Gabriela Correas
"¿Dónde están las Madres y las Abuelas defensoras de los derechos humanos?" -Jorge Luis Basconcelo
"Pobre pueblo, en estas situaciones es el único que paga las consecuencias de este tirano" -Patricia Tiemroth
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