De los lectores: cartas & e-mails
Carta de la semana
Debatir ideas, no confrontar
Se acaban de cumplir 100 días de aislamiento social, estricto en un principio, relajado en estos momentos. A pesar de ello los casos de Covid-19 van en aumento, los hospitales se van llenando y las camas de terapia intensiva se van agotando. Y se nos pide un último esfuerzo, con una nueva cuarentena estricta para evitar el colapso sanitario. Se escucha a muchas personas, científicos, políticos, sociólogos, opinadores, etcétera, teorizando sobre qué hubiera pasado si… por qué no se hizo tal o cual cosa, por qué CABA esto o por qué la provincia de Buenos Aires lo otro, que el Presidente es un genio o que nos está destruyendo. Seguramente cada uno tenga su parte de razón. Es imposible demostrar qué hubiera sucedido si las cosas se hubieran hecho de otra manera. Entonces, ¿por qué insistir en eso? ¿Qué pasaría si en lugar de pelearnos y criticarnos mutuamente empezáramos a analizar las ideas pensando en si son viables o no en lugar de pensar en quién las dice? ¿Qué pasaría si en vez de utilizar las redes sociales para pelearnos, insultarnos y criticar al otro las utilizáramos para aportar ideas?
Propongo darnos un día, 24 horas solamente, y utilizar las redes sociales (tantas veces transformadas en una cloaca) para canalizar ideas que nos ayuden a salir de esta terrible situación sanitaria, económica y social. Un día para aportar solo ideas. Creo que si nos permitiésemos un día de encuentro, llegarían miles de propuestas, y que muchas de ellas serían muy buenas. Y luego, entregárselas a un grupo de notables que, con honestidad intelectual, se encargue de analizarlas, seleccionarlas y darles forma, transformarlas en un protocolo serio y viable, creíble y sobre todo, posible de implementar.
¿Será esto una utopía?
Héctor Cairoli
DNI 17.286.060
No más retos
Me queda claro que la "preocupación" del Gobierno es cuidar nuestra salud, evitar nuevos contagios y muertes, controlar la propagación de este enemigo invisible que puso en jaque al planeta. Si se trata de una preocupación genuina, no está mal. Lo que no sé si es tenido en cuenta es que la salud física debe estar acompañada de la salud mental. Las autoridades no parecen tener en cuenta la angustia y legítima preocupación que provoca en muchos no poder generar ni el más mínimo ingreso. No todos reciben ayuda del Estado. Hay millones de trabajadores independientes, profesionales, cuentapropistas que están maniatados y no pueden hacer frente a sus gastos diarios. No veo señales de empatía y consideración hacia ellos, como si el estrés que estamos padeciendo hace más de 100 días no contara, como si este prolongado encierro no nos estuviera afectando psicológicamente a todos. Comentarios desafortunados como este de Alberto Fernández, no suman: "Querían salir a correr, salgan. Ahí están las consecuencias".
No nos rete, señor Presidente. Ya nos retó bastante su vice en su momento. Somos adultos. No nos subestimen, por favor.
Irene Bianchi
DNI 6.688.332
Juez Lorenzini
El conflicto de la empresa Vicentin con sus acreedores y el Estado nos muestra a todos los argentinos la gestión de un joven juez, el doctor Fabián Lorenzini, que pone en su lugar y hace respetar con todo derecho la independencia del tan manoseado Poder Judicial. Y nos permite tener una esperanza cierta de que nuestro país puede ser gestionado con condiciones francamente republicanas. Seguramente, y a pesar de que las presiones que recibe desde distintos organismos y personajes deben ser muy importantes, actúa con acertada vocación profesional. Nuestra Justicia tiene así, con la integración de profesionales jóvenes, probos y respetuosos de su verdadero rol ante la sociedad, la posibilidad de transformarnos en un país normal.
Heriberto G. Fritsches
DNI 4.178.660
Salidas a correr
Que mal asesorado está el señor Presidente al prohibir salir a correr, una actividad esencial para la salud psicofísica de la gente, que con recaudos mínimos no representa ningún peligro y genera múltiples beneficios. La posibilidad de contagiarse corriendo al aire libre es 100 veces menor que al viajar en transporte público. Los especialistas (infectólogos, etcétera) coinciden mayoritariamente en que salir a caminar o correr no es una fuente de contagio, todo lo contrario, es ampliamente beneficioso. Cabe preguntarse dónde está el ministro de Turismo y Deportes, al que le compete el tema, que no emite juicio alguno y solo se dedica a tuitear banalidades. Hay muchísimas alternativas viables para hacer la actividad. Por ejemplo (donde yo la practico cada mañana), el corredor de 7 kilometros en la vereda impar ancha y sin edificios (solo zona de clubes) que va por Avenida del Libertador desde General Paz hasta avenida Sarmiento, y donde te podés cruzar con otro corredor quizás cada 50/60 segundos. Y así hay muchísimas posibilidades. Solo es cuestión de pensar y proponer acciones que al improvisado ministro Lammens no se le ocurren. En lo personal, corro unos 40 minutos absolutamente todos los días entre las 7 y 8 de la mañana (con barbijo, aunque no sea obligatorio). Padezco desde hace 50 años extrasístoles ventriculares benignas (arritmias) muy frecuentes, que más allá de alguna medicación, lo que me las atenúa y suprime es justamente la actividad aeróbica. Por lo cual, por una cuestión prioritaria de salud, intentaré seguir haciéndola, buscaré la manera... No soy un rebelde sin causa, ni un anarquista que no respeta reglas, ni menos un opositor (voté y apoyo a Alberto); simplemente es una cuestión de sentido común y necesidad en pos de una mejor calidad de vida.
Que una decisión política demagógica no reemplace la sensatez.
Luis Bruno Barrionuevo
DNI 7.616.595
Armando Ribas
Murió un gigante intelectual del liberalismo. Mi querido amigo Armando Ribas, con quien ejecutamos muchos proyectos juntos. Nos comunicábamos seguido por teléfono y por los nuevos medios tecnológicos, pero la última vez que nos encontramos fue con motivo de una conferencia que pronuncié en el Instituto de Economía de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas. Con su proverbial sentido del humor, al despedirnos con otros amigos y colegas, me dijo que especialmente me agradecía mis palabras cuando se lo dio por muerto, lo cual había ocurrido debido a una noticia errada que circuló con motivo del deceso de un homónimo. Su perseverante defensa de los valores de la sociedad libre y su preocupación y ocupación de los problemas que atraviesa nuestro país desde hace décadas, debido al estatismo rampante, lo llevaron a publicar numerosos libros, ensayos y artículos. Subrayo lo que concluyó en una de sus obras: "El sistema capitalista que se inserta en la democracia liberal a través del reconocimiento de la propiedad y los límites del gobierno ha sido el instrumento más eficiente para la convivencia social en libertad y bienestar".
Alberto Benegas Lynch (h.)
DNI 4.315.986
Frondizi
La lectora María Luz Saldungaray recordó en su carta de lectores la casita que Arturo Frondizi construyó en los médanos de Ostende, para que se conserve como símbolo de la humildad del expresidente. Corría 1969 cuando Emilio Perina (autor del libro La máquina de impedir) nos visitó por inquietud del doctor Frondizi: construir, en el mismo lugar de la anterior de 1935, una casa con la exigencia de que sus paredes resistieran el impacto de balas. Visitamos al expresidente en su departamento de la calle Beruti para explicarle el tratamiento que podríamos hacer en la exempresa Okal Argentina a sus paneles, para cumplir con tal objetivo, utilizando resinas especiales (epoxi-fenólicas, entre otras). La mayor preocupación del expresidente fue asegurarse que él efectuaría dos cosas: a) la prueba balística y b) el pago de la factura.
Como recuerda Saldungaray, Frondizi era humilde. También honesto, correcto y cumplidor. Él efectuó dos disparos sobre la casa y pagó la factura.
Guido Parisier
DNI 4.092.316
Una jubilación digna
Nos llaman abuelitos, ancianos, adultos mayores, viejos, x-genarios y otros calificativos más. La mayoría somos personas que tenemos algunos años, estamos vitales, activas, lúcidas, trabajamos, cuidamos nietos, bailamos, hacemos gimnasia, tenemos sexo, tomamos clases de idiomas, teatro, música, pintura, cocina, tejido, computación y demás. No somos estúpidos, no estamos mal de la cabeza, no nos sentimos incapacitados para pensar y resolver, sabemos lo que queremos y lo que no, nos cuidamos y cuidamos a los demás. No nos gusta que nos humillen, que nos ninguneen, que nos mientan, que nos maltraten, que piensen por nosotros en lugar de pensar en nosotros. Nos gusta que nos cuiden, que nos incluyan, que nos consulten, que nos amen y nos dejen amar. Sería ideal que los gobiernos de turno nos paguen una jubilación acorde con lo que aportamos y con lo que es necesario para vivir dignamente. He viajado y he visto cómo viven las personas en otras ciudades, sobre todo en Europa, y les aseguro que estamos a 12.000 kilómetros de tener los beneficios de los que gozan nuestros congéneres allá.
No nos mientan más, por favor.
Emma Alba Dolorini
DNI 6.691.740
En la Red
Cuarentena en la Argentina
"Si 100 días no les alcanzó para poder armar una estrategia eficiente, ¿por qué creeríamos que 17 días sí podrían ser suficientes?... Aparte, si hacés lo mismo, tendrás el mismo resultado, ¿no?"-Marcela López
"¿Y qué pasó con las otras enfermedades? ¿Se curaron solas? ¿Ya nadie muere? ¿Solo el coronavirus mata? ¿Hasta cuándo vamos a aguantar? ¿Qué estamos esperando?"-Ana Heredia
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