Bartolomé Mitre y la protección en el mar
Es tal la completitud de las obras y realizaciones llevadas a cabo por Bartolomé Mitre, que de su producción surgen constantes testimonios de sus inquietudes e intereses por mejorar y preservar el patrimonio de la Argentina. No escapan a ello sus preocupaciones en el área del mar y de la costa, ante los avatares del desarrollo que comenzó en la afamada y destacada admiración que despertaría el área marplatense con toda su evolución y ulterior beneficio costero. Me refiero al sitio que llegaría a consagrarse con la denominación de “Mar del Plata”, cuyo desarrollo conoce incipientes prolegómenos y capítulos hasta llegar hoy al millón de habitantes, con la imponente presencia de la calidad de su ambiente y el obsequio del Océano Atlántico.
En su origen se destacó el asentamiento de sacerdotes jesuitas, que se instalaron en lo que conocemos como “Laguna de los Padres”, en su tiempo el puesto de vanguardia más próximo a la obtención de los frutos del mar. Laguna de los Padres estaba cerca de los pioneros que se lanzaron con riesgosos emprendimientos al comercio, cuyos resultados arrojaban éxitos, pero también pérdidas.
Era menester contar con un aseguramiento para esos navegantes. Fue, pues, un acierto de Mitre, advertido de las necesidades requeridas por esa pequeña población, tomar una decisión importante: siendo gobernador de Buenos Aires, por decreto del 27 de febrero de 1862, dispuso la creación del “Resguardo del Puerto”, con la jefatura local de Manuel Lascano. Con los años, ese puesto de vigilancia se convertiría en la “Prefectura Mar del Plata”. Y con el gradual crecimiento de la zona y la presencia del movimiento marítimo del lugar, en 1894 se crearía la “Ayudantía de Mar del Plata”, a cargo de Bernandino Prieto. Largo fue el circuito de las sucesivas transformaciones, hasta llegar a la construcción merecida y necesaria de la “Prefectura”, edificada en la proximidad de la Avenida de los Pescadores.
La creación dispuesta por Mitre, como gobernador de Buenos Aires y con plena conciencia y conocimiento de la importancia revestida por la presencia oceánica en la costa de Mar del Plata, tuvo importancia decisiva para los intereses nacionales. Tal emplazamiento sería fundamental con el tiempo, pues el desarrollo local pasó del preliminar empeño de los sacerdotes establecidos en Laguna de los Padres a una paulatina radicación del comercio e industrias pesqueras y luego a la exaltación turística, que gradualmente condujo al surgimiento de una gran ciudad argentina. ¡Mérito y visión del General Bartolomé Mitre!
El gran puerto también es base naval de nuestra Marina para buques y submarinos, además de centro del deporte náutico. Y todo eso asociado en sus comienzos a la gestión de un político, militar y periodista que pugnó siempre por el fortalecimiento de nuestra Armadas en todos los órdenes y niveles. Concepción estratégica de quien supo valorar la dimensión de los intereses marítimos nacionales.
Ex ministro de Justicia y de Derechos Humanos de la Nación