Arte para tocar, usar y llevar en Take Me (I'm Yours)
En el Museo Nacional de Arte Decorativo, la muestra permite que el público entre en contacto con las obras expuestas, hechas con pan fresco, botellas, ropa usada y caramelos azul eléctrico, entre muchos otros materiales efímeros y reciclados en este "supermercado del arte"
Aquellos que ayer por la tarde asistieron a la inauguración de la nueva posta de Bienalsur en el Museo Nacional de Arte Decorativo (MNAD) no se pudieron resistir al ruego (o la orden) que los curadores habían elegido como título. Las puertas de la muestra Take Me (I'm Yours) se abrieron minutos después de concluida la presentación de Christian Boltanski, recién llegado de conversar con las ballenas que habitan en las aguas de Bahía Bustamante, en la provincia de Chubut.
Acompañado por los directores de la bienal, la crítica Ana María Battistozzi y una intérprete, todos sentados debajo del gran tapiz flamenco El banquete de Syphax, el artista francés hizo gala de su elocuencia epigramática: “La noción de obra como objeto prácticamente ha desaparecido para mí”. Luego se sirvieron copas de vino tinto y champán para brindar por el retorno de arte como don. “Los artistas se han vuelto más serios y profesionales y también menos generosos”, indicó Boltanski en referencia a una muestra donde el arte se regala.
La propuesta concebida por él y Hans Ulrich Obrist hace veintidós años en Londres, y que se repitió en París, Nueva York y Copenhague, se llevó adelante en la ciudad de Buenos Aires con aportes de veintidós artistas. Las dos prohibiciones que comparten todos los museos del mundo se pueden quebrantar en el MNAD hasta el 5 de noviembre: las obras no sólo se pueden tocar, usar y degustar sino además llevárselas a casa sin que los guardias de seguridad intervengan.
Obras hechas con botellas de vino tinto y barras de pan fresco, con ropa usada, galletas de la fortuna y caramelos de color azul eléctrico (que Arcor produjo para Bienalsur según los preceptos de la Fundación Félix González-Torres) se pueden desbaratar libremente. Esa tarde el público no perdió un instante y cargó botellas, panes y ropa en bolsas de papel madera con la leyenda “Llévame (soy tuyo)”.
Como no sólo de pan y de vino viven los amantes del arte, la muestra provee, en carritos de supermercado, postales, adhesivos y señaladores creados por artistas como el vietnamita Danh Vo y la argentina Amalia Ulman. Algunos trabajos, como el rompecabezas de imanes ideado por Jorge Macchi, no se repondrán. Como destacó Diana Wechsler, directora artística de Bienalsur, la propuesta de los curadores apunta al norte del arte contemporáneo: el vacío.
“Vine porque lo amo”, dijo a LA NACION una señora, botella en mano. ¿Al vino? “A Boltanski”, acotó. Un estudiante de arte de la Universidad Nacional de La Plata coincidió con el curador francés (que mientras tanto posaba para los fotógrafos junto a un carrito con postales hechas por Fabio Kacero) en que lo efímero y lo lúdico formaban allí una pareja perfecta. El antropólogo argentino Néstor García Canclini, invitado para dar una charla el viernes en la sede del Centro Cultural Haroldo Conti, indicó que Bienalsur marcaba la diferencia respecto de otras bienales, donde una sola ciudad y un único criterio curatorial reinan.
Entre otros artistas, Nicola Costantino, Reza, Graciela Taquini y Tomás Saraceno (que participa de la exposición con una campera para volar que se puede pedir prestada luego de consignar datos personales) estuvieron en el MNAD. Para muchos, el espectáculo consistía en ver a las personas que rebuscaban en la montaña de ropa usada, la obra que provocó mayor interacción con el público. “Algunos la usarán y otros dirán que es parte de un trabajo de Boltanski”, bromeó el propio Boltanski. Poco más tarde, marchó en caravana rumbo al Museo Nacional de Bellas Artes, donde se exponen obras suyas y de otros artistas. Ésta es la quinta vez que el artista francés visita el país.
No hay, entonces, excusas para desobedecer. La entrada al supermercado de arte establecido en el MNAD es libre y gratuita. Advertencia: el vino, la ropa y las bolsas de papel de madera se agotan en poco tiempo.
BIENALSUR AVANZA
- El viernes, a las 18 en el C. C. Haroldo Conti se inaugurará la muestra colectiva La mirada se separa de los brazos. A las 17, habrá un diálogo con Néstor García Canclini. A las 20 abrirá la antológica Pensamiento salvaje en la Casa Nacional del Bicentenario.
- El sábado, en el Muntref de Caseros se expone Turn del artista japonés Hibino. A las 15 en el Museo de Arte de Tigre se exhiben las obras de Leandro Erlich y Paulo Nenflidio.
- El domingo, a las 11 se inaugura la muestra fotográfica de Reza en Plaza San Martín.
- El lunes se podrá ver la instalación PETS, de Eduardo Srur, en las aguas de La Boca.