ARCO, una feria "bienalizada"
En distintos puntos de Madrid se exhibe arte llegado desde la Argentina, país invitado a la 36a edición de la feria
Una feria "bienalizada", que excede sus límites comerciales para llevar el arte a distintos puntos de la ciudad, con acceso a todo público. En eso parece haberse convertido la madrileña ARCO, al repetir este año con la Argentina la exitosa experiencia que impulsó en 2015 con Colombia.
“Creo que nunca hubo una delegación tan grande como la nuestra. Se ha logrado mucho impacto”, señaló mientras recorría la feria Sheila Cremaschi, integrante del comité internacional de arteBA. Residente desde hace años en Madrid, opinó que fue un acierto haber extendido hacia la ciudad. “Hemos logrado mucha complicidad con las instituciones, y de esa forma se conquista al público que no viene a ARCO”, explicó.
Aunque la feria madrileña es una de las más visitadas del mundo, su sede queda a más de veinte minutos en auto desde el Museo del Prado, ubicado en el corazón de la capital española. Y pagar la entrada cuenta entre 30 y 40 euros, según el día. A esto se suma que este año la línea de subte que conecta ese tramo está cerrada por remodelación, lo que restringe aún más el acceso.
Dentro de la feria, la Argentina participa este año hasta mañana como país invitado, con un espacio especial dedicado a doce galerías seleccionadas por Inés Katzenstein. Además, otras cuatro galerías de nuestro país tienen en stands en el sector principal de la feria y en la sección Opening, dedicada a las emergentes.
Fuera de la feria, el Ministerio de Cultura de la Nación impulsa un programa paralelo desplegado en 17 puntos de la capital española, con el trabajo realizado por más de 60 artistas. Se enviaron 105 obras desde la Argentina y unas 30 se sumaron en Madrid. En este circuito se destacan En el ejercicio de las cosas, un proyecto artístico en ocho museos y espacios culturales curado por Sonia Becce y Mariano Mayer, y Escenas Argentinas, el ciclo de artes escénicas, cine, música y literatura dirigido por Marcelo Panozzo. A continuación, una visita guiada por algunos puntos imperdibles del recorrido.
REAL ACADEMIA DE SAN FERNANDO
Una mirada a la Colección Costantini reúne 14 de las 500 obras del acervo personal del fundador del Malba, distinguido este año por la Fundación ARCO con el Premio "A" al Coleccionismo. Entre ellas, el famoso Baile de Tehuantepec de Diego Rivera, por el cual el fundador del Malba pagó el año pasado 15,7 millones de dólares. La curadora Estrella de Diego seleccionó además obras de Lucio Fontana, Xul Solar, León Ferrari, Víctor Grippo, Annemarie Heinrich, Lidy Prati y Grete Stern.
CENTRO CULTURAL CONDE DUQUE
Imperdible la instalación Perfumancia, destinada a potenciar los sentidos del olfato y el oído, realizada por Pablo Schanton y Alejandro Ros en este monumental edificio de estilo barroco, que funcionó en el siglo XVIII como Real Cuartel de Guardias de Corps. Aquí se exhibe La bella sintaxis, que también incluye obras de Alberto Goldenstein, Daniel Joglar, Eduardo Costa, Laura Mema, Matías Duville y Nicolás Gullotta.
TABACALERA
Tal vez las imágenes más viralizadas de las muestras en Madrid hayan sido las que registran las obras de Nicanor Aráoz en este centro social autogestionado, alojado en en la antigua fábrica de tabaco del barrio de Lavapiés. Saber sin mí, otra de las muestras que integran En el ejercicio de las cosas, se completa con obras de Carlos Herrera, Eduardo Costa, Marcelo Galindo, Mariana Tellería, Paula Castro, Santiago De Paoli y Santiago García Sáenz. Aunque no forma parte del programa oficial, también El rastro de la gaviota, la primera exposición individual de Leandro Katz en España.
BIBLIOTECA NACIONAL DE ESPAÑA
El mural de Cecilia Szalkowicz se destaca en la pequeña sala que le dedica a la muestra Realidad distraída esta institución que custodia unos 30 millones de publicaciones producidas en España desde el siglo XVIII. Se exhiben también trabajos de Alan Courtis, Claudia del Río, Eduardo Costa y Nicolás Mastracchio.
CAIXAFORUM
Ubicado dentro del llamado "Triángulo del Arte", entre el Museo del Prado, el Thyssen-Bornemisza y el reina Sofía, este centro cultural aloja ciclos de videos de Jaime Davidovich, Liliana Porter y Sebastián Díaz Morales. Estos dos últimos artistas fueron seleccionados por la curadora Christine Macel para participar de la próxima edición de la Bienal de Venecia, junto con Martín Cordiano y Nicolás García Uriburu.
MUSEO CERRALBO
Obras de Rosana Schoijett, Alfredo Londaibere, Jorge Gumier Maier y Marcela Sinclair integran Es ella una encantadora cosa en este señorial palacio que alberga 50.000 piezas de arte, objetos arqueológicos y antigüedades donados por el XVII marqués de Cerralbo.