8 tips para vivir endeudado toda tu vida
En la misma línea que la columna publicada semanas atrás sobre 8 tips para seguir siendo pobre toda tu vida , en esta ocasión volveremos a hacer hincapié en una metodología que busca aconsejar a aquellas personas que les gusta leer esta clase de tips para luego hacer lo contrario.
Según NOAnomics , el endeudamiento privado del trabajador formal y público a nivel país asciende a $35.111 por grupo familiar, pero en CABA llega hasta los $53.836.
Estas estadísticas revelan que el problema de la deuda afecta a gran parte de la población, y negar este situación no hará más que seguir empeorando las finanzas personales de los trabajadores, maltrechas luego de la suba de las tarifas, alimentos y gasolina.
Veremos a continuación 8 tips para vivir endeudado toda tu vida, usando la ironía como golpe de efecto para que el lector tome conciencia de cuales son las cosas que NO tiene que hacer si quiere cambiar su realidad económica.
1) Que no te importe el monto total de la deuda
¨"Para qué voy a calcular el monto total de lo que debo si igual ahora no lo puedo pagar…¿para hacerme mala sangre? Cuando tenga el dinero necesario sacaré la cuenta".
Si no tenemos control sobre nuestras finanzas difícilmente podamos controlar nuestra vida. Tener el control significa como primer paso saber centavo por centavo cuánto es lo que se debe en términos totales.
El primer paso para enfrentar cualquier problema en la vida es conocer la magnitud del mismo. Por más que "nos amargue" debemos saber con detalle a cuanto asciende la deuda total contraída independientemente de que en este momento podamos o no cancelarla.
El llevar adelante esta tarea nos dejará mejor posicionados para poder en algún momento negociar una quita de la misma con el o los acreedores que nos permita retomar el control de la economía doméstica sin tener que gastar gran parte de nuestros ingresos en intereses y punitorios.
2) Aumentá tus gastos ni bien aumentan tus ingresos
"Ahora que me aumentaron el sueldo puedo gastar más con la tarjeta, al tener mayor disponibilidad de dinero cuando llegue el resumen. Prefiero aprovechar ahora que cobro un poco más para comprar cosas que necesito y más adelante con el medio aguinaldo pagaré una parte de la deuda".
Sabemos que el aumento de sueldo este año responde a cuestiones inflacionarias y en términos reales es más probable que haya bajado a que haya subido, pero así y todo esta situación no debería ser un impedimento para realizar un ajuste profesional y no intuitivo en nuestras finanzas buscando separar entre lo que es un gasto y lo que es un costo.
La ley de las finanzas personales 50/30/20 no está pensada únicamente para situaciones de estabilidad económica sino que justamente el objetivo es buscar alternativas para que esos porcentajes de distribución del ingreso personal se mantenga a rajatabla aún en las condiciones más adversas. Siguiendo esta línea de razonamiento, el 20% del ingreso debe ser utilizado sin excusas para ir cancelando la deuda contraída, y ese porcentaje no debería variar a la baja si no queremos comprometer nuestro futuro económico.
3) Tené varias tarjetas de crédito y especula con los vencimientos
"Tengo 3 tarjetas de 3 bancos distintos más 3 tarjetas de 3 shoppings distintos y 2 de sendas casas de electrodomésticos. Cuando quiero comprar algo pido que me cobren un poco en cada una y voy especulando con los vencimientos: ¡es la mejor manera para no tener que pagar todo junto!"
Especular con los distintos vencimientos de las tarjetas de crédito es una solución de corto plazo (como obtener fondos para cancelar pasivos inmediatos) para un problema de largo plazo (la deuda en sí y los hábitos de consumo).
El error aquí es usar las tarjetas de crédito como una extensión del suelo para poder "apalancar" los ingresos y gastos, corriendo el riesgo de entrar luego en un espiral de deudas en donde un paso en falso puede ocasionar la pérdida del crédito disponible gracias a su mala utilización.
Para casos extremos, se recomienda dejar las tarjetas de crédito en casa y solamente usarlas para aprovechar ofertas puntuales.
4) Si tenés problemas de dinero pedile a Juan para pagarle a Pedro
"Por suerte tengo gente que confía en mí y que me presta cuando estoy en problemas. A veces tengo que pedirle a uno para pagarle a otro, pero siempre termino cumpliendo".
La metodología de "pedirle a Juan para pagarle a Pedro" tiene que ver con una forma de conducta en donde se busca aprovechar la red de contactos para pedir dinero que financie consumo en una primera instancia e intereses más adelante.
Comportándose de esta forma, el deudor se encuentra a solo un "accidente financiero" de ponerse a sí mismo en una situación problemática con familiares y amigos con quienes la relación puede dañarse seriamente a causa del dinero.
5) Establecé una buena relación con la persona de recursos humanos con lo cuál tenés que hablar para pedir "adelanto de sueldo"
"Por suerte conozco a todos los del departamento de Recursos Humanos que me hacen la "gauchada" de adelantarme parte del sueldo todos los meses. Esto me permite usar ese dinero ahora y comprar cosas antes de que aumenten de precio, por lo cual es como que termino cobrando más".
Este es otro claro ejemplo en el cual se utilizan soluciones de corto plazo para problemas de largo plazo. Luego de la fuerte caída del poder adquisitivo de los salarios este año, el adelanto de sueldo puede producir cierto alivio para cubrir sin ajustar las necesidades de ese mes, pero luego cuando llega la hora de cobrar un salario reducido el problema central emerge aún con más fuerza que antes.
Lo recomendable es tratar de no usar esta alternativa para "tapar agujeros" de manera recurrente.
6) Buscá acceder a los "créditos a sola firma", los créditos del sector financiero tradicional son engorrosos y además es difícil "calificar"
"Para sacar un crédito en un banco te piden muchas cosas y se vuelve un trámite muy engorroso. Prefiero sacar préstamos a sola firma que sé que son un poco más caros pero me ahorra tiempo".
Llamamos crédito a la firma a los préstamos para consumo que se otorgan con muy bajos requisitos por parte del prestamista. Los préstamos directos en las grandes cadenas de electrodomésticos es un ejemplo de ello.
Lo que esconde este accionar por parte de los que suelen demandar estas líneas crediticias informales es que no podrían calificar en muchos casos para préstamos en el sector bancario.
Justamente los requisitos que se piden tiene que ver con una estimación mínima por parte del prestamista en cuanto a la capacidad de repago de la deuda por parte del deudor.
La diferencia de costo entre los préstamos a sola firma y los préstamos bancarios puede ser abismal.
7) Comprá un coche nuevo en cuotas: nada mejor para realizar un "ahorro forzoso"
"Estoy completando las solicitudes para comprar un coche 0 KM en cuotas, así no me gasto el dinero en otras cosas y lo invierto en un bien que luego va a capitalizar mi patrimonio."
La compra en cuotas de un coche 0 KM, salvo que se haga a tasa subsidiada, no debe ser considerada como una inversión o ahorro forzoso por dos motivos:
i)Produce gastos nuevos derivados del préstamo (seguro de vida, costos administrativos, etc…) que de otra forma no existirían.
ii)Terminamos comprando un pasivo y no un activo, dado que el coche tendrá costos de mantenimiento que seguirán restando ingresos a nuestro patrimonio.
Lo mejor es desconfiar de las alternativas de "ahorro forzado", ya que generalmente terminan siendo una excusa de consumo encubierto.
8) No te preocupes por entender que es la TNA y el CFT
"En el detalle de los papeles que firmé para sacar el préstamo decía que la TNA es de 33%, más baja que la inflación, así que pienso que es un buen negocio el que estoy haciendo".
Evaluar la viabilidad de un préstamos mirando la TNA (Tasa Nominal Anual) es una clara demostración de la baja cultura financiera del solicitante.
Por el contrario, se debe observar el CFT (Costo Financiero Total) que muchas veces aparece en la "letra chica" del contrato de préstamo, y que corresponde a la tasa de interés que finalmente se termina pagando teniendo en cuenta todos los costos involucrados en el mismo.
Resumiendo: EL CFT es el verdadero costo del préstamo que debemos mirar y no la TNA, dado que esta última es una mala aproximación a la tasa real que terminaremos pagando por el crédito.