Posparto

Flacidez, adiposidad localizada, estrías, celulitis, pérdida del estado físico en general Los kilos se fueron tras el parto, pero el cuerpo todavía no es el que era y la ropa no cae igual. El peso puede ser el de antes, pero algún que otro signo del embarazo está. Las propuestas apuntan a trabajar en ellos ni bien el médico lo permita.

• CONTRA LA CELULITIS, FLACIDEZ Y ADIPOSIDAD LOCALIZADA. La mesoterapia mejora la tonicidad de la piel y atenúa la celulitis, que puede desencadenarse o empeorar con el embarazo. Para esto se inyectan sustancias que activan la circulación, tensan la piel y degradan la grasa subcutánea. Permite bajar de peso y mejorar la textura de la piel. Son diez sesiones semanales (desde $ 150 la sesión y $ 1500 por 12, en Buenos Aires Skin, Córdoba 1184, 9°; 5219-0541). Se puede asociar con radiofrecuencia dinámica y presoterapia. Gracias al calentamiento controlado que produce la radiofrecuencia, la piel se contrae y se remodelan las fibras de colágeno existentes. Disminuye la flacidez, celulitis y adiposidad localizada, tonifica, modela y, además, reduce la retención de líquidos; de 4 a 6 sesiones cada quince días. Para comenzar se deben esperar tres meses después del parto ($ 3000 el tratamiento, Chouela Estética, Uriburu 1590). En tanto, un programa integral de rápida recuperación incluye un plan de alimentación con control periódico que trata el exceso de peso, la celulitis, flacidez, el estrés posparto, las contracturas musculares, las piernas pesadas y otros trastornos. Y se asocia al ejercicio físico localizado en cápsulas térmicas. Además, un masaje reactiva el drenaje, favorece la circulación de los miembros inferiores y estimula la zona abdominal. Incluye un trabajo descontracturante de cuello y la apertura del plexo solar. Son 20 sesiones como mínimo, de dos a tres veces por semana ($ 137 cada sesión, en Iobella, 0-810-444-2355).

• TRATAMIENTO REDUCTOR. Consiste en sesiones de termoterapia y presoterapia secuencial. La primera reduce centímetros al actuar sobre el metabolismo de las grasas. Mediante aparatología se emiten radiaciones infrarrojas, gracias a la aplicación de productos que aceleran el metabolismo lipídico y mejoran la elasticidad de la piel. En tanto, la presoterapia secuencial trabaja por medio de una constante presión desde los pies hasta el abdomen para aliviar edemas producidos por el aumento de peso ($ 630 el pack de ocho sesiones, Lidherma, F. Lacroze 2342). Contribuyen los masajes modeladores y drenantes con geles reductores y reafirmantes. Los reductores movilizan las grasas localizadas, y los drenantes ayudan a eliminar líquidos y toxinas. Se asocian a electrodos. Entre 10 y 15 sesiones por semana ($ 75 cada sesión, en Andrea Peinados, Talcahuano 1225).

• ESTRIAS. Son cicatrices causadas por la destrucción de las fibras elásticas de la piel. Las estrías no se eliminan, pero mejoran. Los peelings de tricloroacético, microdermoabrasión y mesoterapia con ácido retinoico y un derivado del silicio restituyen el tejido conectivo (desde $ 400 cada sesión, en Dra. Velia Lemel Piel y Láser, Ugarteche 3001).

• RECUPERACION ABDOMINAL. Desde que el útero vuelve a su tamaño, a partir del mes después del parto, se puede tonificar el abdomen por medio de ejercicios. Mejora con electroestimulación selectiva de los músculos abdominales. Un mínimo de dos sesiones semanales ($ 50 la sesión, en Medicina Estética Vilella, de los Incas 3536, 2°, 4117-8008).

• ESTADO FISICO. Una vez pasados 30 o 40 días del parto, con autorización médica, es tiempo de retomar la actividad física. Lo primero, ejercicios que fortalezcan y tonifiquen la musculatura de la pelvis. Un buen plan incluye caminatas o bicicleta, y si es posible, rutinas de contracciones abdominales. Dedicarles entre cinco y diez minutos diarios, de cuatro a cinco veces por semana, para ayudar a mejorar la postura. Para el busto se puede ejercitar los músculos pectorales que sostienen la glándula mamaria, para evitar su caída. Como consejo general, evitar dar saltos y realizar ejercicios aeróbicos de alto impacto. Siempre indicarle al entrenador que se está en etapa posparto para que arme o adapte la rutina según ese momento (Megatlón, Migueletes 1023). Si el embarazo no fue sencillo, van bien clases grupales más tranquilas para comenzar a activarse de a poco. Se trabaja con pelotas chicas y elásticos, con ejercicios de bajo impacto. El programa Bodyvive permite adaptar la actividad a los niveles de cada una. Se trabaja la resistencia aeróbica y muscular con estabilización de la columna. Se recomiendan de dos a tres veces por semana (en Super Club Body &Mind, Pueyrredón 1337).

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