Por una sonrisa cuidada y saludable

Porque la sonrisa es clave en el atractivo de las personas, no son pocos los que dedican especial cuidado para mantener los dientes bien blancos. Gracias a las últimas técnicas de blanqueamiento dental, es posible tener una sonrisa llamativa.

• DIENTES MANCHADOS. Existen varios factores que causan la decoloración de los dientes, como una mala higiene bucal o el consumo excesivo de café y tabaco.

• LIMPIEZA TRADICIONAL. El pulido es el método más sencillo para remover manchas. Consiste en la limpieza del esmalte dental en el consultorio, mediante métodos mecánicos, como el ultrasonido o el pulido con cepillo abrasivo. La limpieza dental apunta a remover las manchas extrínsecas o pigmentaciones que habitualmente se producen en las piezas, ocasionadas, muchas veces, por el tabaco, el té o el café.

• ¿EN QUE CONSISTE EL BLANQUEAMIENTO DENTAL? Es un procedimiento que permite la aclaración o el blanqueamiento de los dientes en dos tonos por medio de peróxidos, es decir, sustancias químicas que actúan liberando oxígeno.

• DISTINTOS PROCEDIMIENTOS. Para el blanqueamiento dental conservador existen dos técnicas: una que se realiza de forma ambulatoria y otra que se practica en el consultorio. En ambos casos deben ser siempre supervisadas por el odontólogo porque es el único capaz de realizar un diagnóstico correcto y un plan de tratamiento. La primera la realiza el paciente en su casa, por medio de cubetas elásticas, que resultan de un molde previamente tomado por el profesional. Luego de colocar sobre ellas un gel blanqueador, el paciente las calza en su dientes. Este procedimiento se indica una vez por semana, durante tres horas. La otra alternativa es aplicar el producto químico en una mayor concentración, sobre cada una de las piezas, cuidadosamente aisladas del tejido blando.

• ¿QUE TAN BLANCOS QUEDAN? Es posible blanquear dos tonos respecto del color original del diente, aunque algunas promesas de marketing hablen de hasta nueve. Los resultados varían según la calidad del esmalte del diente. Esto depende de las rutinas que el paciente implementa para el cuidado de su boca y de factores genéticos, que determinan la naturaleza misma de los dientes.

• DESTINATARIOS. En general, no tiene contraindicaciones y lo puede realizar cualquier persona adulta. Sin embargo, no se recomienda en embarazadas o personas que estén tomando medicación específica, que pudiera interactuar con los peróxidos que se utilizan en el blanqueamiento. Por otra parte, se aconseja su uso cuando realmente es necesario, es decir, cuando existe una pigmentación real del diente. También se recomienda tomar recaudos en casos con bruxismo, ya que el desgaste dentario puede ocasionar molestias a la hora del tratamiento que, no obstante, pueden ser controladas por el odontólogo. En general, los especialistas buscan desalentar a quienes se fían de las sonrisas publicitarias, cuasi perfectas a costa de Photoshop.

• DURACION. Depende de los hábitos pigmentarios particulares, pero en general, ante situaciones de pacientes con buena higiene y controles periódicos, la durabilidad es de por lo menos dos años en un 50 por ciento de los casos. Esto se reduce en fumadores o personas que consumen mucho té, mate o café.

• TOLERANCIA AL TRATAMIENTO. Son técnicas indoloras. Puede ocurrir que el paciente experimente una ligera sensibilidad. En ese caso, será controlada mediante el uso de productos, como algún tónico cuyo tipo y concentración serán recomendados por el odontólogo.

• COSTOS. Varían según el diagnóstico y duración del tratamiento y la técnica utilizada. El blanqueamiento oscila entre los $ 300 y $ 450 promedio.

• OTROS PROCEDIMIENTOS. Las carillas de porcelana son otra opción, más drástica, para lograr una sonrisa con dientes muy blancos y parejos en su coloración, a la que suele recurrir el profesional luego de descartar la efectividad de los procedimientos conservadores. Para casos con diagnóstico más complejo, existe también el implante de coronas, aunque se trata de un tratamiento radical, ya que supone el desgaste de la pieza dental.El deseo de una dentadura blanquísima creció en los últimos años. "La gente quiere, cada vez más, tener los dientes impecables. Esta es una tendencia mundial", comenta el doctor Eduardo J. Lanata, titular de la cátedra Técnica de Operatoria Dental de la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires. Y revela: "De un tiempo a esta parte, las guías de colores de las casas dentales cuentan con material de restauración con mayor oferta de color blanco. Como el piercing o el tatuaje, el deseo de unos dientes más blancos encierra también una búsqueda de identidad".

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