Lo último: arquitectura de cejas
En Nueva York, un spa con técnicas orientales, dedicado a que cada ceja sea única. Imperdible
Inspirado en la Bauhaus, la escuela alemana de arte, Browhaus es el spa de origen oriental que diseña cejas a la medida de cada usuario y gana adeptos día a día.
Perderse en Nueva York tiene sus ventajas. En una ciudad que respira novedad a través de sus fachadas, el mapa y el itinerario prefijado pueden llevarnos por el camino de lo popular, de lo obvio, y quitarnos la posibilidad de tropezar con la sorpresa.
Por ejemplo, para aquellos fanáticos de la belleza, una visita al barrio de Nolita, en pleno Downtown, puede resultar una experiencia gratificante. Sobre la calle Spring, entre Mulberry y Lafayette, rodeado por un puñado de tiendas de diseño y algunos cafés, un cartel verde luminoso invita a Browhaus, la casa de la ceja.
Dentro de la tienda, el minucioso menú y las sillas estilo camilla conspiran para convencer al paseante que existe la ceja perfecta y todos podemos tenerla con un poco de cuidado. En realidad, el concepto no es puramente neoyorquino: tiene raíces en Oriente. Browhaus nació en Singapur en 2004 como un spa para cejas que se especializa en depilarlas –y al mismo tiempo, modelarlas– con una técnica milenaria muy difundida entre egipcios y persas. En vez de sacar pelo por pelo con la pincita (un servicio que también ofrecen y cotiza los 27 dólares), el threading utiliza un tipo de hilo muy fino que al juntarse en varios movimientos atrapa una hilera de pelos y los remueve de raíz (también sale 27 dólares).
Pero es otro el tratamiento estrella dentro del menú. Se llama Brow Reconstruction (una semipermanente de cejas) y consiste en el raspado del área de la ceja para luego aplicar una tintura vegetal en trazos finísimos que le da un efecto tupido, natural, como si fueran pelos de verdad y dura hasta dos años (sale casi 1000 dólares).
Amplio menú
Aquellos sólo son los servicios principales. El menú es más amplio y se complementa con una línea de productos para potenciar los efectos. Desde hace dos años, al frente de Browhaus NY está Ramon Padilla, un egresado de Harvard y un obsesivo de las cejas. Él y su equipo fueron entrenados en la casa matriz de Singapur para perfeccionar la técnica que hace maravillas en las caras de Brooke Shields, Jennifer Connelly, Arizona Muse y Lara Stone, algunas de las clientas habituales. Y orgullosos de su experticia, en la página Web tienen un contador de cejas salvadas que asciende a más de tres millones y medio, en gran medida atraídas por el boca en boca.
Además de los buenos resultados, Browhaus ofrece toda una experiencia. Y si el bolsillo lo permite, aconsejan llevarse el kit –con forma de cámara de fotos– para mantener el trabajo en casa.
DÓNDE ESTÁ
56 Spring St., Between Mulberry St. & Lafayette St.
Web : www.browhaus-usa.com ; facebook.com/browhaus , @BrowhausNYC