Las mangas ahora son hiperlargas
Esas que exceden la muñeca y tapan parte de las manos siguen en vidriera. Enterate de cómo llevarlas, cuáles son los distintos tipos de modelos y adoptá las que mejor te queden y gusten más
Las mangas ultralargas fueron un must este invierno y siguen en carrera. Una tendencia que viene bien en estos días de mucho frío, pero que no está de moda por cuestiones climáticas, sino por estilo. Sobrepasan la mano que proyectan el cuerpo, lo magnifican y alargan. “Son superelegantes y remiten a un estilo oriental”, dice Eva Nowodworski, diseñadora de Las Pepas, y agrega que disimulan brazos cortos y anchos.
Forman parte de las maxiprendas trendies y están incorporadas en diversas tipologías para distintas siluetas y con recursos diferentes.
Es que el hiperlargo en las mangas está presente en prendas oversize, muy vistas en propuestas de autor que trabajan la moldería como pocos y descontracturan recreando las proporciones de la figura. También en marcas de vidriera como Cher, que este invierno las incorpora en suéteres, camisas y abrigos, jugando con superposiciones y en capas. “Un nuevo elemento en juego, que va bien al superponer prendas o hasta para sumarle accesorios encima”, dice María Cher.
“Las mangas hiperlargas forman parte del vértigo de la moda, tienen que ver con la búsqueda de una nueva silueta que perfile esta década”, opina Carolina Rosales, diseñadora de Desiderata.
Es una herencia del movimiento urbano grunch de los años 80. La productora de moda Josefina Laurent explica que “la manga que es larga va bien si se la hace sobresalir de otra prenda, llegando a la mitad de las manos. Se ve mucho en prendas usadas en forma superpuesta, como camisa arriba de camisa, camisa arriba de suéter o camisa que sobresale de la campera o del saco. Quedan mejor en chicas flacas y altas o de estatura mediana, porque si sos baja te encoge aún más”. Antes se usaban arremangadas pero hoy no, cuanto más largas mejor.
Al estilo Charlotte Rampling, Stevie Nicks, Ali MacGraw o Janis Joplin, las mangas acampanadas es un clásico del boho setentista, que también está de regreso. Una nostalgia siempre elegante subida a las pasarelas por Céline, David Koma, Stella McCartney y Louis Vuitton, entre otras firmas. Un retro a Woodstock, que suma en un look romántico y bien femenino, y que esta temporada Estancias Chiripá incluyó en vestidos évasée cortos. “Me encantan las acampanadas y las recomiendo por elegantes”, dice Laurent. Una variante son las mangas victorianas, largas con detalles de buches y anudados.
Un touch muy trendy es el tajo en las mangas XL. Un corte en prendas de tejido de punto, de estilo net, que estilizan la figura y terminan en un juego geométrico. Quedan bien en suéteres o vestidos al cuerpo que abren la línea también con aperturas laterales. Vistas en firmas como Basement o Cher.
Las que tienen más juego creativo son las mangas globo, y el mejor ejemplo están en la propuesta de la diseñadora Vicki Otero, que se especializa en mangas o hace de esta parte de la indumentaria su fetiche. Globo, caladas, con moño, opciones para llevar la mirada, algunas más armadas y otras menos o estilizadas, pero con mucho detalle y elaboración. No es recomendable para mujeres con mucho pecho u hombros grandes.
Más cortas, más arriba, son los modelos abuchonadas, oxford, con tiras o anudadas. “Suman un elemento que permite jugar”, dice Cher, que las incluyó casi todas en su propuesta de invierno. Cuestión de probar frente al espejo y ver la que mejor quede o guste.