Fuera de serie

A través de cada diseño la moda habla por y de sus creadores, de la gente y de un contexto espacio temporal que la vuelve única. Pero, al mismo tiempo, la moda ayuda a contar otras historias? Y así es cómo se relaciona con el cine para el que se ha vuelto, en innumerables ocasiones, un importante soporte, ofreciendo, durante el siglo XX y en lo que va del XXI, personajes, escenas, prendas y estilos inolvidables: sólo basta con mencionar Casablanca , Desayuno en Tiffany's , Annie Hall y Los excéntricos Tenenbaums como algunos ejemplos.

Las series de televisión no están ajenas a este nutrido ida y vuelta: Sex and The City , Mad Men y Gossip Girl posiblemente no hubieran tenido el mismo éxito si no fuera por el protagonismo que se le dio al vestuario desde el capítulo inicial. En muchos casos, cautiva primero la estética y luego la trama, convirtiéndose el estilo de la serie en un fenómeno con eco en revistas, páginas y blogs de moda.

Por eso, también, la creciente importancia que reciben los vestuaristas o estilistas. Una profesión que no es para nada nueva, sino que data de los inicios mismos del cine: imposible decirlo sin recordar a la gran Edith Head, a Adrian y Jean Louis, responsables de que los años dorados de Hollywood brillaran aun con más fuerza.

Hoy, los exponentes más importantes del diseño de vestuario son otros y Eric Daman es uno de ellos. Está a cargo del estilismo en Gossip Girl e ideó el look de cada uno de los personajes de la serie. Daman entró al mundo de la moda gracias al modelaje. En los 90, mientras estudiaba Literatura Francesa en la Sorbonne en París, lo descubrió el fotógrafo Steven Meisel, que lo hizo posar junto a Kate Moss en sus campañas para Calvin Klein. Pero ser modelo no estaba en sus planes, prefirió situarse detrás de las cámaras. Primero incursionó haciendo estilismo en revistas como Visionaire y I-D , hasta que se introdujo en la pantalla grande y en la chica también.

En 2000, Daman se convirtió en uno de los vestuaristas de Sex and The City de la mano de la estilista Patricia Field, aquella que perfiló a Sarah Jessica Parker como un ícono dentro de la moda. Vistió a las cuatro amigas de la serie por tres temporadas y hasta recibió por eso un Emmy en 2002. En paralelo comenzó a trabajar en el vestuario de películas hasta que lo llamaron para encargarse del estilismo de Gossip Girl , que arrancó su quinta temporada el 24 del actual, a las 21, por Glitz. Y no lo hace solo: tiene un equipo de veinticinco asistentes que lo ayudan a delinear el look de cada uno de los personajes, en su mayoría jóvenes de la alta sociedad neoyorquina con un visible interés por la moda. Problemas para conseguir la ropa no tienen: las marcas y los diseñadores les ofrecen showrooms enteros y prendas que salen de las pasarelas y van directo al guardarropa del show.

Daman también ha colaborado en colecciones cápsula para firmas como DKNY, Swarovski y Charlotte Russe, una cadena estadounidense de ropa masiva, pero su último diseño ha sido el de su propio libro, You Know You Want It: Style, Inspiration, Confidence, en el que indaga en el asesoramiento de imagen y acaba de lanzar en todo el mundo.

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