El Palermo Soho de Tokio
TOKIO
En los barrios residenciales de Daikanyama y Nakameguro se concentran locales de diseño de autor nipón. Quiénes son y qué ofrecen
A solo 15 minutos de los miles de carteles de neón y de las multitudes en las calles del centro de Tokio, están los barrios de Daikanyama y Nakameguro. Allí las marcas y los diseñadores japoneses conviven con la tranquilidad de una zona residencial que vale la pena descubrir, recorrer.
En esta zona las propuestas de moda son diferentes de las de otras de la ciudad; hay locales de firmas más exclusivas y con menor alcance que las grandes cadenas internacionales. Muchas de las tiendas son multimarcas o tienen formato pop up, funcionan dentro de espacios que alguna vez fueron casas particulares y conservan bastante de su construcción original. Pero estos pequeños negocios no solo venden indumentaria, calzado o accesorios, en muchos también hay pastelerías, cafés, degustación de vinos y hasta venta de productos que nada tienen que ver con indumentaria como casetes de los 80 o libros. Es que es tan importante vender como brindarle una experiencia de compra especial al consumidor.
Se trata de una serie de tiendas que se instalaron en los últimos años y generaron un polo de moda que de a poco atrae a cada vez más marcas locales e internacionales.
Daikanyama
Esta es una de las zonas más trendies de Tokio. Muchos la comparan con el barrio de Le Marais de París o con algunos rincones del Brooklyn neoyorquino. En los últimos 15 años, Daikanyama se transformó en uno de los lugares de la ciudad preferidos por los diseñadores japoneses por su sofisticación casual y moderna. Por eso muchas marcas locales eligieron instalar sus pequeñas tiendas y concept stores entre las casas de aquellos que prefieren vivir alejados del ruido del centro.
Es un lugar que se convirtió en punto de referencia. La instalación del T-Site, un complejo de edificios con una gran sucursal de Tsutaya, la cadena de librerías más importante de Tokio, le trajo aires de cambio al barrio; fue una de las primeras renovaciones que se dieron. También hay algunos negocios, cafés, restaurantes y una galería de arte. Alrededor de este centro gastronómico y cultural empezaron a sumarse diferentes tipos de negocios de moda, multimarcas y pop ups.
Okura es el primer local de diseño que se abrió en Daikanyama hace un poco más de 10 años. Se trata de una tienda que funciona en un viejo galpón en el que se encuentra ropa para mujeres y hombres inspirada en la tradición japonesa. Entre los destacados, están las prendas teñidas con aizome, una técnica milenaria en la que se usa ai, una planta originaria de China que deja un color azul oscuro sobre la tela. Según cuentan, los samuráis solían teñir sus quimonos de esta forma porque creían que les daba más fuerza.
La tienda Journey funciona en una casa de la década del 40 y no cambió demasiado su estructura desde esa época. Ahí se comercializan básicos de ropa masculina bastante personal que se importa principalmente de Estados Unidos. Tiene una vidriera que funciona como un exhibidor de una galería o de un museo, en el que suelen haber objetos y fotos antiguas del barrio.
Evisu empezó siendo una pequeña firma de diseño de denim y hoy es una de las marcas de jeans más reconocidas de Japón. Su creador, Hidehiko Yamane, comenzó trabajando con técnicas de producción tradicional y pintando a mano sobre las prendas un logo que representaba a una gaviota. Un jean de esta marca hoy tiene un precio promedio de 250 dólares.
Las tiendas pop up también son tendencia. Es habitual ver puntos de venta temporales de firmas conocidas instalados en zonas más tradicionales de la ciudad, como Shibuya o Shinjuku o, en otros casos, locales de diseñadores emergentes que testean sus productos en estos barrios.
Nakameguro
Este barrio es el que está atravesado por el río Meguro y se encuentra junto a Daikanyama. Es uno de los mejores lugares para disfrutar el momento del florecimiento de los cerezos, entre marzo y abril, porque están por todos lados, una belleza. Desde fines de la década del 90 empezó a recibir la atención de jóvenes artistas y diseñadores que se vieron atraídos por una onda bohemia y chic.
En sus calles también se multiplicación negocios de moda, y muchos ofrecen una variedad de marcas entre las que se pueden encontrar desde piezas de firmas de lujo internacional como Martin Margiela o Prada, hasta cientos de prendas de diseño independiente. También es la zona de los locales vintage con productos especialmente curados y, además, abundan las peluquerías; las hay de todos los tamaños y al menos una por manzana.
Igual que en Daikanyama, muchas tiendas están dentro de viejas casas y mantienen la estética tradicional de la zona, con bastante presencia del vidrio y de materiales rústicos en su construcción. Están inmersos en una atmósfera barrial y proponen que el cliente se sienta como en casa, por eso perfuman e iluminan especialmente sus espacios de venta y los ambientan con muebles característicos de livings, patios o galerías exteriores; y, una constante por acá, no faltan las bicis en la puerta.
Minotaur es una firma de moda urbana masculina que combina el estilo despojado japonés con las novedades de la tecnología aplicada tanto a los materiales como al diseño. Uno de los destacados de su colección es una chaqueta ideal para friolentos: tiene una batería que al tocar un botón calienta la prenda, pensada especialmente para mantener la temperatura del cuerpo en invierno.
Otra marca popular de Japón es Onitsuka Tiger, creada en 1949 en la ciudad de Kobe. Su fundador, Kihachiro Onitsuka, empezó con el diseño de zapatillas para promover el desarrollo deportivo entre los más jóvenes. Hoy sus productos son un símbolo de la industria local.
1LDK Apartments es un concept store dividido en tres sectores: indumentaria femenina y masculina especialmente curada, objetos de decoración y gastronomía. El nombre deriva de un término inmobiliario y tiene que ver con la forma más popular de alquiler de viviendas en Tokio: una habitación con living y cocina incorporada. El punto de venta está ubicado dentro de un edificio y los sectores están distribuidos como partes de un departamento. La idea es que el cliente pueda encontrar de todo un poco y, según el horario en que visite la tienda, pueda sentarse a tomar un trago, un café o probar un plato gourmet.
En Daikanyama y Nakameguro la tradición japonesa se encuentra con la modernidad de las tendencias. Son dos barrios que les hicieron un lugar al diseño y a la innovación comercial. Sin duda, una visita imperdible para aquellos amantes de la moda que buscan propuestas originales.
Una zona con aires zen
En Daikanyama y Nakameguro la tradición se une a las últimas tendencias. A un par de paradas de metro del multitudinario cruce de Shibuya, este oasis trendy es el paraíso para aquellos amantes de la moda que buscan conocer la verdadera esencia del diseño japonés. El corazón de la zona es el río Meguro, que atraviesa el lugar por canales rodeados de pequeñas tiendas y cafés de aires zen.