Desfile for export. El fashion gauchesco hizo pie en Nueva York
NUEVA YORK.- Llovía un poco y ya estaba atardeciendo en Manhattan cuando el emblemático espacio de arte Kitchen NYC -que fue fundado en los años 70- abrió sus puertas para la presentación de Gaucho Buenos Aires, la marca argentina que desembarcó en Nueva York, en el marco de la semana de la moda.
Al espectacular desfile –que contó con la presencia en primera fila de Angie Landaburu y Concepción Cochrane Blaquier-, siguió una fiesta en la que se convidaron empanadas y vinos Malbec. La música del desfile estuvo en manos del youtuber Neels Visser y el agite del baile, del DJ Carlos Jadraque.
Así, se presentó la tercera colección de la firma fundada por el norteamericano Scott Mathis -CEO de Algodón Group-: una propuesta made in Argentina de diseño autóctono que fusiona la tradición con lo moderno en clave de lujo.
Bajo el nombre "Déjà vu", línea fue concebida por la joven diseñadora de indumentaria Carmen Vils junto con Guido Spangenberg, a cargo de los accesorios. "Nuestra propuesta, esta vez, toma inspiración en la estética de fines de los años 60 y comienzos de los 70 –explicó Vils a LA NACION-, y siempre con el ADN de la marca, que está presente estas notas de lo gauchesco, de lo bonaerense, mezclado con algo nuevo. En este caso, nos basamos en el aniversario de los 50 años de la llegada del Hombre a la luna y de ahí vino la paleta de colores que usamos y cierto recorrido visual emparentado con los trajes espaciales de los astronautas".
El celeste -el color del planeta tierra visto desde el espacio-, y el naranja -presente en los equipos espaciales de la NASA-, tienen gran protagonismo y se aplican a diversas materialidades y morfologías
"Además, incluimos los trabajos del artista plástico Tomás Maldonado, de donde tomamos las formas geométricas, tanto de accesorios como prendas", agregó Carmen Vils.
La impronta artesanal está fuertemente presente en la colección a través de los trenzados, del uso de fibras naturales y cueros, del trabajo con madera y los colores tierra que aparecen en algodones, sedas, chiffon y organzas.
"Los dueños son norteamericanos y desde el origen, la misión de Gaucho siempre fue vender Argentina para el mundo. Haber presentado la colección en Nueva York tiene que ver con eso. Fue muy emocionante, fueron quince minutos de desfile, con un enorme trabajo atrás que me generaron muchos nervios y un gran disfrute", comentó la diseñadora.
En cuanto al mercado local, la firma abrirá en breve -aún no hay fecha- su primera tienda en Buenos Aires, en la Maison Algodón.