La Cámara en lo Civil ratificó la decisión; la vicepresidenta lo había denunciado por sus dichos en Animales Sueltos; “Quería que pidiera disculpas y yo dije que de ninguna manera”, dijo en LN+
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Este viernes, la Cámara Civil ratificó el rechazo a la demanda que Cristina Kirchner inició contra el periodista Eduardo Feinmann en 2016. En aquel entonces, la expresidenta había denunciado al conductor luego de que él la calificara de “coimera” y “cretina” al aire de Animales sueltos (América TV). En septiembre de 2021, la Justicia respaldó el derecho del demandado a expresarse libremente pero se trataba de un fallo en primera instancia. Ahora, con esta segunda -y definitiva- sentencia, Feinmann celebró en el aire de LN+.
“Muy importante el fallo de la Cámara Civil a favor tuyo, a favor del periodismo, a favor de la libertad de expresión. Muy bueno porque me parece que el intento de Cristina, ya lo hablamos la otra vez cuando salió el fallo en primera instancia, era el disciplinamiento. Con vos y todo el periodismo”, advirtió Jonatan Viale cuando se cruzó con su par en el pase entre sus programas. Luego, tomó la voz el propio Feinmann quien habló de todo el proceso.
“Ya el tratar de disciplinar al periodismo fue en 2016. Yo fui el primer demandado por Cristina, después creo que fue Wiñazki y después Lanata, en el mismo sentido. Es meter miedo. Creía Cristina que yo me iba a sentir amedrentado, con miedo... te tiran el poder encima y... ella lo que quería en esa audiencia de conciliación era que yo le pida disculpas y si era de rodillas mejor. También quería que yo pidiera disculpas públicas y yo le dije que de ninguna manera, sigamos con el juicio, no tengo nada de que arrepentirme”, rememoró.
“En mi no estaba el ánimo de injuriar, yo hice una descripción. Dije que era una cretina y una coimera, lo mío era meramente descriptivo. Lean el diccionario, viejo. Yo no se lo digo para insultarla, ‘cretina’ significa ‘necia’ y eso es lo que yo creo. Lo que dijo la Justicia”, continuó el periodista previo a leer un fragmento del fallo al aire. “Ella me demanda porque yo había propalado, según ella, ‘diferentes insultos, comentarios hirientes, ofensivos contra la reclamante aduciendo que llevan a ofender su honra, su buen nombre y honor y su imagen’”.
“¿Qué es lo que dijo la Cámara? Esto es un doble conforme. Dice la Cámara: ‘No se trata de expresiones estrictas e indudablemente injuriantes, ni constituyen insultos, ni tampoco una vejación injustificada. Los dichos referidos a que ‘el pueblo la quiere ver presa’ y a que el demandado induce a la Justicia para que vaya en su contra, se tratarían más bien de opiniones o juicios de valor del periodista”, leyó también. “‘No deja de ser una opinión crítica que merece protección constitucional, insuficiente para calificarla como expresión estricta e indudablemente injuriante’”, concluyó. Luego, fiel a su estilo, cerró el tema y con un toque ácido de lo ocurrido: ”En realidad es una expresión de deseo. Mi expresión de deseo es que la señora vaya presa”.
LA NACION