Durante su paso por Mesa Chica (LN+), el economista emitió una dura crítica hacia las compañías formadas desde el Estado y profundizó sobre los motivos por las que fueron creadas
- 2 minutos de lectura'
El economista Fausto Spotorno apuntó el martes contra las empresas públicas locales y explicó por qué es difícil que funcionen correctamente en el país. Durante su paso por Mesa Chica (LN+), programa conducido por José Del Rio, consideró que este tipo de compañías “no son más que cajas políticas”.
“Nunca fueron creadas para generar ganancias o brindar a la sociedad ciertos servicios públicos”, sostuvo e insistió: “Siempre fueron cajas políticas. Y no es algo nuevo. Pasó siempre. Pasa ahora y ocurrió también en los años 80. Para lo único que sirven es para meter gente ahí”.
Además, compartió un gráfico que muestra cómo ha crecido el aporte del Tesoro bonaerense a las compañías que dependen de Axel Kicillof. “Esto hace que la provincia de Buenos Aires sea un de las pocas de nuestro país que realmente tiene déficit”, sostuvo.
“Esto es algo que tampoco es nuevo. Hace rato que está pasando tanto territorio bonaerense como en otras provincias. La Argentina ha dejado de crear empleo y, en vez de estimular la formación, la salida termina siendo inventar empleados públicos. No es sustentable y pasó siempre en nuestro país”, criticó.
Un duro pronóstico económico para 2023
Con base en la situación económica actual, Spotorno hizo un duro pronóstico de cara a 2023: “Tenemos una economía que va empezar el próximo año con menos de lo justo. Al Gobierno le faltan dólares y el ministro está tratando de conseguirlos”.
Y detalló: “Del lado de las exportaciones ya no hay mucho para hacer porque ya las liquidaste con el dólar soja. En materia de trigo, hay sequía y lo que cosechas es estrictamente para consumo interno. Si decidís exportar, no solo disparás el precio de derivados como la harina sino que aumentas la pobreza”.
“Recién los dólares vamos a tenerlos en abril”, remarcó el economista e hizo hincapié en que “tenemos que llegar hasta allí de alguna manera, probablemente con ayuda de las importaciones”. “Todos están tratando de aguantar pero no hay solución a largo plazo porque el Gobierno no ve el largo plazo”, concluyó.
LA NACION