El expresidente expuso durante el evento de dirigentes liberales; “Creo que todo este dolor que estamos teniendo hoy se ha transformado en aprendizaje, en madurez”, planteó
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Centro de todas las miradas durante la cena anual de la Fundación Libertad, el expresidente Mauricio Macri brindó un discurso de cierre, junto a los exmandatarios Sebastián Piñera (Chile), Felipe Calderón (México) y Jorge Quiroga (Bolivia), y se mostró cercano a Patricia Bullrich.
Cuando subió al escenario después de las 23, el exmandatario miró su celular y comenzó a leer un discurso escrito. Pero, rápidamente, bromeó con que se trataba de un texto realizado con inteligencia artificial a través del Chat GPT. “Lo acabo de hacer en la mesa y lo hago porque esto muestra la revolución tecnológica en la que está la humanidad, que ahora entra en una nueva fase y que va a tener un gran impacto en nuestras vidas”, comenzó.
Macri continuó su breve discurso frente a los dirigentes liberales e hizo un lamento por los años “perdidos”. “En la Argentina estamos con la inflación más alta en 31 años, sin moneda, con más de 40 tipos de cambio, azotados de vuelta por el narcotráfico. Volvieron los cortes de luz que pensamos que ya no íbamos a tener. Temas que pertenecen al siglo 20, mientras nuestros vecinos ya lo resolvieron hace tiempo”.
Tras ello, apuntó contra el Gobierno: “Esto es producto de un ejército de demolición, que ha hecho un daño nunca visto en tan poco tiempo”.
Sin embargo, se mostró optimista por el futuro. “Esto que vengo sintiendo y soñando como el fin del populismo nos va a abrir 20 años de crecimiento en la Argentina que hace tiempo estamos esperando”, expresó. Y agregó: “Como nunca he sido un intelectual, yo soy un optimista. Creo que todo este dolor que estamos teniendo hoy se ha transformado en aprendizaje, en madurez”.
El fundador del PRO insistió en que el cambio “va a llevar trabajo” y que “no va a ser producto de un salvador sino de un equipo”. También, aseguró: “Creo que estamos a punto de amanecer”.
“Nos quedan meses muy duros por delante, porque cuando estás sin rumbo sin plan, sin gobierno y con la impunidad con que actúan todos los días van destruyendo más niveles de institucionalidad, van empujando más gente a la pobreza. Necesitamos mucha madurez, cohesión y firmeza para defender el proceso que queda hasta este tan esperado cambio de gobierno que está por llegar”, planteó.
El expresidente compartió que vive este momento como “una nueva era”, luego que este domingo anunciara que da un paso al costado en la carrera presidencial.
Sobre el final del discurso, hizo un paralelismo con el triunfo de la selección nacional en Qatar y el futuro de la Argentina. “No creo que haya sido una casualidad. Fue una confirmación de lo que yo venía soñando. Ese grupo de jóvenes transmitieron salud mental. Un equipo técnico de toda gente sensata. Teniendo al mejor jugador de la humanidad, ninguno no se quedó a esperar que lo salven, cada uno luchó, cada uno peleó y sufrió y el equipo salió campeón. Eso nos marcó un camino. Ellos nos dijeron, es por acá, es con humidad”.
Por último, concluyó: “Viene un cambio de era y necesitamos todos ser protagonistas. Espero que estemos todos ayudando al próximo presidente a dar vuelta la historia”.
Durante el evento, se desató una “batalla” por las fotos, tras el anuncio de Macri y la fuerte interna que atraviesa Juntos por el Cambio. Aunque la primera foto del expresidente fue para Rodríguez Larreta, durante la cena se lo pudo ver conversando con la precandidata y líder de PRO, Patricia Bullrich, que fue la primera en llegar al Golden Center. Bullrich se sentó junto a Awada, a la izquierda de Macri, y Larreta junto a Argimón, a la derecha del expresidente.
También, la exministra de Seguridad recibió halagos del exjuez de Brasil y actual senador Sergio Moro. “Ella fue una ministra luchadora contra los criminales y el crimen organizado”, dijo ante el recinto que estalló en aplausos.
Antes de los discursos de los expresidentes invitados -Sebastián Piñera (Chile), Felipe Calderón (México) y Jorge Quiroga (Bolivia)- Moro abrió la última parte de la gala con menciones especiales a los presentes y un saludo para Lionel Messi y la selección argentina de fútbol coronada en Qatar. Sin embargo, el gesto que tuvo con la presidenta de Pro, Patricia Bullrich, destacó.
LA NACION