El periodista de LN+ vislumbró cómo será el día post elecciones presidenciales; qué pasará con el dólar y el advenimiento de “un país distinto”
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Este jueves, Luis Majul realizó su columna política a días de las elecciones presidenciales. El foco estuvo puesto en cómo amanecerá el país el día lunes, cuando se sepa si hay nuevo presidente o habrá que esperar a la definición en el ballotagge. Nuevamente, se puso sobre el tapete el rol que influirá el dólar y la posibilidad de un “carpetazo” a horas del cierre de campañas.
A continuación, la columna completa de Luis Majul:
¿Qué pasará el lunes, cualquiera sea el resultado de la elección? Si el dólar oficial llegara a 500 pesos, como dice Carlos Melconian, por culpa del mismo Sergio Massa, lo que implicaría otra devaluación de más del 40 por ciento. ¿No entraríamos en una estampida de precios, en una hiper, donde colapsaría el escaso poder adquisitivo de los argentinos y aumentaría la pobreza de manera exponencial, generando algún tipo de convulsión social?
¿Qué pasaría si Milei gana en primera vuelta? ¿Aflojaría la tensión porque se aplacaría la incertidumbre o el panorama se complicaría más, porque Massa no tendría incentivos para evitar situaciones traumáticas? El eventual ingreso de Patricia Bullrich a la segunda vuelta, ¿aportaría más incertidumbre o más racionalidad al futuro inmediato?
A los vaticinios de las encuestadoras no se los puede tomar en serio. La mayoría ve a Milei primero, pero sin dar el batacazo. A Massa segundo, más cerca o más lejos de Milei. Y a Bullrich tercera, más o menos cerca de Massa. Pero en los últimos días, todos vieron señales que preanuncian un cisne negro. Señales contradictorias.
Por ejemplo: una constante y silenciosa subida a Bullrich, a expensas del miedo a Milei y una pronunciada caída de Massa. Por ejemplo: un rotundo triunfo de Milei en primera vuelta, debido a la caída de Massa y el estancamiento de Bullrich. Por ejemplo: una victoria ajustada de Massa sobre Milei, aunque no se explica bien de dónde sacan semejante conclusión.
Las operaciones sucias y los aprietes siguen a la orden del día. Y no se descarta que en las próximas horas se revolee un nuevo carpetazo. Un último manotazo de ahogado para evitar que uno de los candidatos llegue a la gran final.
Lo único seguro es que después del domingo vendrá el lunes. Y que nos vamos a despertar con un país distinto. Con categorías de análisis diferentes a las que estamos acostumbrados a escuchar y repetir.