El periodista de LN+ reflexionó sobre el poder político que tiene Cristina Kirchner
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Imaginate un señor de unos 50 años triste, solitario y viudo.
Acaba de perder a su amada esposa, Leonora.
¿Dónde está?
Encerrado en su escritorio con una enorme biblioteca llena de libros.
De pronto, se mete en la habitación un cuervo y se posa sobre un busto.
“¿Cómo te llamás?”
-”Nunca más”
“¿Qué hacés acá?”
-”Nunca más”
“¿Qué querés de mí?”
-”Nunca más”
“¿Sos mi esposa?”
-”Nunca más”
“¿Te vas a ir de acá?”
-”Nunca más”
Lo único que respondía ese cuervo oscuro con la mirada maldita era: “nunca más”.
¿Qué pasó?
Pasaron días, semanas, meses, años.
Y efectivamente el cuervo no se fue, nunca más,
¿Cómo termina la historia?
Nuestro protagonista enloqueció, para siempre.
Esto lo dijo esta tarde el intendente de Ensenada Mario Secco.
Hace varias semanas decimos acá que el kirchnerismo ha entrado en la “fase psquiátrica”.
No es un chiste;
no es una exageración;
no es una forma de decir;
es real lo que te conté recién es un poema de Edgar Allan Poe que se llama “El cuervo”.
Ahí el protagonista enloquece y se pone a discutir y a pelear con un cuervo.
Acá está pasando lo mismo.
El kirchnerismo enloqueció porque día a día le cae la ficha que la señora de Kirchner es un liderazgo políticamente acabado, terminado, concluido.
¿Qué hacen?
Reaccionan de manera violenta.
Amenazan con el caos;
amenazan con que todo vuele en pedazos.
El senador Parrilli -mayordomo de Cristina- había dicho hace muy poco tiempo: “Nadie va a poder gobernar con Cristina proscripta”.
¿Te das cuenta?
Usan la amenaza para generar miedo.
El miedo es lo único que les queda.
La re-pregunta obligada para Parrilli, para Mario Secco y para esta gente que entró en la fase “lunática”.
Es: ¿o sino qué?
¿Qué tienen pensado hacer?
¿Qué pasa si la condena de Cristina Kirchner por ladrona de u$s 926 millones queda firme?
¿Van a tomar la Corte?
¿Van a mandar a matar al fiscal Luciani?
¿Van a mandar a matar al presidente de la Corte Horacio Rosatti?
¿Van a repetir la historia del fiscal Alberto Nisman?
¿Hasta dónde son capaces de llegar en este estado de locura absoluta?
Simplemente recuerdo lo que dijo el año pasado el presidente Fernández: “Nisman se suicidó. Espero que el fiscal Luciani no haga lo mismo”.
¿Te das cuenta que el kirchnerismo cada vez profundiza más la etapa lunática?
Hace poquito Juan Grabois dijo algo parecido: “’si la tocan a Cristina, qué quilombo se va a armar’, tiene que dejar de ser un cantito”.
Es muy importante entender algo;
esta gente no está defendiendo a Cristina.
Esta gente está defendiendo
sus cargos,
sus puestos,
sus cajas,
sus pautas,
su plata.
Toda esta gente, sin Cristina, desaparece.
En el sentido político.
Por eso, enloquecen.
Sin Cristina, no hay Grabois.
Sin Cristina, no hay Mario Secco.
Sin Cristina, La Cámpora pierde las cajas.
Sin Cristina, el periodismo militante se queda sin fuente de financiamiento.
Por eso, el nerviosismo.
Vos fijate cómo los fanáticos le siguen rogando que sea candidata.