En LN+, el periodista analizó la reaparición pública de Cristina Kirchner y sus críticas hacia la gestión del Presidente
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Imaginate un barco que acaba de chocar contra un iceberg y se está hundiendo en el medio del océano.
Entonces, sale el capitán y dice: “Está todo bien muchachos”; “tranquilos”; “el barco no se hunde”; “hay una crisis de crecimiento”. Sin embargo, un rato después sale de la cabina la jefa de tripulación -la que manda en serio- y les advierte a los pasajeros que el capitán está borracho y que dice pavadas.
Entonces, ¿qué hace la jefa? Lo empieza a criticar de manera despiadada mientras el barco se hunde. “Nunca ha habido una participación tan baja de los trabajadores en el producto bruto interno como la que estamos teniendo hoy, absolutamente regresiva”. “Es necesaria una suma fija que vuelva a darle capacidad al salario de los trabajadores”. “Saben que yo voy a hacer lo que tenga que hacer para lograr que nuestro pueblo, nuestra sociedad, pueda organizarse. Éramos un pueblo alegre; volvamos a recuperar esa alegría que tuvimos alguna vez. La alegría de que el sueldo alcanzaba, la alegría de ir al trabajo, de saber que había futuro”.
¿Por qué esta señora dice “éramos” un pueblo alegre? Por esto...
Focus Group de Giaccobe & Asociados: ¿Qué emoción le produce la situación actual de la Argentina?
La inmensa mayoría responde: “tristeza”; luego incertidumbre; luego angustia; luego bronca; luego preocupación.
Pero vos fijate qué curioso. Ella critica y critica y critica
Pero le sigue sacando fondos al barco.
Lo que ella no cuenta es que todos los kioscos del barco los maneja ella. El barco le paga a ella una pensión de $ 6.394.030. 147 jubilaciones por mes. Así que, no estaría con problemas para llegar a fin de mes.
Y en segundo lugar la jefa no se baja del barco porque tiene a sus chicos acomodados en la tripulación manejando los kioscos.