Este miércoles, en su tradicional columna política de +Realidad, Jonatan Viale cargó contra el kirchnerismo, y especialmente con su desconexión con el sufrimiento de los pueblos, al destacar la falta de empatía del oficialismo en diferentes tragedias ocurridas en el país y en el mundo. En este contexto, el periodista definió al gobierno de Alberto Fernández de la siguiente manera: “No laburan por el bien común, laburan solamente por el bien propio. Son verdaderos psicópatas del poder”.
Debajo, la columna completa de Jonatan Viale
Psicópatas del poder
¿Cuál es la característica principal de un psicópata? Anestesia afectiva. No sienten culpa. El psicópata carece de empatía desde su nacimiento. No puede acceder ni al dolor ajeno, ni a la felicida ajena. No conecta con el otro. El psicópata solamente piensa en su felicidad.
¿Qué suele hacer? Te puede engañar, te puede herir, te puede manipular, sin ser necesariamente violento.
Ahora bien, ¿qué pasa si estamosante un psicópata del poder? Es decir, un gobernante, un líder que no conecta con las emociones del pueblo. Hace algunos meses se organizó la marcha de las piedras, en homenaje a los muertos del Covid. ¿Vos te acordás lo que pasó? Un grupo de militantes kirchneristas pisoteó las piedras, profanó el lugar y hasta arrancó carteles con las fotos de los muertos.
¿Qué dijo el presidente desepués de esta atrocidad? Nada, ni una palabra. ¿Qué dijo Cristina (Kirchner) después de esta locura? Nada. Es decir, la dupla gobernante calló ante una profanación colectiva.
¿Sabés cómo se llama eso? No empatizar con el dolor, no conectar con las emociones de tu pueblo. Demostrar que sos un psicópata del poder.
Antes de eso, Alberto Fernández ya había blanqueado que ni siquiera conociera el caso de Solange Musso. (Video, Alberto sobre Solange: “La verdad es que no conozco el tema”). Y para completar la psicopatía, Ricardo Forster, doctor en Filosofía y asesor presidencial.
Dijo esto Forster: “Veía algunas de las imágenes de la marcha de las piedras. Me pareció que ahí no había duelo, sino odio y bronca”. Para Forster no había duelo, no había dolor, no había tristeza, no había angustia. Había odio y bronca. Solo una porquería de persona puede razonar de esa manera.
Se te acaba de morir un familiar de manera repentina, de manera imprevista, de manera injusta, de manera antinatural. No lo podés ver, no lo podés tocar, no lo podés besar, no lo podés abrazar, no lo podés despedir, no lo podés enterrar, no lo podés velar. Pero, según Forster, la marcha de las piedras es una marcha política, es una marcha de odio.
Te repito: el psicópata no siente culpa, nunca empatiza con la alegría, con la tristeza o con la angustia del otro. El psicópata, incluso, es capaz de hacer una broma de mal gusto. Sin darse cuenta que está lastimando a los demás. (Video Cristina Kirchner en el tren: “¿Están todos ubicaditos? Miren que tenemos que hacer rápido porque sino viene la formación y nos lleva puestos”).
Ahí tenés, la demostración más clara de la desconexión con las emociones ajenas. ¿Vos te acordás lo que pasó con Nisman, después de que apareció muerto? El gobierno kirchnerista empapeló toda la ciudad con afiches de Nisman en un boliche. Es más, el actor Gerardo Romano dijo que Nisman era un corrupto, un mal funcionario y un putañero.
Es más, Aníbal Fernández dijo que Nisman se gastaba la plata en minas. Y como para cerrar el ciclo de la psicopatía, un senador kirchnerista llegó a decir que Lagomarsino era el novio de Nisman y lo había asesinado por celos.
Te repito la frase porque es llamativamente vulgar: “Fue un crimen pasional, entre un amor homosexual, donde el marido lo encontró en situaciones amorosas al muerto y le pegó un tiro en la cabeza amorosamente”. Esta gente no está bien de la cabeza.
¿Sabés lo que pasó en enero pasado? Un economista kirchnerista llamado Sergio Chouza le escribió en Twitter al diputado Waldo Wolff.
El kirchnerismo tiene eso tan difícil de explicar, no solo es agresividad, sino también una cierta jactancia del daño que te estoy haciendo. Es decir, un goce perverso del dolor ajeno. No solo no me molesta tu sufrimiento, sino que -un poco- lo disfruto.
Acordate lo que pasó el día que llegamos a los 100.000 muertos por Covid. La primera dama estaba en otra galaxia, y subió fotos de su cumpleaños. Acordate de Axel Kicillof jugando a poner “cara de coronavirus”.
Es todo lo mismo. 1- Pisotear las piedras; 2- Burlarse de los muertos de Once; 3- Mofarse de Nisman; 4- Reirse de los 100.000 muertos. En el fondo, lo que demuestra es gente sin alma, sin amor, sin empatía, sin compasión, sin misericordia.
¿Qué es la misericordia? Sentir compasión por el que sufre y ofrecerle ayuda. Consolar al triste, darle de comer al hambriento, vestir al desnudo, enterrar a los muertos, dar un consejo, dar un abrazo, contener, escuchar.
Estamos ante un gobierno de mármol. Son fríos, son indiferentes, son insensibles, son un témpano, ante el sufrimiento ajeno. Se quema Corrientes y el presidente está jugando al fútbol en la playa. O si querés te muestro un ejemplo más claro de la falta de empatía ante el dolor colectivo. Se despedía Esteban Bullrich del Senado de la Nación ante el avance de su enfermedad. Todos los senadores, de pie, llorando y aplaudiendo, menos una persona.
Bueno, ahora que nos entendimos, como funciona la cabeza de un psicópata del poder, es momento de volver a ver el minuto de silencio que se hizo ayer por los muertos en Ucrania. ¿Se entiende lo que es un psicópata del poder? No le interesa nada, no sufre el dolor ajeno, no tiene culpa, no empatiza. Solo se preocupa por su alegría, por su felicidad, por su ventaja personal, por su jugada, por su chicana. Cristina, mientras se hacía un minuto de silencio, estaba disfrutando que le había ganado a Mario Negri. No hay ninguna conexión con el sufrimiento de los pueblos. ¿Sabés cuál es el problema?
El gobernante que no sufre el dolor ajeno no puede manejar un país. No importa qué esté pasando a 13.000 kilómetros de distancia. No están atacando ucrania, están atacando nuestra filosofía de vida, nuestro sistema político, nuestra libertad. Si no te conmueve eso, no te conmueve nada.
Por eso, yo sostengo una y otra vez que estamos gobernados por burócratas que se levantan todos los días para administrar poder y cajas. No tienen un proyecto de país, tienen un proyecto de poder. No laburan por el bien común, laburan solamente por el bien propio. Son verdaderamente psicópatas del poder.
Opiniones libres. Hechos sagrados.