Este lunes, en el habitual pase que comparten en LN+ Pablo Rossi y Eduardo Feinmann, este último sorprendió a su colega al mostrarle un juguete creado recientemente: el muñeco del presidente Alberto Fernández en posición de arquero.
El ‘chiche’, como lo llamó Feinmann, es una réplica de la situación que el mandatario protagonizó la semana pasada en Mar de Ajó, cuando se puso a atajar penales a los niños presentes en el lugar.
En medio de la seriedad de los temas cotidianos que ofrece la actualidad argentina, el conductor de El noticiero de LN+ se dio permiso para tomarse un tiempo de distensión en un momento del pase. Así fue que, con un objeto en la mano, le dijo a Rossi: “Te voy a mostrar algo que es simpatiquísimo, para aflojar un poco”. Entonces, dio vuelta lo que tenía en la mano, y apareció el muñeco de ‘Alberto arquero’.
“Ya hicieron el Alberto arquero. Hacele un primer plano. Les traigo de regalo el Alberto arquero. Es genial”, dijo el periodista mientras exhibía el juguete y se escuchaban las risas de los presentes en el estudio al ver la singular figura.
“El nono jugando en la plaza con los nenes”, dijo Rossi, entonces. “¿Pero no es genial? Ya hicieron el chiche. ¡Espectacular! Muy bueno”, exclamaba Feinmann. “Va a pasar a la historia por atajar penales en la arena”, sentenció entonces Rossi, a lo que su colega de El noticiero replicó: “Es que no los atajó. Le hicieron dos goles, un chiquito de 12 años. Uno a la izquierda y otro a la derecha. Bien pegadito al palo”.
A continuación, pasaron al aire las imágenes del presidente en Mar de Ajó del jueves pasado cuando, en una visita a la costa atlántica, se puso a atajar en la playa penales que le patearon algunos niños en el lugar. Mientras se veían las imágenes, Feinmann dijo: “Ahí está el juguetito”.
“Cuidado que a lo mejor está contento con eso, ¿eh?”, dijo Rossi, en referencia al muñeco. “Sí, le encanta”, asintió Feinmann. “Te digo que a lo mejor está chocho”, insistió el conductor de Hora 17. “Sí, está chocho de la vida”, aportó Feinmann. “Está haciendo un retroceso a la infancia, no sé”, trató de interpretar Rossi y Feinmann remató: “Le parece muy popular, muy bien”.