En LN+, el periodista analizó cómo se entrelaza el crimen que conmueve a Chaco con el poder, en una semana donde, también, el narcotráfico dio la nota
- 5 minutos de lectura'
Jorge Capitanich se está hundiendo en el peor momento de su vida política. Todos los días aparece una noticia que lo mancha, aunque la más grave, obviamente, es la sangre de Cecilia.
Le llueven informaciones que confirman su imagen negativa.
Un nefasto personaje llamado Quintín Gómez acaba de ser denunciado por abuso sexual y violación a una maestra. Es un piquetero aliado a Emerenciano Sena y al propio gobernador. Hoy, el diario La Nación en su página 14 publicó una foto en la que están todos juntos en un acto. Incluso aparece César Sena, el femicida de Cecilia.
Emerenciano y Quintín visitaron juntos al Papa Francisco en el 2017.
Por el escándalo y su probable detención, tuvieron que bajar de la lista de candidatos a diputados provinciales a Quintín Gómez. Es el tercero que debe ser reemplazado. Los otros dos son el propio Emerenciano y su esposa Marcela Acuña que en una carta manuscrita confesó que encubrió a su hijo César.
Del cielo cayó una avioneta con 324 kilos de cocaína valuada en 6 millones de dólares. La pregunta de todos es si la aeronave narco realmente se desplomó o hizo un mal aterrizaje en el Chaco.
Gloria Romero, la madre coraje de Cecilia Strzyzowski, lo supo desde el primer instante. Su hija fue asesinada por César Sena y su familia. Eso ocurrió mucho antes de que se confirmara que la sangre encontrada en esa casa macabra era de Cecilia. Tal vez esto ayude a que los criminales se quiebren y confiesen de una vez por todas el femicidio que salpica a Jorge Capitanich. Gloria, la madre que encabeza las marchas multitudinarias pidiendo justicia, le dijo al gobernador, con todas las letras y en forma pública, que nunca lo iba a perdonar por haber financiado esa mafia disfrazada de piqueteros kirchneristas y guevaristas.
Es que sobran las pruebas y los indicios pero falta el cadáver.
Le recuerdo que Marcela Acuña, con la cara de piedra y el corazón de hielo, acusó directamente a su hijo. Se preguntó desde la cárcel: “¿Por qué nos imputan a nosotros si fue mi hijo?”. Su comentario inhumano completó la declaración ante la justicia cuando dijo que había visto un bulto en la cama, envuelto en una frazada, pero que se fue a comer un guiso de campaña electoral con su esposo, Emerenciano. ¿De qué material están hechos estos salvajes?
La sangre fue descubierta con el tradicional reactivo Luminol. Esas manchas se cotejaron con el ADN de la hermana de Cecilia y dieron más del 99,99% de compatibilidad. Esto cierra prácticamente el caso. Las pericias fueron ordenadas por el equipo de fiscales y realizadas por los profesionales del Instituto de Medicina y Ciencias Forenses de la provincia, en el laboratorio de Biología molecular.
Las manchas se encontraron en el suelo de una habitación y en un colchón y la parrilla de una cama que la familia Sena le regaló a una embarazada al día siguiente del crimen. El chofer que trasladó esos objetos confirmó que todo pertenecía a la familia Sena. Fue un claro intento de encubrimiento.
Los fiscales aseguran que César la estranguló y luego, con Gustavo Obregón, llevaron el cuerpo a la chanchería donde lo trituraron y le prendieron fuego. Después esparcieron los restos por distintos lugares de ese predio siniestro.
Las cámaras de seguridad registraron que la víctima y su ex marido ingresaron a esa casa macabra a las 9.16 hs del 2 de junio y no salió nunca más.
Gran parte de la sociedad chaqueña se puso de pié, derrotó sus propios miedos y las intimidaciones del poder político y llenó las calles con su exigencia del fin de la impunidad para que vuelva la libertad plena a la provincia. Fue una resistencia pacífica en Resistencia, la capital del Chaco. Fue un alarido contra un femicidio que conmovió al país. Gloria se puso la camiseta de la selección nacional, casi como una metáfora de que su dolor era el dolor de todos y que el horror al autoritarismo populista chaqueño, también era y es el horror de todos.
Emerenciano y Marcela Acuña son los líderes de un grupo piquetero mafioso y extorsionador, que funcionó hasta ahora como grupo de choque de Jorge Milton Capitanich.
Coqui y Emerenciano tienen una sociedad y una connivencia estrecha. Se expresó en infinidad de situaciones. Fue padrino de la boda del matrimonio, prologó el libro biográfico sobre él que escribió ella y fomentaron juntos actividades autoritarias y prepotentes.
Con una disciplina castrista y castrense, izan la bandera de Cuba en una escuela cuyos uniformes tienen la estrella roja y la imagen del Che Guevara.
César está imputado por homicidio triplemente agravado por el vínculo, por el concurso premeditado de dos o más personas y por haberse realizado en un contexto de violencia de género. La pena para estos delitos es de prisión perpetua.
El acusado del asesinato no pudo ocultar los rasguños que tenía en el cuello, una lesión típica producida por alguien que se está defendiendo de un ataque.
Parece una película de terror pero todo está escrito en el expediente de la justicia. Más tenebroso imposible.
Está claro que estos criminales se sentían impunes y parte del poder violento y autoritario que ejerce Capitanich. En las últimas elecciones PASO, el oficialismo sufrió una fuerte derrota. Todos los caminos llevan a Capitanich. Emerenciano Sena se manejaba como un poder autónomo dentro del poder constitucional. Un gobernador paralelo que en su momento, le prohibió la entrada al Chaco al entonces presidente Mauricio Macri.
¿Realismo mágico o decadencia populista?
El ministerio de la Nación que se ocupa de la violencia contra las mujeres no dijo una palabra ni desarrolló ninguna acción. El colectivo de mujeres llamado “Ni una menos”, copado en su cúpula por el kirchnerismo tampoco abrió la boca. Solidaridad selectiva. A los femicidas, si son del palo todo, a los enemigos ni justicia.
Jorge Capitanich en su peor momento. Manchado con la sangre de Cecilia. Tal vez las urnas hagan justicia.