Los vinos de menos de 200 pesos son la categoría más amplia del mercado, por eso no es fácil encontrar etiquetas de muy buena calidad entre tantas bodegas y marcas. Si bien no hay tipicidad, ni complejidad, ni elegancia, ni potencial de guarda, ni otros atributos reservados para los vinos más caros, sí hay algunos tintos, rosados y blancos ricos, frescos y frutados y fáciles de tomar. Por sus características y precio, son livianos, bebibles, suaves al paladar e ideales para acompañar las comidas de todos los días. Hoy la industria busca nuevos consumidores y los diversos varietales y cortes (entre 100 y 200 pesos) están empezando a mostrar una creciente calidad y una versatilidad importante. Aquí, cinco buenos vinos que se destacan entre sus pares.
1 - La Puerta Alta Bonarda 2018
Bodega Valle de La Puerta, La Rioja, $180
La Bonarda es la madre de nuestros vinos comunes y la uva emblemática de La Riojapor la calidad de vinos que produce. Así lo demuestra este ejemplar riquísimo de aromas intensos, boca jugosa y taninos redondos que le dan ese final impecable y equilibrado. Elaborado con uvas del Valle de Famatina, es muy fácil de beber, tiene cuerpo medio y buena fluidez. Su sabor se completa con empanadas de carne, quesos y fiambres y guisos invernales.
2- Fuego Negro Malbec 2018
Bodega Casa Montes, San Juan, $189
Cuantos atributos tiene este Malbec sanjuanino elaborado con uvas del Valle de Tulúm: intensidad aromática, color violáceo, sabor frutado, frescura y armonía, además de taninos dulces y aterciopelados que hacen más placentero cada trago. Tuvo un leve paso por roble, es muy suave al paladar y su sabor perdura mucho tiempo en la boca. Ideal para acompañar cualquier carne jugosa como vacío, bife de chorizo, bondiola o cuadril.
3 - Quara Tannat 2018
Bodega Finca Quara, Salta, $110
Un buen vino no siempre tiene que ser caro, a veces con que sea rico y frutado alcanza, como este Tannat salteño del Valle de Cafayate, sin madera y con muy buena persistencia, textura sedosa, taninos redondos y gran frescura que llena la boca. Su precio y cualidades son suficientes para tenerlo a mano y disfrutarlo todas las veces que se pueda junto a platos cotidianos como milanesas con puré, carne al horno, pastel de papas o pastas.
4 - Aimé Cabernet Sauvignon 2018
Bodega Ruca Malen, Mendoza, $165
Siempre es buena noticia un vino nuevo y más si se trata de un Cabernet de Luján de Cuyo como este: serio, equilibrado, nada concentrado y con una vivacidad que permanece. Se destaca por su carácter suave y frutado y sus taninos maduros que seducen desde el primer trago. No es un vino potente sino más bien amable, de cuerpo ligero y bien fluido, con una larga y placentera sensación al final que recuerda a las uvas recién cosechadas.
5- Recomienda Club Bonvivir: Humberto Canale Blush Rosé 2018
Bodega Humberto Canale, Río Negro, $170. Disponible en BONVIVIR.COM
Frescura y fruta definen a este rosado patagónico elaborado con uvas Merlot del Alto Valle de Río Negro que sobresale por su carácter simple y mineral y sabor refrescante gracias a su marcada acidez. Tiene cuerpo ligero y sólido a la vez, textura tersa y gusto a fruta, pero lo que más impresiona de este vino es su color, intensidad y brillo. Tan versátil y agradable de beber que acompaña perfectamente bien las comidas de todos los días.