Una pareja se tomó una selfie sin sospechar lo cerca que estuvo de una muerte segura
Dos jóvenes fueron a disfrutar de la naturaleza sin saber que la fatalidad los acechaba
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Sophie Pass y su novio Richard, ambos oriundos de Edimburgo, decidieron aprovechar un día, cuyo clima era propicio para disfrutar de la naturaleza. Entonces, tomaron su rumbo hacia el norte de la capital escocesa y se detuvieron en una zona agreste. La pareja aprovechó para relajarse, nadar y sacarse fotos, hasta que se desató una tormenta eléctrica y se refugiaron en su auto. En su vehículo, comenzaron a mirar las selfies que se tomaron y advirtieron que estuvieron cerca de que les caiga un rayo.
“Tuvimos un día increíble en el norte de Escocia nadando salvajemente. El agua estaba en calma, una brisa para mantener alejados a los mosquitos, una buena combinación de sol y nubes de luz, una vida al aire libre y un paisaje impresionantes, ¡las condiciones perfectas!”, contó Pass al medio Edinburgh Live.
Y continuó: “Al terminar de nadar, decidimos dar un paseo por el lago para terminar el día, que es un lugar perfecto para una selfie con unas vistas tan increíbles. Un minuto después de esa foto, Richard se dio cuenta de que mi pelo estaba completamente erizado. No pude sentirlo, y solo entonces me di cuenta de que su pelo también estaba de punta. En ese momento el clima estaba bastante tranquilo, había un poco de llovizna, pero nada que pareciera demasiado siniestro”.
“Nuestro instinto y nuestro nivel de física de la escuela secundaria nos hicieron sospechar que esto del pelo erizado probablemente no era algo bueno y que estábamos en una situación un poco peligrosa, así que rápidamente nos dirigimos de vuelta a nuestro coche”, agregó la pareja, que además contó que les advirtió al resto de los turistas que se encontraban en la zona, sobre la posible tormenta.
De hecho, contaron que los demás caminantes siguieron su ejemplo y también volvieron hacia sus autos. “Aunque cayó un fuerte chaparrón mientras todos estaban en los vehículos, no hubo truenos ni relámpagos”, explicó Sophie Pass.
“Cuando estábamos en el coche miramos la selfie y nos dimos cuenta de lo que estaba ocurriendo en ese momento. Después de buscar respuestas en Google, nos hicimos una idea de la increíble suerte que tuvimos los dos de seguir allí y a salvo, junto con todos los demás en la playa”, agregó la mujer de 33 años para explicar que estuvieron cerca de que les cayera un rayo.
A propósito de las señales del cabello y las tormentas eléctricas, el Servicio Meteorológico Nacional del Reino Unido, Met Office, afirmó que es una relación correcta. “Si se te ponen los pelos de punta (carga eléctrica en la atmósfera) o sientes un hormigueo en la piel, es posible que un rayo esté a punto de caer sobre ti”, informaron.
“La naturaleza es hermosa y todos debemos cuidar de ella, ¡pero Dios mío, ella también puede dar miedo como el infierno!”, concluyó Sophie Pass.
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