En un playroom de punta en blanco, Lucrecia Cornejo y Angie Braun, de Diderot.art, nos muestran cómo transformar un ambiente usando piezas de arte como único recurso.
Lucrecia (izq.) y Angie frente a una obra de Adrián Paiva. Junto al vano, collages “II” y “IV” de Lori Raffo Magnasco ($5.000 c/u). Sobre la banqueta con almohadón rectangular ($1.900, Duveen Tolz), “Hice esto para vos”, de Lobo Velar ($36.000).
ANTES
* Al tener la pared completamente en blanco, el sector de los sillones quedaba un tanto “aplastado”, sin proyección en altura.
* El estar era prolijo y estaba bien decorado, pero le faltaba un toque distintivo para escaparle al efecto ‘caja blanca’.
DESPUÉS
* Con la asesoría de Diderot.art, se seleccionaron obras de artistas contemporáneos y se colocaron no solamente en las paredes sino también en la estantería, que estaba prácticamente vacía. La selección incluye pinturas, collages, fotos y esculturas, y se distribuyeron de forma tal que el espacio cobrara carácter, pero sin convertirlo en una galería de arte.
* En el estante superior, a la izquierda, “La siesta”, foto analógica de Ani Buero enmarcada ($6.500); “Gravedad”, globo terráqueo en una jaula metálica de Andrés Toro ($4.500). Debajo, obra hexagonal de madera y acrílico, parte de la serie “La luna era blanca y negra”, de Jimena Fuertes ($38.000) y “Monstruo”, de Fernando Brizuela: una figura de cómic cubierta en hojas de cannabis ($8.000). En la base, obras en serie marrón, verde y naranja de 24x15cm, de Sergio Bosco ($3.000 c/u). Sobre el sillón, un almohadón con estampa ($1.900, Duveen Tolz) replica, como un guiño, el acrílico de la serié “Húsares” de Andrea Fried ($9.000).
* Sobre el sillón, collages “LXXIV” y “LXV” de Luciana Levinton ($12.000 c/u), foto apaisada “Remera voladora”, de Celina Eslava, impresa en 66x100cm ($16.000) y acrílico de 120x90cm de Agustina Núñez ($35.000). Bajo estas líneas, acuarela “Cogollo”, de Fernando Brizuela ($4.000) y escultura de cerámica esmaltada “El mago”, de Raquel Podestá ($39.000) junto a una lámpara ‘Habana’, también de cerámica, con dimer ($3.450, Duveen Tolz). Abajo a la izquierda, obra de Teodelina Lacroze ($2.500, todo de Diderot.art).
* Se jugó con una composición de formas para darle ritmo al sector: un trío de obras con marco de madera (dos collages y una foto) sobre un sillón, una obra de gran tamaño en el centro, y un inesperado formato angosto y apaisado sobre el segundo sillón.
Animarse al arte online
- Para los primerizos, partir de una cantidad acotada de obras facilita el desafío de elegir entre un mar de opciones. Todas las que se pueden ver en Diderot.art fueron seleccionadas por el ojo experto de la curadora Stefy Jaugust, que propone trabajos de artistas emergentes y consagrados.
- Antes de comprar, podés asesorarte online gratuitamente enviando una foto del espacio que querés resolver, consignando tu presupuesto e incluyendo alguna referencia de qué te gusta. Después vas a recibir un fotomontaje en escala con la propuesta de las especialistas.
- Indeciso-friendly, hay 7 días de prueba para devolver la obra.