La noche del martes 14 de julio nació Faustina, la hija de Tomás Costantini (38) y Micaela Dalla Líbera (28), para sumarse a la familia que armaron con Santino (3) y Valentino (1). Felices por el gran momento que están viviendo, recibieron a ¡HOLA! Argentina en su casa de Nordelta para contar la experiencia del nacimiento de su heredera en plena pandemia. "Tengo la suerte de casi no sentir las contracciones, así que ese día me sentía muy bien. Cuando empecé con el trabajo de parto, hablé con la partera y salimos para la clínica. Llegamos a las diez y media, y una hora y media después, ya había nacido. Fue una experiencia muy linda", cuenta.
–Debido a la pandemia, este embarazo debe haber sido distinto a los demás.
Micaela: Sí, en muchas cosas. Desde un principio fue un embarazo bastante solitario. Esta vez familiares y amigos prácticamente no me vieron con panza. Los últimos meses, que es cuando más se nota, ya había empezado la cuarentena. Sumado a que en la clínica tuve que usar barbijo en la sala de parto. Por suerte, las tres veces que di a luz fue de manera natural y rápida. Tomi siempre llega justo, hace el check in y yo estoy casi pariendo. Es un gran compañero.
Tomás: Me encanta estar presente en ese momento y acompañarla. Esta vez, casi me lo pierdo porque fue muy rápido.
Micaela: Yo me sentí bárbaro en todo momento. Al ser una nena, tuve un poco más de acidez, pero en general no tengo malestares físicos cuando estoy embarazada. Por suerte, tampoco se me sumaron angustias por el Covid-19, tomé muchos recaudos y me fui preparando para llegar tranquila… Ahora que nació tengo un poco de miedo porque estamos en el pico de los contagios y si llego a enfermarme, debería separarme de la beba.
Tomás: Nunca nos imaginamos que íbamos a estar en esta situación en pleno nacimiento de Faustina, pero por suerte Mica siempre transita la maternidad de una manera increíble. Tiene partos rápidos, naturales, a los dos días ya está caminando… Siempre los vivimos con mucha alegría, en todo sentido. Al ser el tercero estábamos más cancheros, además sabíamos que en la clínica tenían bien separado el sector de la maternidad con el de pacientes con Covid. Nunca evaluamos tenerlo en casa porque había que movilizar muchos médicos para que todo saliera bien y no correr riesgos.
–¿Los abuelos ya conocieron a Faustina?
Tomás: De mi parte todavía no. Papá vive cerca, pero tiene 74 años y mamá, 71. Ellos tienen que cuidarse más. Vamos a esperar un poco y encontrar el mejor momento para que la vean.
Micaela: Mamá ya la conoció porque tiene el permiso para asistirme. Al tener tantos hijos chiquitos, todos demandan distintas necesidades y una como madre quiere responder a todos, pero a veces las manos no te alcanzan. Sin la ayuda de mamá no podría. La maternidad es uno de los trabajos más difíciles y a tiempo completo, pero espectacular, los hijos potencian la vida. Siempre soñé con ser madre joven. Me encantan los chicos, disfruto mucho de ellos.
–¿Cómo se tomaron Santino y Valentino la llegada de su hermana?
Tomás: Muy bien. Fue muy emocionante cuando la vieron por primera vez, al llegar de la clínica. Milo [fruto de su anterior relación con Jimena Campisi] no vive con nosotros, así que recién la vio dos días después de que llegamos, pero también estaba feliz porque le encantan los bebés.
Micaela: En esa primera vez de la que habla Tomás, a mí me costó contener las lágrimas, estábamos todos muy movilizados. Fue divino cómo Santino se animó a tenerla en brazos. Durante el embarazo, todo el tiempo me decía: "Qué panza grande, mamá". Él es muy emocional y no se le pasa ningún detalle, quiere saber todo. En cambio, Valentino es un terremoto imparable.
–¿Les gustaría tener más hijos?
Micaela: Siempre decíamos que queríamos tener muchos hijos, pero ahora que llegó la mujer y ya son tres, creo que ponemos el freno. Nos gusta que sean seguidos porque van a ser muy compañeros entre sí y también en unos años ya vamos a poder empezar a disfrutar nosotros de nuevo, como pareja. [Se ríe]. Ahora es una demanda constante.
Tomás: No creo que tengamos más. ¡Esta casa ya es un jardín de infantes! Por suerte, tengo unos suegros divinos que vienen y nos ayudan un montón.
–¿Cómo se definirían como padres?
Micaela: Tomi me sorprendió en su rol de papá, tiene más paciencia que yo. Me ayuda, termina de trabajar y se pone a jugar con ellos. Dicen que las chicas son muy pegadas al papá y él siente que tiene una responsabilidad distinta, así que veremos cómo es este amor dentro de unos años.
Tomás: Mica es una super mujer, muy didáctica, e incentiva mucho a los chicos en todo. Nos complementamos un montón, cubrimos los horarios de cada uno… Ahora que hay que quedarse en casa, además de ser mamá, se luce como maestra jardinera. Somos un gran equipo.
Maquillaje y peinado: Inés Smart
Otras noticias de Eduardo Costantini
- 1
¿La gaseosa cero engorda? Conocé los efectos de estas bebidas en el organismo
- 2
Qué características tienen las personas que fueron abandonadas por sus padres, según la psicología
- 3
Cómo es la mezcla de orégano y vinagre blanco que promete eliminar a las cucarachas
- 4
Las frutas que limpian el colon y son las mejores para prevenir enfermedades