Además de sorprender con la originalidad de sus espacios siempre inspiradores, la visita a Casa Foa es ideal para mirar con atención cómo se usan algunos materiales destinados a la deco y la construcción. Cada vez más evolucionados, los revestimientos y el acero se imponen en ambientaciones racionalistas con sus clásicas formas geométricas y en la combinación de texturas para todo tipo de superficies.
La vuelta del racionalismo
La concepción de la Cocina de autor de Johnson Acero propuesta por María Delia Zaccagnini, ganadora de la Medalla de Oro al Mejor Diseño Interior, se basó el respeto por las líneas puras del Círculo Olivos, la sede de este año de Casa Foa. El protagonismo de los enormes ventanales se jerarquizó y se aprovechó para marcar la distribución de las distintas funciones de esta espectacular cocina para una pastelera. "Para captar la atención hacia el interior les dimos la misma forma ovalada que hay en otros rincones y en la luz cenital que acompaña la forma de la isla de trabajo", explica Zaccagnini. ¿El resultado? Un espacio funcional del que no dan ganas de irse.
Reflejos, luces y sombras
Con brillo, opacos, espejados y con texturas variadas, los revestimientos de Rehau y sus superficies Rauvisio permiten lograr efectos sorprendentes. Uno de los espacios que expone esta tendencia es la Unidad de vivienda + terraza (espacio 46/47): "Pensamos en un proyecto basado en la experimentación con materiales gran calidad y rendimiento", explica el diseñador de interiores Cesar Stivaletta.
Así, paredes revestidas con superficies brillantes dialogan con otras espejadas en los que el espectador se encuentra una y otra vez en una experiencia tan cotidiana como singular. El protagonista es un biombo que divide a la cocina del living, con un diseño facetado en el cual a medida que uno camina se va reflejando, efecto logrado gracias a la elección de sus materiales, el cual genera una atmósfera cálida, estética y funcional.
Acero de lujo
Lejos de las épocas en las que el acero se consideraba frío, los tubos, perfiles y chapas de Ternium se vieron en proyectos vanguardistas e innovadores. Entre los 14 espacios que incorporan este material se destaca el moderno moderno estar llamado Pensar, decir hacer a cargo de las arquitectas Carolina Feller y Melisa Herc. Acá el acero ocupa un lugar protagónico, ya que fue utilizado en el elemento central que organiza el ambiente: un biombo realizado en chapa de perforada de forma hexagonal. El objeto genera en sí un subespacio, casi como una cápsula semitransparente, sin un límite preciso. "La chapa perforada permite esa sensación de transparencia, que enciende el deseo de mirar y descubrir lo oculto que siempre pertenece a una dimensión maravillosa", dicen las arquitectas.