Solo apto para valientes: el imponente parque de diversiones considerado uno de los más peligrosos del mundo
Wansheng Ordovician cuenta con una pasarela con piso de vidrio y columpios sobre un acantilado de 300 metros; una aventura ideal para los amantes del los desafíos extremos
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Si de emociones fuertes se trata, China es el lugar para vivirlas. El país asiático es líder en atracciones extremas que verdaderamente hay que ver para creer. Uno de sus hitos es el parque Wansheng Ordovician, un complejo turístico construido en lo alto de una montaña, a más de 1300 metros de altura, que se destaca por sus estructuras sorprendentes y que solo los valientes son capaces de probar.
Este imponente lugar combina naturaleza y tecnología. Ubicado al suroeste del país en Chongqing, en una península al sobre el río Yangtsé y rodeado de mucha vegetación, el parque ofrece un panorama totalmente distinto para aquellos que son amantes de la aventura.
La que más llama la atención de este lugar de atracciones sin dudas es el Sky Porch, una pasarela de vidrio en forma de A que se inauguró en abril de 2017 y reta a los miles de visitantes a que se animen a cruzarla “con la pisada en el aire”.
Este puente tiene una altura de 300 metros y se ubica más arriba de la cascada Taurus, de la cual se puede disfrutar desde la atracción, ya que esta sobresale de la pared rocosa casi 100 metros hacia el exterior. Por si fuera poco, el parque también ofrece la opción acampar a la noche sobre la pasarela, lo que permite vivir una experiencia todavía más arriesgada.
Con sus 80 metros de largo, esta atracción estrella se erigió como única en el mundo en su estilo, tuvo un costo total de 6,5 millones de dólares y tardó un año en construirse. Tal es la envergadura de la estructura que entró en los Record Guinness como el más extenso de su tipo. No obstante, existen límites: no más de 30 personas pueden pararse sobre esta al mismo tiempo.
Además del Sky Porch, el parque cuenta con diversos puentes. Uno de ellos se erige sobre un acantilado a 150 metros sobre el suelo y se sostiene únicamente por varillas de metal.
Asimismo, se ofrece la experiencia de cruzar un puente colgante cuyo suelo se limita únicamente a tablas de madera unidad entre sí por cuerdas, lo que imposibilita la estabilidad para cruzarlo, ya que además no cuenta con barandas, por lo que las personas que deciden vivir la experiencia, solo cuentan con un arnés para llevar vivos al otro extremo.
Otro de los puentes que constituye un verdadero reto para la supervivencia es uno cuya particularidad es que los peldaños que los separan tienen una distancia entre sí que puede variar de los 80 centímetros hasta los dos metros y medio, por lo que es necesario cruzarlo a los saltos. En esta atracción, muchos de los que se animan terminan colgados en el aire con el arnés.
Por si fuera poco, el parque ofrece la posibilidad de hamacarse a 300 metros de altura. El juego también se encuentra sobre una estructura de metal donde hay largos cables de acero sostienen las tablas sobre las que se sientan los adictos a la adrenalina.
El parque también cuenta con atracciones no aptas para cardíacos como el rafting en sus aguas y la escalada o rapel. No obstante, pese a que son considerados deportes extremos y peligrosos, comparados con la experiencia de cruzar un puente de cristal, son un verdadero tema menor.
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