Grabó su último disco, Cuna de Piedra, afinado en 432 "que es la vibración del corazón". "Hay un montón de músicos que afinaban así antes, es una vibración más sana", dice Fabiana Cantilo, la reina del rock nacional, por teléfono. desde la casa donde pasa la cuarentena sola con sus gatas Alegría y Ganímedes. "La música es curativa: cantar y bailar es un gran remedio para estos días de aislamiento". ¿Qué música cura a Fabi? "Stevie Wonder, desde que lo escuché por primera vez a los diecisiete años que me acompaña y me hace bien… ¡Los Beatles! De los nuevos, Oasis… Toda la gente positiva: Sting, Sheryl Crow, Annie Lennox… y Mozart, ¡que limpia todo!"
Atravesar la cuarentena
–¿Aprendiste algo nuevo sobre vos en esta cuarentena?
–Que puedo: estoy divina y me adapto al caos. Entreno por skype tres veces por semana. Tomo clases de canto por skype con mi profe, Marisa Mere. Estoy tranquila. Creo en el orden y en la disciplina: lavo los platos, la ropa y limpio cuando pinta. Y como parte de mi recuperación tengo mis grupos online de terapia y meditación donde acompañamos a gente que tiene problemas con drogas. No puedo decir el nombre, es el mismo grupo de los Doce Pasos al que van Ron Woods y gente muy famosa y anónima y en el que yo estoy ya hace veinte años. Se trata de hacer el bien, de hacer servicio, de no caer en la ira, en los celos, en la envidia, de no bajar al inframundo…
–¿Pensás que vamos a salir mejores de la pandemia como sociedad?
–Creo que es un momento en el que la naturaleza se puso al mando. El virus es algo muy complicado, pero, al mismo tiempo, estamos adentro y la capa de ozono se cierra, los animales vuelven a lugares en donde no estaban...
–Vas a estar en el Quilmes Rock online este fin de semana, el otro día diste un recital en vivo por Facebook, ¿cómo te llevas con los recitales virtuales?
–Lo del vivo del otro día fue raro: yo estaba chocha cantando y parece que estaba todo en cámara lenta ¡y nadie me avisaba nada! Es como estar en pelotas, y yo seguía, no tenía ni idea. La verdad es que lleva su tiempo poner el celular, pintarse, que no se caiga la conexión... También inventé un spray con alcohol y le tiro a la pantalla, el último que vino a casa fue el veterinario de las gatas y me acusa de que lo rocié con spray.
–Este es tu disco número 14, sentís el reconocimiento del público y de la crítica? El otro día en el vivo que hiciste decías que por ser mujer muchas cosas te costaron mucho más…
–Muchas veces fue el machismo, otras el pelotudismo… También me tuve que bancar muchas cosas por zarpada, por rebelde. Si hacés todo bien, podés quejarte, pero el calavera no chilla. Ahora que estoy bien, también siento el reconocimiento. Y también me siento mejor plantada para pelear por las cosas en las que creo. Odio darle dulce de leche a la gente, prefiero siempre darles cosas nuevas. ¿Por qué voy a cantar Mi enfermedad si puedo darles Superamor? ¡Escuchen De qué se ríen, que es un disco genial producido por Ulises Butrón! Ahora hago lo que quiero porque soy independiente, pero también tengo que actuar para vivir: nunca llegué a ser una rock star tipo Shakira.
–¿Te hubiera gustado?
–Alquilo mi casa, me gasté la plata living la vida loca. Me hubiera gustado tener una casa o un auto, pero aprendí a aceptar y a conformarme con lo que hay, si no viviría protestando. Vendí un departamento y me patiné la plata viajando. Ahora mi personal manager me tiene cagando y no me deja gastar: tengo una vida ordenada.
–Tenías una gira por Europa programada para este mes que ahora pasó para octubre.
–Lo de haber sido tan living la vida loca te hace no ser tan dramática a la hora de los quilombos mundiales. Yo enseguida pensé: "No voy a ir a Europa". Y me dio paz. Me quedo en mi casa tranquila. No soy egoísta. Estamos compartiendo con el mundo una pandemia. Esto es el fin de una era y a la vez el comienzo de otra. Quiero pasar ese mensaje de fe y esperanza.
–¿Hay alguna canción que se te haya pegado más en esta cuarentena?
–Hay una que no: no sé tocar Nada es para siempre jajaja. Ni nunca voy a saber. Ni Mary Poppins. Prefiero decir que no sé. De los hits, me sé Ya fue, esa la voy a tocar este fin de semana. La verdad es que ahora que estoy sola toco más, con la guitarra.
Mi secreto
–Acá es donde te pido que cuentes una historia jamás contada...
–Odio, pero odio probar sonido. Me da una fiaca total. Hay músicos a los que les encanta, como a Fito, que prueba tres o cuatro veces. Yo detesto. Prefiero llegar al lugar el día antes, dormir, meditar… ¡probar sonido es un horror!
Más notas de Coronavirus en la Argentina
Más leídas de Lifestyle
Alimentación. Las 11 reglas para vivir más años, según la familia más longeva del mundo
"Esto no es una pipa". Hoy se cumplen 126 años del nacimiento del pintor belga René Magritte
Para considerar. El alimento que un cardiólogo recomendó no incluir jamás en el desayuno
Secreto de jardín. El fertilizante ideal para hacer crecer las plantas en tiempo récord: se prepara en casa y es barato