San Francisco de Asís: quién fue, su legado y por qué el Papa se inspiró en su nombre
En un nuevo aniversario de su muerte, un repaso por la vida del santo que alcanzó un gran nivel de reconocimiento en 2013, cuando Jorge Bergoglio adoptó su nombre para asumir su papado
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El 3 de octubre falleció Giovanni di Pietro Bernardone, quien luego fue nombrado como San Francisco de Asís, en honor a su lugar de nacimiento y obra en la fe católica. Nacido en 1182 en la ciudad de Asís, Italia, pertenecía a una familia económicamente privilegiada, pero decidió renunciar a la herencia en señal de austeridad. Destacó por su humildad y el desinterés por lo material, lo que constituyó su camino para acercarse a Dios.
Su camino religioso comenzó rápidamente, cuando creó las Tres Órdenes. Esta era un tipo de institución ideológica, avalada por la Iglesia Católica, que seguía un lineamiento espiritual. La primera fue fundada en 1209 con el nombre de los Frati Menori y aún existe en la actualidad con la premisa de “abandonarse totalmente a Dios, profesando la obediencia, la pobreza y la castidad”.
Junto a Chiara Offreduccio, conocida como Santa Clara de Asís, en 1212 fundó la segunda, que se denominó Orden de las Damas Pobres y las Clarisas. En 1221 dio nacimiento a la última, nombrada como la Orden Franciscana Seglar.
En su verso final, Asís dio también su visión de la muerte. En 1226, se recluyó en soledad en el Monte della Verna, donde -según la tradición- dos años antes había recibido en sus manos y pies los estigmas de Cristo. Finalmente, murió el 3 de octubre de 1226, a los 44 años de edad. El 16 de julio de 1228 fue canonizado durante el papado de Gregorio IX. Sus restos descansan en la Basílica de San Francisco de Asís.
El legado de San Francisco de Asís
En 1224 publicó su Cantico delle creature o Cantico dell frate Sole, un escrito en el cual establecía su ideología sobre los elementos del planeta, el agua, fuego y tierra, y las criaturas que la habitan. La primera vez que cobró reconocimiento público fue cuando él y dos de sus amigos cercanos, los hermanos León y Ángel, lo entonaron por primera vez.
Este fue uno de los primeros escritos italianos de la historia y es considerado como una de las obras más importantes de la literatura de ese país. Su originalidad se encuentra en que es el primer cántico que no se basa completamente en Dios o en una figura religiosa.
Una inspiración para el Papa Francisco
La figura de San Francisco de Asís ha sido clave para la Iglesia Católica, por sus valores humildes y solidarios. Sin embargo, su nombre no fue adoptado por ningún Papa hasta el año 2013. Cuando Jorge Bergoglio fue elegido por el cónclave como el nuevo Papa el 13 de marzo de aquel año, tras la salida de Benedicto XVI, sorprendió por inspirarse en este Santo para su nueva denominación.
En 2013, el argentino Jorge Mario Bergoglio se convirtió en el primer Papa jesuita y latinoamericano de la historia. Eligió el nombre de Francisco para promover los valores asociados a este santo y compartir una nueva perspectiva sobre la Iglesia Católica con el mundo, marcada por el acercamiento a la gente.
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