Los investigadores definieron a qué personas alcanza y nombraron diversos tratamientos eficientes para solucionarlo
- 5 minutos de lectura'
Durante años hemos escuchado palabras y expresiones como “ninfomanía”; “adicción al sexo” o “hipersexualidad”, entre otras, para hablar de aquellas personas que sufrían de un deseo sexual “excesivo o exacerbado” o una falta de control en sus comportamientos sexuales. Si bien es cierto que estas palabras tuvieron cierto recorrido, hoy en día son términos anticuados.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluyó después de mucho trabajo en 2018 la etiqueta “Trastorno por Comportamiento Sexual Compulsivo” (TCSC) para denominar la enfermedad de aquellos pacientes que acuden a consulta con un descontrol en su conducta sexual que no pueden parar.
¿Cómo son estas personas?
Los criterios de esta clasificación incluyen a personas que:
- Perdieron el control de sus conductas.
- Se esfuerzan en abandonar los comportamientos sexuales y no pueden dejarlos.
- No obtienen placer de estas experiencias.
- Tienen consecuencias graves en las diferentes áreas de su vida durante más de 6 meses.
La OMS hace referencia a que esta problemática no se explicaría por un juicio moral, es decir, que el simple hecho de que a una persona no le parezca apropiado o moralmente bueno no explicaría que exista una patología clínica y susceptible de diagnóstico.
“El sexo se volvió un ansiolítico para mí. Cada vez que sufro y ya no puedo más, la sexualidad se convierte en mi refugio”, me comentaba un paciente de 45 años.
Es habitual observar cómo los pacientes utilizan las conductas sexuales (pornografía, prostitución, chats o webcams sexuales) para regular su mundo afectivo. Cuando los que tienen estas dificultades no saben gestionar sus emociones, acuden al sexo a buscar su serenidad.
Aunque todavía es necesaria más investigación, el TCSC afecta alrededor de un 10,3 % de varones y al 7 % de mujeres de la población general, según el libro Conducta sexual compulsiva: Una mirada integral. Guía para profesionales. Alrededor de un 87 % de los pacientes tiene dificultades con el control del uso de pornografía y entre un 15-20 % conductas sexuales como sexo de pago o infidelidades.
¿En qué afecta a quienes lo sufren?
Las personas que padecen estas dificultades pueden ver afectadas las siguientes áreas:
- Personales: el modo de pensar y entender la sexualidad está distorsionado y aparece la pérdida de autoestima y confianza en uno mismo, sentimientos de incapacidad, alteración del bienestar espiritual, malestar personal, humillaciones o desprecios, vergüenza, culpa y falta de desarrollo de la identidad personal.
- Económicas: pérdida de empleo, gastos de dinero excesivos o improcedentes, chantajes y fraudes.
- Interpersonales: rupturas sentimentales, pérdida de confianza de otros, alteración y dificultades en las relaciones interpersonales, daño emocional a otros, aislamiento social, fallos en el cuidado de una persona querida, rupturas matrimoniales o de pareja y pérdida de amistades.
- Médicas: enfermedades de transmisión sexual, relaciones sexuales físicamente no saludables, disfunciones cognitivas, psicopatologías, disfunciones sexuales y empeoramiento de la salud.
- Otras: problemas legales (denuncias, detenciones), comportamientos irresponsables, renuncia a metas u objetivos importantes, expulsión de organizaciones, asociaciones, etc. y deterioro de la imagen pública.
Los estudios neurobiológicos más destacados observaron que el trastorno por un comportamiento sexual compulsivo muestras alteraciones similares en el cerebro a las que provocan otras adicciones a sustancias y/o comportamientos.
Los centros cerebrales relacionados con la recompensa y la dopamina pueden deteriorarse debido a este descontrol sexual. Además, las áreas del cerebro que regulan el autocontrol, la planificación, la atención y la empatía pueden verse alteradas, según se observa en los estudios más recientes.
Cómo reconocer el trastorno
Algunas claves que nos pueden ayudar a sospechar que una persona sufre este trastorno son:
- Presenta rasgos de impulsividad, incapacidad para retrasar la gratificación o falta de control inhibitorio.
- Cambios en el estado de ánimo como irritabilidad, síntoma depresivos, ansiedad o inestabilidad.
- Presencia de enfermedades de transmisión sexual.
- Dependencia de las tecnologías.
- Bajo rendimiento académico o laboral y absentismos frecuentes.
- Consumo de drogas (alcohol, tabaco, cannabis y otras sustancias).
- Dificultades en la regulación emocional.
- Fuerte inclinación a buscar novedades o sensaciones novedosas.
- Dificultades para la expresión emocional.
- Lenguaje excesivamente sexualizado.
- Problemas de estabilidad en la pareja, infidelidades, etc.
- Poco interés en las relaciones sexuales con la propia pareja.
- Baja o nula formación sexual o una gran culpa respecto de sus actos sexuales.
Pero hay salida. Aunque el camino es largo y requiere de conciencia, motivación, fortaleza, soporte, paciencia, cariño, ayuda y dedicación, la salida sí existe.
En los últimos años, se demostraron diferentes tratamientos eficaces para ayudar a estas personas, que incluyen terapia individual (desde diferentes corrientes, aunque destaca la eficacia de la terapia cognitiva conductual), las terapias de grupo y, en ocasiones, la terapia farmacológica.
Estos tratamientos ayudan a regular las conductas y controlar los impulsos, además de a reaprender una sexualidad sana y vivir una vida más libre. También existen algunas formaciones que pueden ayudar a orientar sobre cómo hacer un abordaje adecuado de esta gran desconocida todavía para muchos profesionales de la salud.
Otras noticias de BBC MUNDO
T Corona Borealis. El raro espectáculo cósmico descubierto por un adolescente que 80 años después sueña con volver a verlo
El Conde Orlok". Cuál es el origen de la historia de Nosferatu y qué relación tiene con Drácula
"Grandes cambios". Las increíbles predicciones sobre 2025 que hizo un programa de la BBC hace 30 años
- 1
La fruta ideal para comer antes de dormir: ayuda a conciliar el sueño y aporta serotonina
- 2
Las hojas y el aceite de un árbol muy conocido son la clave contra los dolores de la artrosis
- 3
Ballester Molina, la pistola argentina usada por una unidad secreta británica para combatir a los nazis en la Segunda Guerra Mundial
- 4
La legumbre que tiene más proteína que el huevo, combate el envejecimiento y aporta magnesio
Últimas Noticias
A considerar. Los beneficios que aportan los granos y cereales integrales: desde siete tipos de vitaminas hasta magnesio
Cómo hacer. Cómo cumplir tus objetivos este 2025 sin complicarte la vida, según un psicólogo
Video. Así es la “calle olvidada” durante más de un siglo: estuvo escondida detrás de la pared de una biblioteca
Ahora para comentar debés tener Acceso Digital.
Iniciar sesión o suscribite