Preocupación: un nuevo estudio sostiene que el “colapso de la sociedad” es inminente
Su autora aseguró que “la civilización se dirige hacia un declive terminal del crecimiento económico”, aunque destacó que aún se está a tiempo de cambiar
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Un nuevo estudio realizado por una ejecutiva de la firma holandesa KPMG, una de las empresas de asesoría legal y fiscal más reconocidas del mundo, corroboró una advertencia que los investigadores del MIT habían realizado hace casi 50 años respecto del riesgo de colapso de la sociedad actual. Si bien muchos países esperan un crecimiento económico luego de la pandemia por coronavirus, nuevos datos empíricos alertan sobre los riesgos de volver a una “normalidad”.
Todo surge de una investigación realizada en 1972 por científicos del MIT, quienes estudiaron los riesgos del colapso de civilizaciones e identificaron los “límites al crecimiento” (LtG, por sus siglas en inglés). El informe había sido encargado por el Club de Roma al MIT con el propósito de proyectar a 100 años los efectos de un desarrollo productivo infinito en un planeta de recursos finitos.
Las conclusiones del trabajo fueron devastadoras: la civilización industrial estaba camino al colapso, que llegaría durante el siglo XXI debido a la explotación de los recursos naturales. Si bien en su momento el análisis generó un fuerte debate, finalmente las potencias “desoyeron” las advertencias y continuaron su desarrollo.
Sin embargo, el nuevo estudio de Gaya Herrington, directora de Asesoría, Auditoría Interna y Riesgo de Ingreso de KPMG en Estados Unidos, volvió a poner en alerta a todos.
Un nuevo análisis
El estudio de la ejecutiva fue publicado el año pasado en el Yale Journal of Industrial Ecology y está disponible en la web de la compañía. Asimismo, el portal Vice describió la principal conclusión de la investigación: la civilización se dirige hacia un declive terminal del crecimiento económico. Se estima que el colapso sucederá en la próxima década o alrededor de 2040.
La importancia del estudio radica en que es la primera vez que alguien de una firma internacional de primer nivel analiza el tema de los LtG. Si bien la investigación no fue realizada a nombre de KPMG, su autora estaba decidida a investigar si el modelo del MIT había “resistido” al tiempo. El estudio formó parte de la tesis de Maestría de Herrington para la Universidad de Harvard, en su rol de asesora del Club de Roma.
La tesis se titula: “Actualización a los límites del crecimiento: comparación del modelo World3 con datos empíricos” y busca comparar nuevos datos fácticos con el modelo del MIT.
Conclusiones de la investigación
A través de su investigación, Herrington analiza datos de 10 variables clave: población, tasas de fertilidad, tasas de mortalidad, producción industrial, producción de alimentos, servicios, recursos no renovables, contaminación persistente, bienestar humano y huella ecológica.
“No es posible continuar con el negocio como de costumbre, es decir, perseguir un crecimiento continuo. Incluso cuando se combina con el desarrollo y la adopción tecnológicos sin precedentes, los negocios habituales como los modela LtG inevitablemente conducirían a disminuciones en el capital industrial, la producción agrícola y los niveles de bienestar en este siglo”, sostiene el estudio.
Sin embargo, Herrington aclaró a que en los modelos MIT World3, el colapso “no significa que la humanidad dejará de existir”, sino que “el crecimiento económico e industrial se detendrá y luego disminuirá, lo que dañará la producción de alimentos y los niveles de vida”.
En el trabajo, la autora plantea dos escenarios, el “BAU2” (negocio como de costumbre) y el “CT” (tecnología integral). El primero estima una interrupción en el aumento de los niveles de bienestar global alrededor de 2020 y afirma que habrá un colapso claro a partir de 2030. En tanto que el segundo apunta a que el declive es alrededor de esa fecha y que las consecuencias serán negativas, pero no conducirán a un colapso social. Ambos escenarios “parecen alinearse bastante estrechamente no solo con los datos observados”, asegura Herrington.
Sin embargo, existe un tercer escenario, conocido como “SW” (mundo estabilizado), que es el más “optimista”, pero es el que menos se ajusta a los datos empíricos. En ese planteo, la sociedad persigue un camino sostenible y experimenta las menores disminuciones en el crecimiento económico, a la vez que combina innovación tecnológica e inversión en salud y educación.
¿Una solución?
El estudio destaca que el progreso tecnológico y el aumento de las inversiones en servicios públicos no solo podrían evitar el riesgo de colapso, sino que también podrían conducir a una nueva civilización estable y próspera que se desarrollará dentro de los límites del planeta. Sin embargo, aclara que solo se cuenta con la próxima década para cambiar el rumbo del mundo.
“Los datos se alinean más con los escenarios CT y BAU2 que indican una desaceleración y una eventual detención del crecimiento dentro de la próxima década, pero World3 deja abierto si la posterior disminución constituirá un colapso”, completa la investigación.
Aunque el tercer escenario, el optimista, es el más lejano, “todavía es posible un cambio de trayectoria deliberado provocado por la sociedad que para dirigirse hacia otro objetivo que no es el crecimiento”. En este sentido, el estudio informa: “El trabajo de LtG implica que esta ventana de oportunidad se está cerrando rápidamente”.
“Necesitamos un enfoque decidido ante la crisis ambiental. Los cambios necesarios no serán fáciles y plantearán desafíos de transición, pero aún es posible un futuro sostenible e inclusivo”, observó la autora del estudio durante una presentación en el Foro Económico Mundial en 2020.
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