Por qué una persona ocupada hace más cosas que quien tiene más tiempo libre
Lejos de la clasificación entre personas eficientes y procrastinadoras, la percepción de la utilidad de nuestro tiempo se relaciona más con el sentido de las tareas que realizamos y no con tener la agenda completa. No sabemos por qué la gente ocupada tiende a hacer más cosas que los que tienen más tiempo libre pero sí sabemos que las personas más ocupadas son aquellas que encuentran sentido en lo que hacen. No lo digo yo. Lo afirma Carlos Álvarez Teijeiro, director de la Maestría para la Gestión del Cambio de la Universidad Austral: "La cuestión central es encontrarle o no sentido al tiempo. Los que lo encuentran no sólo son capaces de trabajar con mayor intensidad, sino que también pueden vivir el resto de su tiempo con esa misma intensidad". Por lo tanto, el sentirse ocupado no necesariamente tiene connotaciones negativas como el agobio o el cansancio, estados con los que se suele asociar al término ocupado, sino que la ocupación, una vez más, tal como lo afirma Eduardo Rodríguez Moreno, Profesor de Administración del Tiempo en UADE Business School, se relaciona "con hacer lo que tiene sentido para uno".
Se trata de regresar a la definición del término "ocupado" que significa que un espacio está siendo disfrutado por alguien. Así, de la misma manera, aplica a cuando una persona está concentrada haciendo algo y en ese momento no puede hacer otra cosa.
La motivación
Las ventajas que tienen las personas ocupadas es que son capaces de distinguir entre aquello que realmente es útil, importante o urgente de lo que no lo es. Y no sólo eso, sino que también están acostumbradas a planificar una agenda que están dispuestas a cumplir porque fundamentalmente se sienten motivadas a hacerlo. La motivación no es menor en la vida de una persona ocupada plena, siempre y cuando se entienda a la ocupación dentro de los márgenes de sus connotaciones positivas. En otras palabras: las personas ocupadas pueden hacer muchas cosas durante sus días porque se sienten motivadas, satisfechas y, en algún sentido, felices con sus actividades.
"En general, aquellos sujetos que aprovechan el tiempo se sienten impulsados por deseos propios y no ajenos, es decir, por una motivación que es interna y no externa, de lo contrario, si el refuerzo viene desde afuera dura poco y no alcanza", asegura Claudia Quiroga Daldi, consultora psicológica de la Asociación Argentina de Counselors.
Motivación, ocupación y satisfacción forman entonces un círculo virtuoso: "Cuando una persona está automotivada a hacer algo se dedica plenamente a ello sin tiempo para pensar ni distraerse con otra cosa", indica el experto de la UADE. Además cuando uno es eficiente se siente valorado por el entorno y tiende a formarse una imagen de sí mismo acorde con esa valoración positiva, entonces, el afuera no hace más que reforzar las buenas conductas internas para optimizar mejor aún el tiempo y cumplir de esta manera tanto con las expectativas propias como con las ajenas.
En otras palabras, las personas que saben aprovechar el tiempo, ordenar las actividades diarias y cumplirlas lo hacen porque, lejos de agobiarse con lo que hay que hacer, encuentran sentido y satisfacción tanto en su trabajo como en el tiempo libre con el que cuentan.
¿Ocupado es igual a agobiado?
Estar ocupado no es lo mismo que sentirse agobiado. La persona ocupada aprovecha el tiempo y encuentra satisfacción en sus actividades, mientras que aquellos que se perciben como agobiados dejan de sentir placer en lo que hacen y todas las tareas empiezan a pesar tanto que quien las realiza se siente casi arrastrado a hacerlas. "Hay una gran diferencia entre una sensación y otra. Pero de esa diferencia sólo puede dar cuenta la persona ya que las actividades no son abrumadoras o no en sí mismas sino con respecto a quien las hace", señala Quiroga Daldi.
Nos empezamos a sentir agobiados cuando las demandas del ambiente son más grandes en intensidad, frecuencia o cantidad que las respuestas que podemos dar. La licenciada María Fernanda Giralt Font, Directora de INECO Bienestar, apunta que "cuando nos sentimos sobrecargados es habitual que se desencadene la respuesta del estrés y la sensación de que el tiempo o la vida entera no alcanza para cumplir con todo".
Consejos para ser una persona ocupada y feliz
INECO. Licenciada María Fernanda Giralt Font.
- 1-"Utilizar una agenda que incluya no sólo las obligaciones sino también los tiempos de ocio, actividad física, recreación y tareas personales."
- 2-"Aprender a decir que no a aquellas actividades o tareas que no sean prioritarias para uno mismo."
- 3-"Ignorar los restantes objetivos hasta haber conseguido aquellos de mayor prioridad.
- 4-Incluir en el horario tiempo para imprevistos e interrupciones (embotellamientos, demoras, etc.)."
Asociación Argentina de Counselors. Claudia Quiroga Daldi, consultora psicológica
- 1-"Evitar fijarse objetivos imposibles de cumplir y organizarnos en forma realista."
- 2-"Buscar ayuda, no necesitamos transitar en solitario las dificultades."
- 3- "Sobre todo escucharnos, si las actividades abruman es momento de plantearse cambios, teniendo en cuenta que las personas más eficientes y productivas son aquellas que aman lo que hacen, y aún en aquello que no se puede cambiar a pesar de desearlo, el clarificar la motivación que impulsa permite que su realización resulte más amigable."
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